Cuando Australia entró en guerra se encontró con una preocupante falta de cazas modernos; debido a la guerra en Europa, Gran Bretaña, su tradicional suministrador de aviones no podía atenderles; por lo que se decidió la construcción de un caza propio. Sin embargo, los proyectistas se vieron limitados por el requerimiento de que el nuevo avión aprovechase materiales del Wirraway que tan buenos resultados había dado como instructor. El resultado fue el Boomerang que entro en servicio en 1942, pero pronto se mostró como falto de potencia para actuar como caza de primera línea, porque el único motor disponioble era el Twin WAsp de 1200 hps. Sirvió como caza en Australia y avión de apoyo terrestre y señalizador de objetivos para aviones de ataque más pesado, roles que desempeñó con cierto éxito en las selvas del Pacifico, pese a que no podía llevar bombas.