Publicado: Dom Jul 28, 2013 6:19 pm
Comentario Personal
He visto la película recientemente, y lo he hecho adrede, dejando pasar cierto tiempo desde el estreno comercial, con el fin de no verme influido por los comentarios, positivos y negativos, que acompañaron su aparición en las pantallas.
Ante todo resaltar que quien espere una película que ahonde en las raíces de la implantación del nazismo en la sociedad alemana, o explicaciones sociológicas sobre cómo Alemania se convirtió en el III Reich, se verá decepcionada. De hecho, ni siquiera podemos tener constancia ni conciencia sobre el proceso que sigue Halder desde su existencia como oscuro y anónimo profesor universitario hasta convertirse en un “asesor experto” del aparato nazi en lo relativo a un tema tan espinoso como la eutanasia.
En cuanto a algunos aspectos puramente cinematográficos, mucho se puede opinar acerca de la elección de los actores y la dirección de Vicente Amorim.
Respecto a lo primero, sorprende Viggo Mortensen como John Halder. Acostumbrados a verle batiéndose el cobre con mafiosos rusos, hordas de orcos o regimientos de piqueros franceses, su interpretación en el papel de un anodino alemán más, con una vida triste y gris en compañía de una esposa neurótica y una madre enferma y presenil, puede dejarnos un poco descolocados, al no “ubicarle” en ese registro tan diferente a aquellos a los cuales nos tiene acostumbrados. Desde mi punto de vista, tiene su razón de ser. No debe haberle sido fácil a Viggo mimetizarse en la piel y la conducta de un pequeñoburgués como tantos otros que poblaban el país germánico en la primera mitad de la década de los 30. Y precisamente creo que ese es uno de sus grandes aciertos. Es un personaje que se nos puede antojar antipático, poco atractivo, que incluso puede causar rechazo por su inacción ante los acontecimientos. Permanece indiferente ante la quema de “libros prohibidos”, la implantación de las Leyes de Nüremberg contra los judíos, la Kristallnacht o las deportaciones, contemplándolo todo como si los acontecimientos sucediesen en una película que pasa ante sus ojos, admitiéndolos y asumiéndolos como algo que sucede, que está ahí, pero ante lo que no puede hacer nada, dejándose “llevar por la corriente”. No es de extrañar, en ese entorno, esa evolución (más bien involución) de Halder, que pasará de intelectual librepensador a ser un uniforme negro más de las SS
Sobresaliente el trabajo de Jason Isaac, a quien estamos más acostumbrados a ver haciendo de villano (el despiadado coronel inglés Tavington de “El Patriota” o el odioso Lucius Malfoy en la saga de Harry Potter) y que en “Good” interpreta a Maurice, amigo judío de Halder, una especie de “alter ego” y conciencia moral del protagonista. Representa a esa otra parte de la sociedad alemana que se vió discriminada en principio y posteriormente perseguida y aniquilada. Algunos de los mejores momentos de la película los constituyen los diálogos entre ambos, que vienen a ser una reflexión sobre los acontecimientos que vienen sucediendo alrededor de ambos, y hacia dónde dirigen a la sociedad alemana.
El resto de los personajes no tienen tanto peso como los dos anteriores. La mujer de Halder, su madre o su amante son meros esbozos, apenas tienen peso en el desarrollo de la acción. Lo mismo puede decirse de los funcionarios nazis con los cuales el protagonista debe relacionarse, salvo quizás uno de sus compañeros en las SS, que acaba siendo su amigo, y que sirve para pasar casi de puntillas por el tema de la eugenesia y los planes de fomento de la población.
La película posiblemente adolece de su origen teatral. Apenas hay escenas de acción, salvo la Kristallnacht y los últimos minutos de la película. El tempo es lento y demasiado pausado, basándose sobre todo en los intercambios dialécticos entre los protagonistas. Algunos momentos del film resultan desconcertantes, por la aparición, aparentemente sin sentido, de música de Mahler que origina en Halder una especie de desconcierto, metáfora, quizás, de los sutiles pero irreversibles cambios en su mentalidad. Sorprende, por su concepción, esos últimos minutos del film, en los cuales el director recurre a un larguísimo plano secuencia en el interior de un campo de concentración, un artificio narrativo nada fácil de realizar pero de resultado realmente sorprendente, si bien el final no puede por menos que dejarnos con un acre sabor de boca.
