Publicado: Dom Ago 22, 2010 3:38 pm
por Domper
Respecto a la obra de Tsouras, me imagino el final, porque escribió una continuación: Rommel contra Zhukov. Intentaré echarle una ojeada. Como viajes al imperio no tengo previsto (así conseguí obras muy recomendables, como “Wild Blue” de Ambrose) probaré otro método más clandestino, el mismo que he usado con “Freakonomics”, ya que en castellano no se encuentra.

Respecto a la potencia de fuego: efectivamente el problema es el control, pero a esas alturas ya estaba bastante organizado. Problemas había, y uno fue el error de coordenadas previo a Epsom, pero no significó fuego propio, sino que hubo una zona del frente atacado que no fue bombardeada. Pero a la defensiva el planteamiento es diferente (no se precisan barreras de fuego móvil), y los procedimientos de la artillería norteamericana eran bastante mejores.

Un inciso, recordemos que a pesar de la fama de la artillería rusa, la norteamericana acabó siendo tan temida o más por los alemanes. Tenía varias ventajas:

- Era homogénea. Se basaba en dos modelos (obñus de 105 y de 155 mm) más otros modelos especializados (cañones de 114, 155, y obuses de 203 y 240 mm) que se usaban por unidades concretas. A esas alturas todos los contendientes habían racionalizado bastante su arsenal (salvo Alemania por la penuria conocida) pero además las piezas norteamericanas salieron bastante mejores que las equivalentes inglesas (el cañón de 25 libras y el de 140 mm).

- Tenía enormes cantidades de municiones. Para el bombardeo inicial lo que cuentan son los tubos, pero si la operación se mantiene, importan las reservas, y en eso ganaban a todos.

- Tenían procedimientos de tiro centralizados. Algo así como las divisiones de artillería soviéticas, pero mejorado. En lugar de tener grupos de apoyo a tal o cual fuerza, y grupos “generales”, las unidades de artillería norteamericana apoyaban a sus unidades pero, cuando era preciso, podían ser usadas a disposición del mando contra objetivos concretos. Esto no podía hacerse en un frente amplio, sí en uno estrecho.

De hecho lo que detuvo los contraataques alemanes en Salerno y en Anzio fue la artillería: todos los cañones de la cabeza de playa, fuesen de la unidad que fuesen, disparando conjuntamente contra uno u otro objetivo a criterio del mando. En un frente estrecho el fuego de un centenar de cañones a la vez es una receta bastante apañada para solucionar una crisis. Más adelante, en las Ardenas, la infantería alemana se vio con problemas para acompañar a los carros precisamente por la artillería, ahora usando espoletas de proximidad.

Volviendo. En este escenario los otros métodos (artillería naval o bombardeos tácticos o estratégicos) son mucho menos eficientes. Pero con disparar a mayor distancia (5 Km del frente), o contra concentraciones (pasos en zonas inundadas), etcétera, puede hacer una labor de interdicción muy aparente. A la artillería naval se le daba especialmente bien el fuego de contrabatería. Con bastante frecuencia fue usada contra la artillería antiaérea enemiga.

Sobre lo de Gallípoli, pienso más en una batalla de material, tipo Anzio o el bosque de Hurtgen, que asaltos a pecho descubierto contra las trincheras. Este combate sin ser resolutivo para los aliados, era de los peores para los alemanes, con mucha menos potencia de fuego. La destreza táctica en un frente estrecho y contra posiciones fortificadas, con una potencia de fuego abrumadora, es mal escenario.

Saludos, y gracias por el consejo.