Publicado: Jue May 06, 2010 12:02 am
por Juan Manoel
Kurt_Steiner escribió:Incidentes que sólo ocupan una nota a pie de página en la historia de la Segunda Guerra Mundial.


Siguiendo con lo mismo, vamos a ver otra de esas pequeñas historias ocurridas durante la Segunda Guerra Mundial.

La historia de una isla.........

Pero no es una isla cualquiera.........

Es la isla de Córcega...........la isla de los Bonaparte.



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No es una isla cualquiera......... (parte 01) :


1.- Antecedentes Preliminares :

Hasta el Siglo XVIII Córcega pasó por una serie de estados políticos administrativos, situación que prolongó así hasta el 15 de mayo de 1768, Francia fuerza a Génova a firmar el tratado de Versalles, en la que ésta última vendía a Francia el territorio, aspecto que en la práctica se materializó en mayo de 1793.

Los habitantes de esta isla eran una extraña mezcla de corsos, franceses, italianos y las descendencias de éstos.

Hacia 1870, Víctor Manuel II de Italia, realiza una intentona de recuperar la isla para su país, no llegando a cumplir su cometido, cosa que se repitió en más de una oportunidad, estableciéndose movimientos corsos pro-italianos en varias ocasiones más, haciéndoles ver como independentistas.

Hay que indicar que nunca la isla se desligó completamente de los italianos. Una parte de la población hablaba el idioma italiano, inclusive muchos de sus documentos, incluida una Constitución, fueron escritos en italiano. Además una gran parte de su población asistía a educarse Universidades en Italia.

Sin embargo, la mayor parte de la población corsa era indiferente (y en algunos casos abiertamente hostil) a la llamada independentista (cuando no anexionista) y tras la señal de alarma que surge tras las manifestaciones de júbilo por las aventuras coloniales fascistas, a una reivindicación oficial de Italia sobre Córcega pronunciada por el Ministro de Exteriores, Galeazzo Ciahno, “¡Corsica, Savoia, Tunisia a noi!”, hay una fuerte reacción del gobierno francés que organiza en Bastia, el 4 de diciembre de 1938, frente al monumento a los caídos de la Primera Guerra Mundial una manifestación nacionalista francesa que llegará a ser famosa como el Serment (juramento) de Bastia, miles de personas juran “frente al mundo, con toda nuestra alma, sobre nuestras glorias, sobre nuestras tumbas, sobre nuestras cunas, juramos vivir y morir franceses” y defender la pertenencia de Córcega a Francia contra todos, “respondiendo a la brutal violencia con la violencia legítima”.


2.- La Ocupación :

Algunos meses después, el 2 de septiembre de 1939, la guerra es declarada. En aquella época, Robert Guidicelli maestro de escuela, es asignado a su nuevo puesto en Carbini al sur de la isla. En mayo 1940, el general Mollard, el comandante en jefe de las tropas en Córcega, en gira por la zona es encontrado por Robert, el que le pregunta : “¿En caso de desembarco miente del enemigo, qué hará Usted? El general responde : “¡Resisto!”. Tres meses después, este oficial es destituido. Pétain firma, el 17 de junio de 1940, la capitulación sin condición de Francia y se hace de facto un “aliado-colaborador” de Alemania.

Tras el armisticio de junio de 1940, la isla pasa bajo la administración de Vichy, y las principales bases militares en Córcega reciben la visita de las misiones militares italianas y alemanas, pero nunca hubieron tropas de ellos en la isla.

No tengo antecedentes de las tropas que habían en Córcega antes de junio de 1940, pero después del armisticio, los franceses mantenían en la isla a dos brigadas y los elementos de la Gendarmería.

El 8 de noviembre de 1942, los Aliados pasan a la ofensiva y desembarcan en Africa del Norte (operación Torch). Hitler invade la zona libre (operación Attila).

