Apertura de archivos nazis podría impulsar compensaciones
INTERNACIONALES - 3/12/2006
ARTHUR MAX
AMSTERDAM /AP — El acceso del público a millones de documentos nazis de la Segunda Guerra Mundial, que se conservaron inaccesibles durante 60 años, podría ayudar a los sobrevivientes del Holocausto a recibir grandes sumas en compensaciones, indicaron organizaciones de personas que quedaron con vida.
Los planes para abrir los archivos en Bad Arolsen, Alemania, actualmente bajo administración de la Cruz Roja, deberán persuadir a las comisiones que se encargan de entregar las compensaciones para los sobrevivientes a que "se detenga el juicio prematuro" en fijar dichos pagos, afirma la Fundación para Sobrevivientes del Holocausto-Estados Unidos, una coalición nacional de organizaciones de sobrevivientes estadounidenses.
Algunos de los que quedaron con vida también están apelando una decisión de una corte federal que desestimó una demanda colectiva contra la empresa de seguros italiana Assicurazioni Generali, por presuntamente haberse negado a pagar lo estipulado en las pólizas de seguro previas a la Segunda Guerra Mundial.
"A los sobrevivientes se les ha negado la información necesaria que necesitan para organizar un desmantelamiento completo y efectivo de las cadenas de esquilmadores europeos que se enriquecieron de manera ilegal", señaló una carta abierta de la coalición, que integra a más de 24 grupos y representa a unos 20.000 sobrevivientes del Holocausto.
La misiva del 21 de noviembre, firmada por los directores de 10 organizaciones de sobrevivientes, cita un informe de The Associated Press sobre el gigantesco acervo de documentos que se conserva en Bad Arolsen. El archivo, que cuenta con unas 50 millones de páginas, está bajo control del Servicio Internacional de Búsqueda (ITS, por sus siglas en inglés), una división del Comité Internacional de la Cruz Roja.
El informe "confirma lo que los sobrevivientes han afirmado desde hace años", indicó el viernes Sam Dubbin, un abogado que representa a los grupos.
Las demandas deben ser resueltas con "una contabilidad completa y profunda de lo que esas empresas robaron, cómo lo robaron y las cifras que fueron robadas", agregó.
Los archivos contemplan hileras de hasta 26 kilómetros de longitud entre las que se encuentran listas de transportes, registros de los campos de concentración, libros sobre decesos y archivos de personas desplazadas.
Los archivos fueron recolectados después de la guerra para buscar a personas desaparecidas y posteriormente para verificar reclamaciones si se presentaba una solicitud.
Hasta ahora, el ITS no ha permitido que investigadores independientes escudriñen los archivos ni ha permitido que la información sea de acceso público, citando razones de privacidad.
Sin embargo, en mayo pasado, una comisión de 11 naciones que administra estos archivos decidió abrirlos para que sean de acceso más amplio para el público. Pero aún está pendiente la ratificación de ese acuerdo y hasta entonces no se podrán elaborar y distribuir copias digitales de los documentos del archivo para ser entregadas a instituciones vinculadas directamente con el suceso histórico.
Fuente: http://www.eldiariony.com