Os copio el enlace a un interesante análisis sobre la posible relación entre el Parkinson que padecía Hitler y el final de la IIGM.
Personalmente, cada vez me decanto más por una toxicidad neurológica galopante provocada por toda la porquería que le estuvo metiendo su médico Morell, que por un diagnóstico rebuscado: es tan sencillo como que este individuo (Hitler) acabó con el cerebro funcionando como una montaña rusa a consecuencia de los cócteles que le metía ese matasanos.
De todos modos el hombre ya debía traer algún desperfecto de fábrica...
http://www.arsxxi.com/pfw_files/cma/Art ... 660069.pdf
Saludos.