Publicado: Jue Ene 10, 2013 6:13 pm
por Bitxo
A ver, si la pregunta es la primera:

¿era Alemania un país económicamente socialista?


la respuesta es sí en lo económico, pues existía una planificación estatal. Es decir, el nacionalsocialismo incluía en su ideario soluciones socialistas en cuanto a lo económico.

Ahora bien, si la pregunta es si el nacionalsocialismo pertenece al socialismo ideológicamente, la respuesta es no.

Una ideología no es sólo un compendio de ideas económicas, sino también filosóficas y referentes a la estructura del Estado. El socialismo persigue como fin la igualdad de los individuos (fin filosófico). Para garantizarla el Gobierno debe intervenir la economía planificándola y promoviendo el trabajo colectivo (medio económico para alcanzar el fin). A partir de aquí existen todos los grados que se quieran, hasta el punto del fin de las clases sociales y de la propiedad privada.

El fin filosófico del nacionalsocialismo es la supremacía de la raza aria (lo cual difícilmente puede interpretarse como el fin de la desigualdad) y una correcta sintonía entre las diferentes clases sociales orquestada desde el Gobierno. Que se persiga una correcta sintonía no implica que el Gobierno garantice una búsqueda de la igualdad (ni tan siquiera dentro de una misma raza), sino que intervenga para asegurarse de que los conflictos entre clases sean mínimos y fácilmente controlados (corporativismo). Para el nacionalsocialismo lo verdaderamente importante es la nación. Una nación purificada racialmente y homogeneizada políticamente, que funcione como un conjunto armonioso bajo la batuta de un gobierno fuerte. De hecho, para el nacionalsocialismo, la economía está subyugada a este fin, y para ello el gobierno debe intervenir en las relaciones entre las diferentes clases sociales, asegurando a la clase baja un mejor trato y a la alta sus privilegios, al tiempo que -gracias al totalitarismo- fuerza a una y a otra a cumplir con lo que se espera de ella (economía planificada en aras de un fortalecimiento de la nación).

Por otro lado yo hablo del nacionalsocialismo y no del III Reich. Es decir, un Gobierno dado puede defender una ideología dada, pero las circunstancias y el personalismo pueden modificar sobremanera el resultado esperado. De hecho no es lo mismo el NSDAP que lucha por lograr un hueco entre el maremágnum de pequeñas facciones desafectas a la República de Weimar, que el NSDAP que lucha por la Cancillería o que el NSDAP en sus primeros años de gobierno ni tampoco, finalmente, con el NSDAP enfrentado a una guerra total.