Publicado: Vie Sep 16, 2016 5:02 pm
Pregunta 2938
- Muy buenas Sasha. ¿A qué viene el libro de visitantes ilustres?
- Lea mejor.
- ¿Folloneros ilustres?
- En efecto. Verá me han contado que en Helsinki la armó fina hace unos añitos...
- Un caballero que se precie no cuenta esas cosas.
- ¡¡Gracias, Dios Mío!!
- A ver, esas anchoas y el txacolí, que el rancho no ha sido muy allá.
- ¿Qué le han dado?
- Una rebanada de pan negro, unas gachas aguadas y cerveza bautizada tres veces.
- ¿Y eso?
- Naaaa. Un pequeño incidente ocasionado por Herr Ramcke cuando estábamos atracados en visita de cortesía en Sanghai. Se le dispararon 8 cañones de 381 y diez del 15. Arrasó los tres lupanares más famosos de la zona internacional y de la ciudad china. Y de postre torpedeó el yate del delegado inglés. Se montó una fiesta muy maja. Cañonazos por aquí, disparos por allá...
- No me lo creo.
- Desde entonces nos tenemos que poner finos en tierra.
- Esto, verá, la pregunta...
- A sí. Verá usted. En una ciudad se acababa de rendir un bando al vencedor, cuando entraron otras unidades del vencedor y al ver tantos soldados se dijeron "leña al mono que es de goma".
- No.
- Sí. Eso no es todo. Un alto oficial salió a la ventana a ver que jaleo era ése y le despejaron la sesera de un tiro.
- No.
- Y sí otra vez. Para más inri era el que había conseguido la rendición y del mismo bando de los amigos de gatillo alegre.
- Vaya.
- Y la cosa se pone más truculenta. Aunque se pretextó un error de transmisión, parece que el herido recibió una nota y unas flores de los que le hirieron ¡en la que lamentaban no haberle matado!
-
- Verá, lo que hay que decir es el nombre del herido, la unidad que le disparó y el mensaje que se envió.
- Difícil.
- Naaaa, el vino que me suelta la lengua.
- ¿Algún detallito?
- Sucedió antes de 1943.
Feuer Frei!
- Muy buenas Sasha. ¿A qué viene el libro de visitantes ilustres?
- Lea mejor.
- ¿Folloneros ilustres?
- En efecto. Verá me han contado que en Helsinki la armó fina hace unos añitos...
- Un caballero que se precie no cuenta esas cosas.
- ¡¡Gracias, Dios Mío!!
- A ver, esas anchoas y el txacolí, que el rancho no ha sido muy allá.
- ¿Qué le han dado?
- Una rebanada de pan negro, unas gachas aguadas y cerveza bautizada tres veces.
- ¿Y eso?
- Naaaa. Un pequeño incidente ocasionado por Herr Ramcke cuando estábamos atracados en visita de cortesía en Sanghai. Se le dispararon 8 cañones de 381 y diez del 15. Arrasó los tres lupanares más famosos de la zona internacional y de la ciudad china. Y de postre torpedeó el yate del delegado inglés. Se montó una fiesta muy maja. Cañonazos por aquí, disparos por allá...
- No me lo creo.
- Desde entonces nos tenemos que poner finos en tierra.
- Esto, verá, la pregunta...
- A sí. Verá usted. En una ciudad se acababa de rendir un bando al vencedor, cuando entraron otras unidades del vencedor y al ver tantos soldados se dijeron "leña al mono que es de goma".
- No.
- Sí. Eso no es todo. Un alto oficial salió a la ventana a ver que jaleo era ése y le despejaron la sesera de un tiro.
- No.
- Y sí otra vez. Para más inri era el que había conseguido la rendición y del mismo bando de los amigos de gatillo alegre.
- Vaya.
- Y la cosa se pone más truculenta. Aunque se pretextó un error de transmisión, parece que el herido recibió una nota y unas flores de los que le hirieron ¡en la que lamentaban no haberle matado!
-
- Verá, lo que hay que decir es el nombre del herido, la unidad que le disparó y el mensaje que se envió.
- Difícil.
- Naaaa, el vino que me suelta la lengua.
- ¿Algún detallito?
- Sucedió antes de 1943.
Feuer Frei!