Publicado: Jue Jul 02, 2009 12:18 am
por Bitxo
En la primera parte del artículo se defiende lo que expuse en mi trabajo. Huelga decir que para mí, y para la mayoría de historiadores, es la explicación más seria de la purga. Los detalles son un mundo aparte, tal y como también advertí al final de mi trabajo. También hay misterios, como la relación entre Goebbels y Röhm. Está claro que cuando la jerarquía está puesta en duda y no se sabe a ciencia cierta qué va ha suceder, los hay que maximizan sus posibilidades tratando de, como mínimo, chequear a un posible caballo ganador. Pero, ¿hasta qué punto Goebbels estuvo dispuesto a apostar por Röhm? Dicho de otra manera, ¿cómo lo valoró? La otra opción es que fuese enviado por el propio Hitler o por Göring. Sin embargo esto no me parece probable, dado el comportamiento que tuvo hacia Hitler una vez desatada la tormenta. Parece claro que Goebbels no sabía que iba a iniciarse la purga, por lo que resulta evidente que no gozaba de la plena confianza del Führer. ¿Por Göring, quizás? Que Göring también se sentía rival de Hitler resulta evidente, pero Göring disponía de cauces mucho más fiables para él que Goebbels.

Por otro lado, Goebbels no debió contemplar un buen futuro para él con Röhm como Canciller. El papel de Goebbels era despreciado por el líder de las SA, demasiado rudo o escasamente dotado para la estrategia política, de hecho contrario a la estrategia legalista del NSDAP. Hitler sí supo ver en Goebbels al individuo necesario para la victoria en la lucha electoral. Pero en un momento en el cual el peso de los jerarcas parecía medirse por la cantidad de hombres a su servicio, un hombre como Goebbels, si mayores medios que su instinto e inteligencia, debió atemorizarse y tratar de jugar a dos bandas. Heydrich le salvó en tal de tenerlo a su merced, eliminando las pruebas de su reunión con Röhm; pero tampoco da la sensación de que Hitler desease librarse de él. Le resultaba útil y lo bastante sumiso como para perdonarle el mal momento.