Campos de concentración, exterminio...
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Los Niños del Holocausto

Mié Abr 23, 2008 7:54 pm

Con el tema de Ana Frank, salio otro tema que es de si habia informacion de otros chicos del holocausto. Por otro lado el usuarios shindler me paso una pagina, que cito como fuente, donde encontre estos datos, habia mas, pero creo que esta recopilacion de seis niños, algunos sobrevivieron y otros no, basta como muestra. La pequeña reseña esta en el mismo orden que la foto (que agrupe) de izquierda a derecha, arriba a bajo.

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Henoch Kornfeld.Nació Kolbuszowa, Polonia 1938
Los padres de Henoch eran judíos religiosos y se casaron en 1937. Su padre, Moishe Kornfeld, y su madre Liba Saleschutz, se asentaron en Kolbuszowa, donde la madre de Henoch se crió. Ahí, el padre de Liba les compró a los recien casados una casa y introdujo a su nuevo yerno al negocio de tejidos al por mayor.
1938-38: Henoch nació a fines de 1938, y se crió con muchas tías, tíos y primos. Hacia su primer cumpleaños, Alemania invadió Polonia, y pronto llegó a Kolbuszowa. Soldados polacos montados trataron de pelear contra el ejército alemán, pero fueron dominados por los tanques. Después de un combate corto había muchos caballos muertos en las calles. El pueblo de Henoch quedó bajo el gobierno alemán.
1940-42: Toda la gente del pueblo, incluyendo los niños, conocía a Hafenbier, el cruel comandante de la policía alemana con cara de perro que estaba asignado a Kolbuszowa. Hafenbier aterrorizó y mató muchos de los judíos del pueblo. Henoch jugaba seguido con otros niños del pueblo un juego en el cual él hacía de Hafenbier, y decía a sus amigos, "Si eres judío, morirás." Luego con un rifle hecho de un pedazo de madera, Henoch fusilaba a sus amiguitos. Ellos, en turno, caían al suelo haciéndose los muertos.
Henoch y su familia fueron deportados al ghetto de Rzeszow el 25 de junio de 1942, y después al campo de exterminio de Belzec el 7 de julio donde fueron gaseados. Henoch tenía tres años y medio.

Lidia Lebowitz. Nació Sarospatak, Hungría c. 1934
La menor de dos hermanas, Lidia nació de padres judíos viviendo en Sarospatek, un pueblo pequeño en el nordeste de Hungría. Los padres de Lidia eran dueños de un negocio prospero de ramos generales. En ese momento, la ropa manufacturada era rara en el campo. La gente del pueblo y los campesinos compraban las telas en el negocio de los Lebowitz y luego se la llevaban al sastre o modista para hacerse la ropa.
1933-39: Lidia tenía dos años cuando su tía Sadie, que había emigrado a los Estados Unidos muchos años antes, vino a visitarlos con sus dos hijos, Arturo y Liliana. Todos los primos se divertieron jugando juntos en el campo del abuelo. En el viaje de América, el barco de la tía de Lidia había atracado en el puerto de Hamburgo, Alemania, y la tía Sadie había visto nazis marchando en las calles. Tía Sadie estaba preocupada por lo que podría pasar a su familia en Sarospatek.
1940-44: En 1944, fuerzas alemanas ocuparon Hungría. Un mes después de la invasión, soldados húngaros, actuando bajo ordenes de los nazis, echaron a Lidia y sus padres de la casa. Los Lebowitz pasaron tres días hacinados en una sinagoga local con cientos de otros ciudadanos judíos. Luego fueron todos trasferidos al pueblo cercano de Satoraljaujhely, donde alrededor de quince mil judíos fueron comprimidos dentro de un ghetto creado en la sección de los gitanos. Los habitantes del ghetto tenían dificultades en obtener suficiente para comer.
El ghetto fue liquidado en mayo y junio de 1944. Todos los judíos fueron deportados en vagones de carga cerrados hacia Auschwitz. No se escuchó nunca más de Lidia y sus padres.

Zigmond Adler. Nació Liege, Bélgica 18 de julio de 1936
Los padres de Zigmond eran judíos de Checoslovaquia que habían emigrado a Bélgica. Su madre, Rivka, era camisera. Había venido a Bélgica de joven para buscar un trabajo fijo, siguiendo a su hermano mayor, Jermie, que había mudado a su familia a Liege unos años antes. En Liege, Rivka conoció y se casó con Otto Adler, un comerciante. La pareja deseaba criar una familia.
1933-39: Zigmond nació en 1936, pero su madre murió un año después. Su padre se volvió a casar pero el matrimonio no duró. El padre de Zigmond luego se casó por tercera vez y pronto Zigmond tuvo una nueva media hermana y una vida estable. De niño, Zigmond visitaba seguido la familia de su tío Jermie, que vivía a unas pocas cuadras.
1940-44: Zigmond tenía tres años cuando los alemanes ocuparon Bélgica. Dos años después, los alemanes deportaron a su padre para hacer trabajos forzados. Después de eso, la madrastra de Zigmond se fue de Liege, dejándolo con su tío Jermie y su tía Chaje. Cuando los nazis empezaron a arrestar los judíos en Liege, amigos católicos del tío Jermie los ayudaron a obtener documentos falsos para ocultar su identidad judía y también les alquilaron una casa en un pueblo cercano. Dos años después, temprano un domingo por la mañana, la Gestapo vino a la casa sospechando que ahí vivían judíos.
Zigmond, su tía y dos primos fueron mandados al campo de Mechelen, y luego a Auschwitz, donde Zigmond, que tenía solamente siete años, fue enviado a la cámara de gas el 21 de mayo de 1944.