El 11 de noviembre de 1942, como respuesta a la operación Torch aliada, empieza con el consentimiento del gobierno colaboracionista del Gobierno de Vichy, la invasión de Francia meridional por las fuerzas alemanas y de Córcega por parte de las italianas, que desembarcan en Bastia sin oposición alguna, utilizando medios y hombres que se habían preparado para el desembarco nunca realizado de Malta, las que contaban con alrededor de 80.000 hombres al mando del general Giovanni Magli, con elementos de la 184ª División de Paracaidistas “Nembo” (un batallón), del 175° Regimiento Alpino, de la División “Cremona”, de la División “Friuli”, de las 30ª, 47ª y 205ª Divisiones de Artillería, de las 204ª, 205ª, 225ª y 206ª Divisiones Costeras, del 107° Batalló Motorizado, del 182° Regimiento Costero y del 7° Regimiento de Artillería.

Posteriormente en 1943, los italianos agregarían elementos del 10° Regimiento Arditi (con la fuerza de un batallón), compuesto de una compañía de desembarco y dos de paracaidistas.

En esta época, las tropas francesas de la isla fueron repatriadas.



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Italianos durante su desembarco y toma de Córcega en 1942.



De esta forma, desde principios del Siglo XIX, por primera vez hubieron tropas no francesas en Córcega, la que capituló sin combatir. En nombre del Mariscal Pétain, el prefecto le pide a la población acoger las “tropas de operación” (y no de ocupación) con “calma y dignidad”.

Por primera vez después de los de 1938, Italia proclamó su voluntad de anexar Córcega.

En junio de 1943, los alemanes destacan unidades propias tanto en Cerdeña como en Córcega, al mando del general Fridolin von Senger.

En Cerdeña las unidades estaban compuestas de elementos de la 90ª Pz.Gren.Div (general Carl-Hans Lungershausen) y del III/IR 870 de la 356.ID (capitán Meyer).

A Córcega llegan los hombres de la SS Sturmbrigade “Reichsführer SS” (SS Obersturmbannführer Karl Gesele), compuestos de un Grenadier Battalion, un Panzerjäger Abteilung, un Sturmgeschütz Abteilung (armado con StuG III Ausf F) y un Flak Abteilung (cañones de 8,8 cm. y antiaéreos de 2 cm.). En resumidas cuentas, alrededor de 12.000 hombres.



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Elementos de la SS Sturmbrigade “Reichsführer SS” en Córcega en 1943.



El mando militar italiano controló fácilmente la isla gracias a la magnitud de las fuerzas de ocupación (Córcega tenía unos 200.000 habitantes) y gracias al hecho de que tanto la Gendarmería Francesa como la administración civil local se mantuvieron en sus funciones. La oposición de la población a la ocupación, cuando existió, fue escasa, una parte de la población acoge a los italianos como liberadores. La dura intervención de la policía secreta italiana (la OVRA), quizás unida a los Carabinieri, contra los escasos opositores consiguen, junto al hambre (a la que contribuyen las confiscaciones de víveres), a alimentar el descontento, en el que incidirán los cabecillas del movimiento de Resistencia, tanto la de los comunistas como la de los republicanos y nacionalistas franceses.

Los alemanes dejaron a los italianos toda la gestión de la isla. Córcega teme perder la identidad francesa y sufre muchas faltas a sus las libertades. Las condenas son ejecutorias en Italia y las sentencias a muerte pronunciadas por el tribunal militar son inmediatamente llevadas a cabo. Ciento diez personas, sobre todo personajes importantes de la isla, son internados sin juicio en la isla de Elba y en Calabria.

Pero, ya desde antes, el mes de noviembre de 1942 aporta un cambio decisivo en el Mediterráneo. Sin duda, Alemania no tiene ninguna pretensión territorial en las islas del Mediterráneo Occidental, pero Córcega, Sicilia y Cerdeña se transformaron a partir de noviembre, en puestos estratégicos que hay que conservar. Además, Alemania teme que la población corsa apoye, si llega el caso, un desembarco anglo-americano.


Continuará...................