BERLIN, Noviembre 10 de 1937
Acta de La Conferencia realizada en la CancillerÃa del Reich. BerlÃn, Noviembre 5 de 1937. De 4:15 a 8:30 p.m.
Los presentes:
El Fuhrer y Canciller del Reich,
Mariscal de Campo von Blomberg, Ministro de Guerra
Coronel General Baron von Fritsch, Comandante en Jefe del Ejército
Admirante Dr. H.C. Raeder, Comandante en Jefe de la Naval
Coronel General Goering, Comandante en Jefe de Lutwaffe
Baron von Neurath, Ministro de Asuntos Exteriores
Coronel Hossbach
El Fuhrer comenzó diciendo que la importancia del tema a tratar en la presente conferencia era tal que en otros paÃses hubiera requerido la reunión de todo el Gabinete de Gobierno, pero que en su caso habÃa descartado este hecho, basado precisamente en la importancia del mismo. La exposición que el Fuhrer hizo del tema, fue fruto de una completa deliberación y de sus experiencias durante los cuatro años y medio en el poder. Su deseo era exponer a los presentes las ideas básicas relacionadas con los requerimientos y oportunidades existentes para el desarrollo de la posición alemana en el campo de los asuntos internacionales, y pidió a los asistentes que su exposición fuera considerada, en su eventual muerte, como su testamento y última voluntad para proteger los intereses a largo plazo de la polÃtica alemana.
A continuación el Fuhrer expuso que en un principio el principal objetivo de la polÃtica alemana era asegurar y preservar la comunidad racial, para subsecuentemente aumentar su tamaño; lo que hizo de este objetivo una cuestión de espacio.
La comunidad alemana compuesta por más de 85 millones de personas, constituye un núcleo racial contenido dentro de los estrechos lÃmites del espacio habitable disponible en Europa, por lo cual tiene derecho a un mayor espacio de habitación, el cual no pudo ser extendido anteriormente debido a las condiciones polÃticas prevalecientes y al desarrollo histórico. Sin embargo, debe destacarse que la continuación de estas condiciones polÃticas constituye el peligro más grande para la preservación de la raza alemana.
Detener el declive del Germanismo en Austria y Checoslovaquia era tan poco probable como lo era mantener el nivel presente en la misma Alemania. En vez de presentarse un crecimiento en la población, la esterilidad se hacia cada vez mas evidente, y consigo los desórdenes de carácter social, dado que la ideologÃa polÃtica permanecÃa efectiva tan solo cuando esta proporcionaba la base para la realización de las demandas esenciales y vitales de la gente. El futuro de Alemania estaba condicionado a la solución del problema de espacio, y dicha solución debió haber sido contemplada con anterioridad.
Antes de abordar la solución a la necesidad de espacio, suponiendo que la haya, se debe considerar si esta puede ser planteada con base en la autarquÃa o en el crecimiento de la participación alemana en la economÃa mundial.
AUTARQUÃA
Lograda unicamente bajo estricto liderazgo del Estado Nacional Socialista. Asumiendo lo anterior, se pueden establecer los siguientes posibles resultados:
A. En el campo de la materia prima, imponer la autarquÃa parcial.
1) Con respecto al carbon, debido a que puede ser considerado material prima, la autarquÃa es posible.
2) En lo concerniente a los minerales, la posición es mucho más dÃficil. Los requerimientos de hierro, al igual que los de otros metales livianos pueden ser alcanzados con recursos domésticos, lo cual no ocurre con materiales como el cobre y el estaño.
3) Los requerimientos de textiles sintéticos serÃan alcanzables con recursos domésticos si las existencias de madera fueran suficientes.
4) Grasas comestibles. Posible.
B. En el campo alimenticio la respuesta a la autarquÃa debÃa ser un rotundo “NOâ€.
El crecimiento general del estandar de vida comparado con el de hace 30 o 40 años, se ha visto acompañado de un incremento en la demanda y el consumo de los hogares incluso por parte de los productores (los granjeros). Los frutos del incremento en la producción agrÃcola buscan satisfacer la creciente demanda, por lo cual no representan un incremento absoluto de la producción. Un incremento adicional en la produción posible unicamente mediante la exagerada explotación del suelo era prácticamente imposible, dado que debido al uso de fertilizantes artificiales este ya mostraba señas de agotamiento. Adicionalmente, asi pudieran alcanzarse los niveles máximos de producción, la importación de vÃveres era inevitable.
