Publicado: Jue Ene 23, 2020 12:12 am
por Kurt_Steiner
Excluyendo a los submarinos "en miniatura", la marina imperial nipona comenzó la segunda guerra mundial con 69 submarinos de tipo medio junsen (‘crucero’) y construyó otros 111 de este tipo más submarinos minadores, de transporte, sentaka (‘alta velocidad’) y los gigantescos sentoku.

De estos, 35 submarinos transportaron un hidroavión (los tres sentokus llevaban varios); 52 superaron las 3.000 toneladas de desplazamiento y 65 tenían una autonomía de más de tres meses. La mayoría estaban armados con torpedos Tipo 95, la versión submarina del Tipo 93 Long Lance.

Pero el arma submarina japonesa tenía una sries de problemas. El primero era la gran variedad de clases. Excluyendo los submarinos extranjeros, "en miniatura" o suicidas, la marina imperial alineó 28 clases de submarinos más otras 4 subvariantes entre 1939 y 1945. Comparada con la US Navy, ésta destaca por su "parquedad", si aplicamos los mismos criterios, pues sólo tuvo 11 clases y 226 de estos submarinos formaron parte de las clases Gato, Balao, y Tench. Además de la dispersión de esfuerzos con tanto diseño, muchos de los nuevos submarinos ofrecían poca mejora con respecto a sus antecesores, aumentaban las complicaciones logísticas y de entrenamiento, por no citar algunas extravagancias a la hora de construirlos.

Imagen
El Yu-i, un submarino del Tipo 3.
fuente: https://en.wikipedia.org/wiki/Type_3_su ... rt_vehicle

Un ejemplo de ello fue los submarinos de transporte del Tipo 3, construidos para el ejército imperial, de los que se pidiera 400 ejemplares y sólo se entregaron 38. Algo poco sorprendente dado que los construyeron compañías sin experiencia en submarinos, como Hitachi.

A esta diversidad se suma la cambiante prioridad en la construcción naval japonesa. En EEUU, la prioridad estuvo en construir submarinos y portaaviones hasta 1944, cuando la necesidad de lanchas de desembarco se volvió urgente. Japón se centró en construir acorazados y portaaviones hasta 1942, luego destructores y escoltas de convoy para seguir, brevemente, con submarinos y, finalmente en 1945, embarcaciones suicidas.

Pero el problema principal era las pésimas tácticas submarinas, pues los japoneses permanecieron anclados en conceptos anticuados.

(continuará...)