AUSCHWITZ, las evidencias del horror
1 JUNIO 2014
A pesar de que han transcurrido más de 70 años, los campos de concentración de Auschwitz, en Polonia, continúan siendo un mudo testimonio de los horrores vividos en la Segunda Guerra Mundial. Diario El Día recorrió los principales lugares donde entre 1940 y 1944 se exterminó a miles de personas. Un lugar al que concurren millones de visitantes cada año, que se impactan y que se preguntan el porqué de tanta alevosía.
Lo que se capta en libros, documentales y revistas es nada con el impacto que provoca estar en el mismo lugar que fue el escenario del mayor exterminio de personas en medio de un conflicto bélico. Es Auschwitz. El sitio donde se levantaron los campos de concentraciones y donde los nazis en la Segunda Guerra Mundial llevaron a cabo el asesinato de más de un millón de seres humanos.
A pesar de que han transcurrido más de siete décadas, el tema continúa siendo sensible. Hay quienes insisten en que es un error mantener intactos las barracas o lugares que fueron testigos del horror y la muerte. Sin embargo, quienes defienden este museo de sitio concuerdan en que es una forma de darle a conocer al mundo los errores y atrocidades que se cometieron.
Un equipo periodístico de diario El Día llegó hasta Cracovia y se desplazó hasta Auschwitz. Con una delegación chilena recorrimos las áreas más sensibles de los campos de concentración guiados por el sacerdote polaco Marci Schmidt.
Corroboramos cómo el tema provoca sentimientos encontrados. En todo caso, es un efecto similar al que generó en Chile la construcción del Museo de la Memoria en Santiago, donde se hace un recorrido por la violación de los derechos humanos en nuestro país durante el régimen militar que encabezó Augusto Pinochet Ugarte. Incluso, fue impactante escuchar durante el recorrido en Auschwitz, que algunos artefactos eran muy similares a los que existían en Villa Grimaldi.
MARCAS DEL HORROR
En medio de los horrores que provocó la Segunda Guerra Mundial, Auschwitz es recordado y definido como el ejemplo más macabro de hasta dónde puede llegar la crueldad humana. El lugar donde los adoradores de Adolfo Hitler asesinaron a millones de personas.
Se convirtió en uno de los campos de concentración nazis en los que más personas perdieron la vida. Las cifras que entregan en el recinto establecen que perecieron un millón y medio de judíos, gitanos y que eran considerados enemigos de Hitler.
Actualmente, las instalaciones se utilizan como un museo de sitio y con el objetivo de que el mundo conozca las atrocidades cometidas, pero sobre todo para evitar que se puedan repetir en el futuro y que la acción no sea olvidada.
El campo de concentración en Polonia no fue al azar. Surgió luego de la toma de este país por el ejército nazi. Hitler se había obsesionado con «alemanizar» el territorio conquistado. Es por ello que avaló que los judíos fueran colocados en guetos, sin escapatoria. En paralelo se lograba aterrorizar a la población.
Paradójicamente Auschwitz había sido ideado como un lugar de encarcelamiento de prisioneros en forma transitoria. Sin embargo, se terminó por convertir en el principal campo de exterminio.
En 1941 las detenciones de judíos aumentaban considerablemente y se decidió la construcción del campo Auschwitz-Birkenau que se situó a tres kilómetros del campo principal.
De hecho, es la infraestructura más conocida actualmente y donde se delineó la operación exterminio que se denominó la “solución final”. Se trató del alevoso asesinato de hombres, mujeres y niños judíos. El objetivo era uno sólo: Eliminar esta raza y promover una de calidad superior.
Este fue el inicio del infierno para las más de 100 mil personas que ya estaban hacinadas en los dos campos de concentración. La vida era inhumana.
PARADOJAS QUE IMPACTAN
Al acceder al campo de concentración lo primero que llama la atención es el cartel de bienvenida.
“El trabajo te hará libre”. Una verdadera bofetada para quienes vivieron el horror del holocausto. Este mensaje aún se conserva como una prueba del desprecio que existió en los momentos más duros. Una señal del verdadero infierno que padecieron quienes estuvieron en el lugar.
Otra área sensible y que igualmente se conserva intacta es una pared que se destinó para el fusilamiento de las personas. Es por ello que junto con las oraciones es un sector que pasa lleno de flores y mensajes.
Auschwitz también se había hecho famoso por la instalación de la primera cámara de gas que comenzó a operar el 15 de agosto de 1940. De hecho, el acceso a este macabro lugar es la última parte de la ruta. Aún se conservan los hornos donde se introducían los cuerpos y los orificios o chimeneas por donde los prisioneros esperaban que cayera la ducha para asearse, pero que, en su reemplazo, daban paso al gas de la muerte.
Para la delegación chilena fue uno de los momentos más impactantes. El lugar se transformó en la prueba palpable de hasta dónde podía llegar el horror.
En Birkenau se encontraban los crematorios II al V y que fueron terminados en junio de 1943. Estaban equipados con una cámara de gas. Antecedentes de la S.S. precisaban que podían ser quemados 4.756 cadáveres diarios.
Los especialistas afirman que Auschwitz es el ejemplo concreto de las atrocidades que dejó la Segunda Guerra Mundial. Sin embargo, lo que más se cuestiona es que se transformó en el sitio donde se llevó a cabo un planificado exterminio de seres humanos, donde nada se dejó al azar. A medida que se avanza en el recorrido por el campo de concentración crece la impotencia y el impacto. Los visitantes logran establecer que los cuerpos no fueron sepultados, sino que simplemente quemados y sus cenizas esparcidas por alrededor de los mismos campos.
Los módulos que más impactan son las vitrinas donde se almacenan restos de cabellos, maletas y objetos de niños. Hay quienes sostienen que esta presentación está de más y que sólo se exacerbaría el morbo y la crueldad. Sin embargo, el religioso precisa que el mostrar prendas u objetos de menores demuestra claramente la profundidad de la crueldad.
PAGANDO UN ALTO PRECIO
En los campos de concentración los presos no sólo fueron asesinados de manera violenta. Miles de ellos murieron de hambre y muchos fueron obligados a labores forzadas quedando en condiciones infrahumanas. Incluso fallecían de agotamiento. Imágenes que se exponen en las salas demuestran cómo los cuerpos simplemente eran arrojados a zanjas sin el más mínimo respeto.
Al recorrer Auschwitz cuesta entender las razones del por qué tanta crueldad y alevosía. Tanto ensañamiento con mujeres y niños. Pese a que han pasado 70 años, en el lugar aún se respira el dolor y la congoja. Cada cierto tiempo las cenizas del horror parecen prenderse.
Las teorías eran inconcebibles. Tanto los judíos como los gitanos y los eslavos eran catalogados de seres humanos inferiores dentro de la estructura social de la S.S. Incluso, llegaban hasta el extremo de precisar que éstos no formaban parte de la sociedad humana. Las mujeres vivieron un verdadero infierno.
No sólo estaban hacinadas por falta de espacios, también recibían vejaciones y malos tratos.
El horror culminó cuando el ejército ruso llegó hasta Polonia a liberar Auschwitz y el 18 de enero de 1944 las tropas alemanas abandonaron el país. Sin embargo, se encargaron de eliminar la mayor cantidad de pruebas de los crímenes. Volaron los crematorios y quemaron toda la documentación existente sobre la cantidad de víctimas.
Las tropas rusas liberaron a los pocos prisioneros que los alemanes no habían asesinado.
Fuente: http://diarioeldia.cl/articulo/auschwit ... ias-horror