El no despreciable gasto de reservas internacionales para asegurar la provisión de alimentos a través de la importación, suponiendo que las cosechas fueran buenas, crecÃo en proporciones catastróficas cuando se presentaron malas cosechas. La posibilidad de un desastre aumentó proporcionalmente al crecimiento de la población. Es el caso por ejemplo del pan. El exceso de nacimientos produjo un aumento en el consumo de éste dado que los niños son mayores consumidores que los adultos.
En un continente que disfrutaba de un estandar de vida común, era imposible vencer mediante reducción del estandar y racionamiento, las dificultades de provisión de alimentos. De este modo, con la solución al problema del desempleo, el máximo nivel de consumo habÃa sido alcanzado. Algunas pequeñas modificaciones en la producción doméstica serÃan sin duda posibles, sin provocar cambio alguna en nuestra posición con respecto al resto del mundo. Por lo tanto la AutarquÃa es insostenible con respecto a la provisión de alimentos y a la economÃa como un todo.
PARTICIPACIÓN EN LA ECONOMÃA MUNDIAL
A esta hubo limitaciones que fuimos incapaces de remover. El establecimiento de la posición de Alemania sobre una base segura y sólida fue obstruÃdo por las fluctuaciones del mercado y los tratados comerciales no proveyeron garantÃa alguna. En particular, debe recordarse que desde la Guerra Mundial aquellos paÃses que habÃan sido anteriormente exportadores de alimentos se habÃan industrializado. Estabamos viviendo una época de imperios económicos en la cual la urgencia de colonización se volvÃa a manifestar. En el caso de Japón e Italia, motivos económicos alimentaron el deseo de expansión, mientras que para Alemania la necesidad económica generó el estÃmulo necesario. Para aquellos paÃses externos a los grandes imperios económicos, las oportunidades de expansión económica se vieron drásticamente limitadas.
El boom en la economÃa mundial causado por el rearmamiento, no podÃa conformar la base de una economÃa sólida en el largo plazo, este último obstruÃdo sobre todo por los disturbios económicos resultantes del Bolchevismo. ExistÃa una pronunciada debilidad militar en aquellos estados cuya existencia dependÃa del comercio internacional. Dado que nuestro comercio exterior transitaba rutas marÃtimas dominadas por Gran Bretaña, era más una cuestión de seguridad de transporte que de intercambio exterior, lo cual reveló en tiempo de guerra, la total debilidad de nuestra situación en el campo alimenticio.
El único remedio, que podrÃa por cierto parecernos visionario, reside en la adquisición de más espacio habitable, misión que a lo largo de los tiempos ha sido el origen de la formación de estados y la migración de población.
Que dicha búsqueda no fuera de ningún interés para Gran Bretaña o para aquellas naciones saciadas era entendible. Entonces si suponemos que asegurar la situación alimentaria de Alemania es la principal preocupación, el espacio necesario para lograr dicha meta solo puede ser encontrado en Europa, y no en la explotación de colonias, como la perspectiva liberal-capitalista lo establece. Esta no es una cuestión de adquirir población, sino de ganar espacio para uso agrÃcola. Es mas, áreas productoras de materias primas en Europa ubicadas en la inmediata proximidad al Reich, pueden ser más eficientemente adquiridas, que aquellas ubicadas en tierras lejanas; esta solución porlo tanto, deberá ser suficiente durante dos o tres generaciones. Cualquier cosa adicional que pueda ser necesaria más adelante deberá ser manejada por posteriores generaciones. El desarrollo de las grandes constelaciones del mundo polÃtico progresará de manera lenta despues de esto, y el pueblo Alemán, con un fuerte núcleo racial, podrá determinar cuales son los prerequisitos para lograr mantenerse dentro del continente Europeo. En la historia de todas la edades – El Imperio Romano y el Imperio Británico- ha probado que la expansión puede ser llevada a cabo derrotando la resistencia y tomando riesgos. En tiempos anteriores, nunca ha habido territorios sin dueño, y algún dÃa no habrá ninguno más; el atacante simepre tendrá que venirse en contra del actual dueño.
