Der zweite Weltkrieg

Este verano tuve la ocasión de montar en uno, de un amigo del grupo de recreación histórica de la Big Red One, y fue el mejor paseo que me he podido dar en coche nunca. La sensación de no ir sujeto al asiento prácticamente, el viento dando de pleno en tu cara, y la suspensión dura como el acero pero a la vez maravillosa me hicieron rememorar miles de imágenes de peliculas y fotografías... Por cierto, lo vendía por unos 9.000 euretes, así que si alguno se ve fuerte en medio de la crisis, que no lo dude. Pongo en mi boca la frase de Scarlata Ohara, cuando afirmo que ¡Juro que algún día tendre uno para mi!!! desde ese día me quedé enamorado de este vehículo!

Saludos!