- Buenos noches.
- Hombre Mr. Wyrm, a usted le estaba yo esperando. Herr Clar le ha dejado pagado un vinito y unos calamares.
- Por favor, Sascha, cámbieme el vinito por una caña, y así todos contentos. Por supuesto, un servidor más aún al tener su cañita de la tarde.
- Como guste.
- Mientras tanto le dejo el siguiente enigma para que lo ponga en común con los parroquianos.
- Adelante.
- Esta vez vamos a tratar de dar con un oficial, uno de los más condecorados de su rama de servicio. Sin embargo, aunque multicondecorado, no recibió la más alta condecoración que otorga su país de nacimiento. Si la segunda más alta, y por duplicado.
- Apuntado queda el dato. ¿Más pistas?
- Aunque la siguiente no es muy esclarecedora, si que nos pone en el buen camino: Nuestro hombre hablaba múltiples idiomas, entre ellos inglés, francés, alemán y hasta castellano.
- Hombre, no hay muchas personas que hablen tantos idiomas...
- Correcto. Pero con ello no podemos decir si era del bando aliado o del eje. Lo que si voy a decir es que no era japonés. De hecho, también voy a decir que estuvo en los ejércitos de dos naciones distintas.
- Parece que se le empiezan a escapar pistas más contundentes, Mr Wyrm.
- Pues hablando de escapar, el hombre que buscamos fue hecho prisionero, pero logró escapar durante los estertores de la guerra.
- ¿Algo más?
- De momento no, ya vale.
- Bien, pues ahora mismo le traigo su caña y su plato de calamares. Un momentito...
Suerte...