La pregunta para Alemania es entonces determinar donde puede maximizar la ganancia, manteniendo el costo de dicha acción al mÃnimo. La polÃtica alemana deberá calcular las acciones de dos antagonistas inspirados por el odio, Gran Bretaña y Francia, para quienes el coloso Aleman se ha convertido en una piedra en el zapato. Estos dos paÃses se han opuesto a cualquier fortalecimiento de la posición alemana, ya sea en Europa o en tierras lejanas; en dicha posición contaron con el apoyo de sus partidos polÃticos. Ambos paÃses vieron en el establecimiento de las bases militares alemanas en el extranjero el escudo del comercio Alemán, lo cual trajó como consecuencias un fortalecimiento de la posición de Alemania en Europa.
Debido a la oposición de los soberanos, Gran Bretña no puede cedernos ninguna de sus posesiones coloniales. Después del traspaso de Abisinia a Italia, Inglaterra sufrió una gran pérdida de prestigio, por lo cual regresar al Este de Africa no se espera. Las concesiones británicas pueden ser entendidas como un ofrecimiento dirigido a satisfacer nuestras demandas a nivel colonial.
Una seria discusion acerca de la devolución de colonias solo pudo ser considerado en un momento en el cual Gran Bretaña se encontraba en dificultades y el Reich Alemán de encontraba armando y fuerte. El Fuhrer no compartÃa la visión de que el Impero era inquebrantable. La oposición se encontró menos entre los paÃses conquistados que entre los competidores. El Imperio Británico y el Imperio Romano no pueden ser comparados con respecto a su permanencia; el último de ellos no fue confrontado durante las Guerras Púnicas por ningún rival polÃtico de significancia. Fue solamente el efecto de desintegración de laCristianidad, y los sìntomas de la edad, que parecen en cualquier paÃs, los que causaron que la antigua Roma sucumbiera al ataque germano.
Además del Imperio Británico, hoy en dÃa existen un número de estados más fuertes que el. La madre patria británica fue capaz de proteger sus posesiones coliniales a través de su alianza con otros estados. Como, por ejemplo, Gran Bretaña pudiera haber defendido Cánada contra el ataque de América o sus intereses en el Lejano Oriente contra el ataque de Japón!
El énfasis de la Corona Británica como sÃmbolo de la unidad del Imperio es solamente la admisión, a que en el largo plazo, el Imperio no podrá mantener su posición a través del poder polÃtico. Importantes indicadores de esto fueron:
a. La lucha de Irlanda por obetener su independencia.
b. Las luchas constitucionales en India, donde la mitad de las medidas tomadas por Gran Bretaña le dieron a los Indios la oportunidad de usar más adelante como arma en contra del Imperio Británico, el incumplimiento de sus promesos en lo referente a la Constitución.
c. El debilitamiento de Gran Bretaña en el Lejano Oeste gracias a la intervención de Japón.
d. La rivalidad con Italia en el Mediterraneo, que bajo el hechizo de su historia, manejada por la necesidad y dirigida por un genio expandió su posición de poder, interviniendo cada vez más en los intereses británicos. El resultado de la guerra de Abisinia en donde Italia produciendo la conmción del mundo Mohametano logró crecer sus dominios y afectar el prestigio del Imperio Británico.
Resumiendo, puede decirse que con 45 millones de Británicos, la posición del Imperio no pudo mantenerse mediante sus poderes polÃticos en el largo plazo. La taza de la población total del Imperio con respecto a la población que habita la madre patria alemana es de 9:1, lo cual no puede ser una advertencia para nosostros durante nuestra expansión territorial.
La posición de Francia era más favorable que la de Gran Bretaña. El Imperio Francés fue establecido territorialmente de mejor manera, los habitantes de sus posesiones coloniales representaban un suplemento a su poderÃo militar. Pero Francia se enfrentó con dificultades polÃticas a nivel interno. En la vida de una nación cerca del 10% de su territorio es gobernado mediante formas parlamentarias de poder, mientras el 90% lo es mediante formas autoritarias de poder. Sin embargo hoy en dÃa, Gran Bretña, Francia, Rusia y los pequeños estados adyacentes a ellos, deben incluidos como factores (Machtfacktorem) en nuestros cálculos polÃticos.