En resumen, una película que a buen seguro no dejará a nadie indiferente, unos como admiradores, otros como detractores, pero que toca un tema capital para entender, o al menos intentarlo, el radical cambio que sufrió la Alemania de entreguerras para transformarse en un estado totalitario, tolerado y soportado por los que indudablemente se consideraban, a sí mismos, como “hombrees y mujeres buenos”.
Trailer
Más posters
Fuente: http://www.blogdecine.com/criticas/good ... -mortensen
Fuente: http://amipeliculas.com/good-no-hay-peo ... uiere-ver/
Algunas Críticas
"Good es una anémica adaptación a la gran pantalla de la obra de C. P. Taylor (...) Mortensen es un error de casting y está ineptamente dirigido por Vicente Amorim"
Stephen Holden: The New York Times
"Un drama absorbente sobre un buen hombre que está ciego ante los horrores del régimen nazi."
Ray Bennett: The Hollywood Reporter
"Good tiene una puesta en escena anticuada, pero merece la pena por ver a Mortensen, que hace que este retrato de un 'buen alemán' parezca aterradoramente contemporáneo. Nos muestra el horror de la ignorancia."
Owen Gleiberman: Entertainment Weekly
"Carece de desarrollo de personajes y de dimensión. (...) Aunque el film comienza con un intrigante y pulido look, se atasca a mitad del camino con verborrea y un ritmo desigual. (...)"
Claudia Puig: USA Today
"En la primera mitad, la película siempre va hacia arriba. (...) con mesura, altura dramática y poder visual. (...) El tercio final resulta más decepcionante"
Javier Ocaña: Diario El País
"Una factura sin fracturas y un guión algo televisivo dejan el camino libre para la inquietante moraleja: cualquiera puede ser cualquier cosa. (...)"
Javier Cortijo: Diario ABC
"Con impoluta corrección formal y algún destello de desgarrado lirismo musical, el director (...) levanta un convincente andamiaje dramático, sobre todo en su primera mitad (...)"
Alberto Bermejo: Diario El Mundo
Otros comentarios
http://www.blogdecine.com/criticas/good ... -mortensen
http://www.fotogramas.es/Peliculas/Good/Critica
http://www.filmaffinity.com/es/reviews/1/841564.html
Fuentes
http://www.filmaffinity.com/es/film841564.html
http://www.imdb.com/title/tt0436364/
He visto la película recientemente, y lo he hecho adrede, dejando pasar cierto tiempo desde el estreno comercial, con el fin de no verme influido por los comentarios, positivos y negativos, que acompañaron su aparición en las pantallas.
Ante todo resaltar que quien espere una película que ahonde en las raíces de la implantación del nazismo en la sociedad alemana, o explicaciones sociológicas sobre cómo Alemania se convirtió en el III Reich, se verá decepcionada. De hecho, ni siquiera podemos tener constancia ni conciencia sobre el proceso que sigue Halder desde su existencia como oscuro y anónimo profesor universitario hasta convertirse en un “asesor experto” del aparato nazi en lo relativo a un tema tan espinoso como la eutanasia.
En cuanto a algunos aspectos puramente cinematográficos, mucho se puede opinar acerca de la elección de los actores y la dirección de Vicente Amorim.
Respecto a lo primero, sorprende Viggo Mortensen como John Halder. Acostumbrados a verle batiéndose el cobre con mafiosos rusos, hordas de orcos o regimientos de piqueros franceses, su interpretación en el papel de un anodino alemán más, con una vida triste y gris en compañía de una esposa neurótica y una madre enferma y presenil, puede dejarnos un poco descolocados, al no “ubicarle” en ese registro tan diferente a aquellos a los cuales nos tiene acostumbrados. Desde mi punto de vista, tiene su razón de ser. No debe haberle sido fácil a Viggo mimetizarse en la piel y la conducta de un pequeñoburgués como tantos otros que poblaban el país germánico en la primera mitad de la década de los 30. Y precisamente creo que ese es uno de sus grandes aciertos. Es un personaje que se nos puede antojar antipático, poco atractivo, que incluso puede causar rechazo por su inacción ante los acontecimientos. Permanece indiferente ante la quema de “libros prohibidos”, la implantación de las Leyes de Nüremberg contra los judíos, la Kristallnacht o las deportaciones, contemplándolo todo como si los acontecimientos sucediesen en una película que pasa ante sus ojos, admitiéndolos y asumiéndolos como algo que sucede, que está ahí, pero ante lo que no puede hacer nada, dejándose “llevar por la corriente”. No es de extrañar, en ese entorno, esa evolución (más bien involución) de Halder, que pasará de intelectual librepensador a ser un uniforme negro más de las SS
Sobresaliente el trabajo de Jason Isaac, a quien estamos más acostumbrados a ver haciendo de villano (el despiadado coronel inglés Tavington de “El Patriota” o el odioso Lucius Malfoy en la saga de Harry Potter) y que en “Good” interpreta a Maurice, amigo judío de Halder, una especie de “alter ego” y conciencia moral del protagonista. Representa a esa otra parte de la sociedad alemana que se vió discriminada en principio y posteriormente perseguida y aniquilada. Algunos de los mejores momentos de la película los constituyen los diálogos entre ambos, que vienen a ser una reflexión sobre los acontecimientos que vienen sucediendo alrededor de ambos, y hacia dónde dirigen a la sociedad alemana.
