Publicado: Dom Feb 27, 2022 9:21 pm
El 17 de junio, al día siguiente de transmitir una solicitud formal de armisticio al gobierno alemán, el ministro de Exteriores francés, Paul Baudoin, entregó al nuncio papal Valerio Valeri una nota que decía: "El gobierno francés, encabezado por el mariscal Pétain, solicita que la Santa Sede transmita al gobierno italiano a la mayor brevedad la nota que también ha remitido a través del embajador de España ante el gobierno alemán, en la que le solicita también que transmita al gobierno italiano su deseo de encontrar juntos las bases de una paz duradera entre ambos paises." Esa misma mañana Mussolini recibió noticias de Hitler de que Francia había pedido a Alemania un armisticio, y fue a reunirse con Hitler en Munich, encargando al general Roatta, al almirante Raffaele de Courten y al brigadie Egisto Perino redactar las demandas de Italia. La lista final de demandas presentadas a los franceses fue pequeña e Italia abandonó sus reclamos sobre el valle del Ródano, Córcega, Túnez, y la Somalia francesa. Según Roatta, fue la signorilità (deportividad) de Mussolini lo que lo obligó a no exigir más de lo que había conquistado.
En la tarde del 21 de junio, el embajador Dino Alfieri en Berlín transmitió los términos del armisticio alemán a Roma. Según Ciano, "bajo estas condiciones [suaves], Mussolini no está preparado para hacer demandas territoriales... y [esperará] a la conferencia de paz para hacer todas nuestras demandas formales". Agregó que Mussolini deseaba retrasar la reunión con los franceses con la esperanza de que el general Gambara tomara Niza.
A las 15.00 horas del 23 de junio, la delegación francesa, encabezada por el general Charles Huntziger, que había firmado el armisticio alemán el día anterior, aterrizó en Roma a bordo de tres aviones alemanes. Los negociadores franceses eran los mismos que se habían reunido con los alemanes. La primera reunión tuvo lugar a las 19.30 horas en la Villa Incisa all'Olgiata, en Via Cassia. Duró solo veinticinco minutos, durante los cuales Roatta leyó en voz alta los términos propuestos por Italia, Huntziger solicitó un receso para consultar con su gobierno y Ciano aplazó la reunión hasta el día siguiente. Durante el aplazamiento, Hitler informó a Mussolini que pensaba que las demandas italianas eran demasiado ligeras y propuso unir las zonas de ocupación alemana e italiana. Roatta finalmente convenció a Mussolini de que era demasiado tarde para cambiar las demandas.
A las 19.15 horas del 24 de junio, en la Villa Incisa, tras recibir el permiso de su gobierno, el general Huntziger firmó el armisticio en nombre de los franceses, y el mariscal Badoglio lo hizo por los italianos. Ambos armisticios entraron en vigor treinta y cinco minutos después de la medianoche del 25 de junio. Minutos antes de la firma, Huntziger había pedido a Badoglio que anulara la cláusula que pedía la repatriación a Italia de los refugiados políticos (como el socialista Pietro Nenni). Badoglio consultó a Mussolini, quien estuvo de acuerdo.
En la tarde del 21 de junio, el embajador Dino Alfieri en Berlín transmitió los términos del armisticio alemán a Roma. Según Ciano, "bajo estas condiciones [suaves], Mussolini no está preparado para hacer demandas territoriales... y [esperará] a la conferencia de paz para hacer todas nuestras demandas formales". Agregó que Mussolini deseaba retrasar la reunión con los franceses con la esperanza de que el general Gambara tomara Niza.
A las 15.00 horas del 23 de junio, la delegación francesa, encabezada por el general Charles Huntziger, que había firmado el armisticio alemán el día anterior, aterrizó en Roma a bordo de tres aviones alemanes. Los negociadores franceses eran los mismos que se habían reunido con los alemanes. La primera reunión tuvo lugar a las 19.30 horas en la Villa Incisa all'Olgiata, en Via Cassia. Duró solo veinticinco minutos, durante los cuales Roatta leyó en voz alta los términos propuestos por Italia, Huntziger solicitó un receso para consultar con su gobierno y Ciano aplazó la reunión hasta el día siguiente. Durante el aplazamiento, Hitler informó a Mussolini que pensaba que las demandas italianas eran demasiado ligeras y propuso unir las zonas de ocupación alemana e italiana. Roatta finalmente convenció a Mussolini de que era demasiado tarde para cambiar las demandas.
A las 19.15 horas del 24 de junio, en la Villa Incisa, tras recibir el permiso de su gobierno, el general Huntziger firmó el armisticio en nombre de los franceses, y el mariscal Badoglio lo hizo por los italianos. Ambos armisticios entraron en vigor treinta y cinco minutos después de la medianoche del 25 de junio. Minutos antes de la firma, Huntziger había pedido a Badoglio que anulara la cláusula que pedía la repatriación a Italia de los refugiados políticos (como el socialista Pietro Nenni). Badoglio consultó a Mussolini, quien estuvo de acuerdo.