By josssse2
THE ROOTS OF BLITZKRIEG: Hans Von Seeckt and German Military Reform
James Corum (University Press of Kansas, 1992)
El 11 de noviembre de 1918 se firmaba el armisticio con el que finalizó la Primera Guerra Mundial. Resulta sorprendente descubrir que al día siguiente los oficiales del Alto Estado Mayor alemán se pusieron a estudiar el pasado conflicto tratando de descubrir en qué habían fallado y cómo podían utilizar toda la experiencia acumulada para ganar la siguiente guerra. En esta ardua tarea, de la que saldría el ejército alemán que sorprendió al mundo en la primera mitad de la Segunda Guerra Mundial, tuvo un papel especialmente destacado el general Hans Von Seeckt, jefe del Reichswehr desde 1919 hasta 1926.
La presente obra no es, no obstante, una biografía de Von Seeckt, aunque incluye los suficientes apuntes biográficos y sobre su participación en la anterior guerra para comprender, por ejemplo, cómo uno de los generales más laureados en un conflicto, que en occidente se caracterizó por la guerra de posiciones, pudo luego imponer al ejército alemán una doctrina basada en la guerra de movimiento. El libro de Corum es probablemente el ensayo más meticuloso que existe sobre la época y el tema en cuestión.
En el primer capítulo se nos habla de las lecciones aprendidas en la anterior guerra, y se resalta como Von Seeckt, cuya experiencia fue ganada en gran parte en el frente oriental, no tenía, por eso mismo, la prevención de otros oficiales contra la guerra de movimientos. En los tres siguientes se discuten las nuevas ideas que aportó Von Seeckt, su discusión en el seno del nuevo Alto Estado Mayor oculto bajo la denominación de Truppenamt y su imposición. En pocas palabras se trataba de crear una pequeña fuerza dentro de los límites del tratado de Versalles, altamente profesionalizada, equipada con los últimos avances en armamento y completamente mecanizada que pudiese, en caso de conflicto, actuar como fuerza de acción rápida y base para una posterior expansión del ejército.
Posteriormente se trata el entrenamiento y formación dentro del Reichswehr de la época. Un ejército que por limitaciones del tratado tenía muchos más suboficiales que el resto de las fuerzas europeas, al estar limitado el número de oficiales. Una fuerza cuyas duras pruebas de ingreso hacían que solo entrasen los mejores, y con una formación teórica y, sobre todo, práctica que la convirtió ya al final de los años 20 en la mejor del mundo, según declaran en la presente obra varios oficiales americanos que estuvieron inmersos en programas de intercambio con los alemanes.
No menos fundamental es la importancia dada a la industria y la innovación tecnológica en campos prohibidos por el tratado de Versalles como la aviación militar, disfrazada de compañías civiles y, sobre todo, el arma acorazada y las comunicaciones en los que se pondría un énfasis especial. Es interesante sobre todo los trucos y subterfugios usados para saltarse el tratado, la imaginación desplegada en los ejercicios prácticos para representar el arma prohibida y, sobre todo, las pruebas realizadas en el extranjero que acabarían en los tratados con la URSS y la escuela de tanques de Kazán.
Finalmente se nos cuenta detalladamente la evolución que daría la primacía a los bombarderos tácticos y la doctrina de armas combinadas que desembocaría en la guerra relámpago. Hace Corum especial énfasis en las ideas que se han venido imponiendo durante tantos años sobre la Blitzkrieg como copia de técnicas británicas para decir que, si bien había en la Truppenamt una actividad investigadora inusitada que absorbía todo tipo de aportaciones, los oficiales alemanes bajo las directrices de Von Seeckt procesaron toda aquella información de una manera original que daría origen a una forma de hacer la guerra que poco o nada tenía que ver con las aportaciones particulares de cada autor extranjero.
Por todo ello, la presente obra resulta muy interesante tanto para el historiador como para el simple aficionado. Es una pena, eso sí, que no esté disponible en nuestro idioma y creo que una edición en español sería muy bien recibida en estos momentos tras Achtung Panzer!
La presente obra no es, no obstante, una biografía de Von Seeckt, aunque incluye los suficientes apuntes biográficos y sobre su participación en la anterior guerra para comprender, por ejemplo, cómo uno de los generales más laureados en un conflicto, que en occidente se caracterizó por la guerra de posiciones, pudo luego imponer al ejército alemán una doctrina basada en la guerra de movimiento. El libro de Corum es probablemente el ensayo más meticuloso que existe sobre la época y el tema en cuestión.
En el primer capítulo se nos habla de las lecciones aprendidas en la anterior guerra, y se resalta como Von Seeckt, cuya experiencia fue ganada en gran parte en el frente oriental, no tenía, por eso mismo, la prevención de otros oficiales contra la guerra de movimientos. En los tres siguientes se discuten las nuevas ideas que aportó Von Seeckt, su discusión en el seno del nuevo Alto Estado Mayor oculto bajo la denominación de Truppenamt y su imposición. En pocas palabras se trataba de crear una pequeña fuerza dentro de los límites del tratado de Versalles, altamente profesionalizada, equipada con los últimos avances en armamento y completamente mecanizada que pudiese, en caso de conflicto, actuar como fuerza de acción rápida y base para una posterior expansión del ejército.
Posteriormente se trata el entrenamiento y formación dentro del Reichswehr de la época. Un ejército que por limitaciones del tratado tenía muchos más suboficiales que el resto de las fuerzas europeas, al estar limitado el número de oficiales. Una fuerza cuyas duras pruebas de ingreso hacían que solo entrasen los mejores, y con una formación teórica y, sobre todo, práctica que la convirtió ya al final de los años 20 en la mejor del mundo, según declaran en la presente obra varios oficiales americanos que estuvieron inmersos en programas de intercambio con los alemanes.
No menos fundamental es la importancia dada a la industria y la innovación tecnológica en campos prohibidos por el tratado de Versalles como la aviación militar, disfrazada de compañías civiles y, sobre todo, el arma acorazada y las comunicaciones en los que se pondría un énfasis especial. Es interesante sobre todo los trucos y subterfugios usados para saltarse el tratado, la imaginación desplegada en los ejercicios prácticos para representar el arma prohibida y, sobre todo, las pruebas realizadas en el extranjero que acabarían en los tratados con la URSS y la escuela de tanques de Kazán.
Finalmente se nos cuenta detalladamente la evolución que daría la primacía a los bombarderos tácticos y la doctrina de armas combinadas que desembocaría en la guerra relámpago. Hace Corum especial énfasis en las ideas que se han venido imponiendo durante tantos años sobre la Blitzkrieg como copia de técnicas británicas para decir que, si bien había en la Truppenamt una actividad investigadora inusitada que absorbía todo tipo de aportaciones, los oficiales alemanes bajo las directrices de Von Seeckt procesaron toda aquella información de una manera original que daría origen a una forma de hacer la guerra que poco o nada tenía que ver con las aportaciones particulares de cada autor extranjero.
Por todo ello, la presente obra resulta muy interesante tanto para el historiador como para el simple aficionado. Es una pena, eso sí, que no esté disponible en nuestro idioma y creo que una edición en español sería muy bien recibida en estos momentos tras Achtung Panzer!