El resto de los personajes no tienen tanto peso como los dos anteriores. La mujer de Halder, su madre o su amante son meros esbozos, apenas tienen peso en el desarrollo de la acción. Lo mismo puede decirse de los funcionarios nazis con los cuales el protagonista debe relacionarse, salvo quizás uno de sus compañeros en las SS, que acaba siendo su amigo, y que sirve para pasar casi de puntillas por el tema de la eugenesia y los planes de fomento de la población.
La película posiblemente adolece de su origen teatral. Apenas hay escenas de acción, salvo la Kristallnacht y los últimos minutos de la película. El tempo es lento y demasiado pausado, basándose sobre todo en los intercambios dialécticos entre los protagonistas. Algunos momentos del film resultan desconcertantes, por la aparición, aparentemente sin sentido, de música de Mahler que origina en Halder una especie de desconcierto, metáfora, quizás, de los sutiles pero irreversibles cambios en su mentalidad. Sorprende, por su concepción, esos últimos minutos del film, en los cuales el director recurre a un larguísimo plano secuencia en el interior de un campo de concentración, un artificio narrativo nada fácil de realizar pero de resultado realmente sorprendente, si bien el final no puede por menos que dejarnos con un acre sabor de boca.
En resumen, una película que a buen seguro no dejará a nadie indiferente, unos como admiradores, otros como detractores, pero que toca un tema capital para entender, o al menos intentarlo, el radical cambio que sufrió la Alemania de entreguerras para transformarse en un estado totalitario, tolerado y soportado por los que indudablemente se consideraban, a sí mismos, como “hombrees y mujeres buenos”.
Trailer
Más posters
Fuente: http://www.blogdecine.com/criticas/good ... -mortensen
Fuente: http://amipeliculas.com/good-no-hay-peo ... uiere-ver/
Algunas Críticas
"Good es una anémica adaptación a la gran pantalla de la obra de C. P. Taylor (...) Mortensen es un error de casting y está ineptamente dirigido por Vicente Amorim"
Stephen Holden: The New York Times
"Un drama absorbente sobre un buen hombre que está ciego ante los horrores del régimen nazi."
Ray Bennett: The Hollywood Reporter
"Good tiene una puesta en escena anticuada, pero merece la pena por ver a Mortensen, que hace que este retrato de un 'buen alemán' parezca aterradoramente contemporáneo. Nos muestra el horror de la ignorancia."
Owen Gleiberman: Entertainment Weekly
"Carece de desarrollo de personajes y de dimensión. (...) Aunque el film comienza con un intrigante y pulido look, se atasca a mitad del camino con verborrea y un ritmo desigual. (...)"
Claudia Puig: USA Today
"En la primera mitad, la película siempre va hacia arriba. (...) con mesura, altura dramática y poder visual. (...) El tercio final resulta más decepcionante"
Javier Ocaña: Diario El País
"Una factura sin fracturas y un guión algo televisivo dejan el camino libre para la inquietante moraleja: cualquiera puede ser cualquier cosa. (...)"
Javier Cortijo: Diario ABC
"Con impoluta corrección formal y algún destello de desgarrado lirismo musical, el director (...) levanta un convincente andamiaje dramático, sobre todo en su primera mitad (...)"
Alberto Bermejo: Diario El Mundo
Otros comentarios
http://www.blogdecine.com/criticas/good ... -mortensen
http://www.fotogramas.es/Peliculas/Good/Critica
http://www.filmaffinity.com/es/reviews/1/841564.html
Fuentes
http://www.filmaffinity.com/es/film841564.html
http://www.imdb.com/title/tt0436364/