Publicado: Dom Sep 09, 2007 12:28 pm
por Bitxo
Es cierto que el cuento resulta muy denso o espeso, pero esta era precisamente una treta: aumenta el dramatismo mediante la transmisión de este a todo el entorno y en cada segundo. Dicho de otro modo, los personajes se ven atrapados no sólo en la acción (un niño inconsciente y un adulto arrastrado por las circunstancias del combate, ambos soldados de circunstancias), sino también en el ambiente (Berlín derruido, símbolo de la derrota y la desesperación), que se contagia a los personajes. De esta manera, los personajes no son ellos mismos (el niño realmente desea volver a serlo y el soldado desea volver a ser el civil de antes, si bien estas cosas no parecen posible en el ambiente bélico), sino un subproducto de la acción y el ambiente. El Berlín derruido es un personaje más (el montón de escombros, por ejemplo), el que realmente provoca la trama. El símbolo de la derrota a través de su agónica resistencia fútil atrapa a seres que se ven engullidos, hasta que el drama final e inevitable les muestra otra verdad: que pueden ser ellos mismos. Todo ello, por supuesto, en unas pocas líneas, con lo que resulta muy denso. García Lorca era capaz de decir mucho en versos muy ligeros. Yo resulto más heavy :wink: .