Publicado: Dom Jun 25, 2023 3:51 pm
por Kurt_Steiner
En un discurso de 1943 en el programa de radio Volá Londýn para celebrar el año nuevo judío, Masaryk instó a los habitantes del Protectorado de Bohemia-Moravia a ayudar a la comunidad judía, diciendo que era necesario extender una mano amiga a los "más desdichados de los desdichados", como llamó a los judíos del protectorado, diciendo que quería que los checos comunes pudieran decir después de la guerra que "seguíamos siendo personas decentes". Partidario del sionismo, Masaryk era amigo del Dr. Chaim Weizmann.

En junio de 1943 Masaryk habló con Philip Nichols del Foreign Office y expresó muchas dudas sobre un tratado propuesto para crear una alianza militar entre Checoslovaquia y la URSS que Zdeněk Fierlinger, el embajador de Checoslovaquia en Moscú, defendía enérgicamente. Aunque Masaryk no se opuso rotundamente al tratado propuesto, insinuó a Nichols que prefería que, después de la guerra, Checoslovaquia se acercara más a Polonia que a la URSS. Entre el 17 de octubre de 1943 y el 10 de febrero de 1944, Masaryk realizó una larga gira de conferencias por los EEUU, lo que lo apartó de las reuniones del gabinete checoslovaco. En diciembre de 1943 Beneš fue a Moscú para firmar un tratado que creaba una alianza militar de 25 años con la URSS. A su regreso a Londres, Masaryk se vio obligado a aceptar el hecho consumado. En un discurso radiofónico el 16 de febrero de 1944, Masaryk afirmó que la alianza soviético-checoslovaca "fue aprobada en Estados Unidos", aunque "había algunos reaccionarios que ocultaban sus propios intereses egoístas tras la pretensión del miedo al bolchevismo". Masaryk añadió que "deberíamos acostumbrarnos a llamarlo imperio soviético. Porque será el imperio soviético el que jugará el papel más importante en el continente".

En un acto no autorizado, Fierlinger en julio de 1944 envió un telegrama público a Edward Osóbka-Morawski, celebrando la entrada del Ejército Popular Polaco en suelo polaco, lo que llevó a Beneš a reprender a Fierlinger por un acto que implicaba apoyo al gobierno títere soviético de Lublin. Masaryk quería destituir a Fierlinger por esa carta, quejándose de que ya no representaba a Checoslovaquia en Moscú en ningún sentido significativo del término. El 28 de julio de 1944, todo el gabinete checoslovaco recomendó a Beneš que despidiera a Fierlinger como embajador en Moscú y nombrara un nuevo embajador que representara los intereses del gobierno en el exilio en lugar de la IRSS, consejo que Beneš se negó a aceptar.

En abril de 1945 Beneš y Masaryk viajaron a Moscú para reunirse con Stalin, donde se acordó que la política exterior de Checoslovaquia estaría alineada con la URSS, pero que Checoslovaquia mantendría su independencia y democracia.

Masaryk siguió siendo Ministro de Exteriores después de la liberación de Checoslovaquia como parte del gobierno del Frente Nacional, dominado por los comunistas. Los comunistas de Klement Gottwald vieron fortalecida su posición después de las elecciones de 1946, pero Masaryk permaneció como Ministro de Exteriores. Le preocupaba conservar la amistad de la URSS, pero estaba consternado por el veto que pusieron sobre la participación checoslovaca en el Plan Marshall.

Checoslovaquia vendió armas a Israel durante la guerra árabe-israelí de 1948. Las entregas de Checoslovaquia resultaron importantes para la nacimiento de Israel. Masaryk firmó personalmente el primer contrato el 14 de enero de 1948. Debido a que Masaryk fue visto como el más comprensivo con los judíos de los miembros del gobierno de posguerra, se le asignó la tarea de "apaciguar a las organizaciones judías en el oeste" en términos de los planes del gobierno para expulsar a la población alemana del país, incluidos los judíos de habla alemana.

En febrero de 1948 la mayoría de los miembros del gabinete no comunistas dimitieron con la esperanza de forzar nuevas elecciones, pero en su lugar se formó un gobierno comunista bajo Gottwald en lo que se conoció como el golpe checo ("Febrero Victorioso" en el Bloque del Este). Masaryk se reunió con el viceministro de Exteriores soviético, Zorin, quien le dijo que esperaba que se convirtiera en miembro del "nuevo gobierno", lo que confundió a Masaryk ya que el gobierno actual no había caído. Zorin le dijo que "Gottwald es nuestra única garantía. El gobierno debe limpiarse. Estamos decididos a construir uno nuevo, que sea más amistoso con nosotros y apoyaremos a Gottwald".[46] Masaryk siguió siendo ministro de Exteriores y fue el único ministro destacado del nuevo gobierno que no era ni comunista ni pro-comunista.

Masaryk fue presidente de la Federación Mundial de Asociaciones de las Naciones Unidas.

El 10 de marzo de 1948, Masaryk fue encontrado muerto, vestido solo con su pijama, en el patio del Ministerio de Exteriores (el Palacio Černín en Praga) debajo de la ventana de su baño.

Los restos de Jan Masaryk fueron enterrados junto a los de sus padres en una parcela del cementerio de Lány, donde en 1994 también reposaron las cenizas de su hermana Alice Masaryková.

El Ministerio del Interior afirmó que se había suicidado saltando por la ventana, pero en ese momento se asumió ampliamente que fue asesinado por los comunistas. Por otro lado, muchos de sus allegados (por ejemplo, su secretario Antonín Sum, su asistente de prensa Josef Josten, su hermana Olga o Viktor Fischl) siempre han defendido la historia del suicidio. En una segunda investigación realizada en 1968 durante la Primavera de Praga, se dictaminó que la muerte de Masaryk fue un accidente, sin excluir un asesinato, y una tercera investigación a principios de la década de los 90, después de la Revolución de Terciopelo, llegó a la conclusión de que había sido un asesinato.