Inge Auerbacher. Nació Kippenheim, Alemania 31 de diciembre 1934
Inge era hija única de Berthold y Regina Auerbacher, judíos religiosos que vivían en Kippenheim, un pueblo en el suroeste de Alemania, cerca de la Selva Negra. Su padre era un comerciante de tejidos. La familia vivía en una gran casa con diecisiete cuartos y empleaban sirvientes.
1933-39: El 10 de noviembre de 1938 [la fecha de Kristallnacht], matones tiraron piedras y rompieron todas las ventanas de nuestra casa. Ese mismo día, la policía arrestó a mi padre y abuelo. Mi madre, mi abuela y yo pudimos escondernos en un cobertizo hasta que la situación se calmó. Cuando salimos, los hombres judíos del pueblo habían sido llevados al campo de concentración de Dachau. Mi padre y mi abuelo pudieron volver a casa unas semanas después, pero en mayo de 1939 mi abuelo murió de un ataque al corazón.
1940-45: Cuando tenía siete años, fui deportada con mis padres al ghetto de Theresienstadt en Checoslovaquia. Cuando llegamos, se llevaron todas nuestras cosas, salvo la ropa que teníamos puesta y mi muñeca, Marlene. Las condiciones del campo eran duras. Las papas tenían el valor de diamantes. Tenía hambre, tenía miedo y estaba enferma casi todo el tiempo. Para mi octavo cumpleaños, mis padres me dieron una tortita de papas con un poco de azúcar; para mi noveno cumpleaños, una ropita hecha con trapos para mi muñeca; y para mi décimo cumpleaños, un poema escrito por mi madre.
El 8 de mayo de 1945, Inge y sus padres fueron liberados del ghetto de Theresienstadt donde habían pasado casi tres años. Emigraron a los Estados Unidos en mayo de 1946.

Renate Guttmann. Nació Teplice-Sanov, Checoslovaquia 21 de diciembre de 1937
Renate y su hermano mellizo, Rene, y sus padres alemanes judíos, vivían en Praga. Poco antes de nacer los mellizos, los padres de Renate se fueron de Dresden, Alemania para escapar las políticas antisemitas del gobierno nazi. Antes de irse de Alemania para vivir en Checoslovaquia, el padre de Renate, Herbert, trabajaba en el negocio de importaciones y exportaciones. Su madre, Ita, era contadora.
1933-39: Nuestra familia vivía en un edificio de departamentos de seis pisos sobre la línea de tranvía numero 22 en Praga. Había que subir un largo e inclinado tramo de escalones para llegar a nuestro departamento donde mi hermano, Rene, y yo compartíamos una cuna en el dormitorio de nuestros padres; una terraza miraba sobre el jardín. Rene y yo usábamos conjuntos que hacían juego y estábamos siempre bien vestidos. Pasábamos los días jugando en un parque a la vuelta de la casa. En marzo de 1939, el ejército alemán ocupó Praga.
1940-45: Justo antes de cumplir seis años, nos mandaron a Auschwitz desde el ghetto de Theresienstadt. Ahí me convertí en el numero 70917. Me separaron de mi hermano y mi madre, y me llevaron a un hospital donde me midieron y sacaron radiografías; me sacaron sangre del cuello. Una vez, estaba atada a una mesa y cortada con un cuchillo. Recibí inyecciones que me hacían vomitar y que me daban diarrea. Mientras estaba enferma en el hospital después de una inyección, entraron guardias para llevarse los enfermos a ser matados. La enfermera que me cuidaba me escondió debajo de su pollera larga y estuve quieta hasta que se fueron los guardias.
Renate y su hermano sobrevivieron y se reunieron en América en 1950. Ellos se enteraron que habían sido un par de los "mellizos de Mengele" y que habían sido usados para experimentos médicos.

Tomas Kulka. Nació Olomouc, Checoslovaquia 25 de mayo de 1934
Los padres de Tomas eran judíos. Su padre, Roberto Kulka, era un comerciante del pueblo moravo, Olomouc. Su madre, Elsa Skutezka, era sombrerera de Brno, la capital de Moravia. La pareja era bien educada y hablaban checo y alemán. Se casaron en 1933 y se asentaron en Olomouc, el pueblo de Roberto.
1933-39: Tomas nació un año y un día después de que se casaran sus padres. Cuando Tomas tenía tres años, su abuelo falleció y los Kulka se mudaron a Brno, el pueblo de la madre. El 15 de marzo de 1939, unas semanas antes del quinto cumpleaños de Tomas, los alemanes ocuparon Bohemia y Moravia, incluyendo Brno.
1940-42: El 2 de enero de 1940, Tomas, sus padres y su abuela fueron echados de su casa por los alemanes. Esperando salvar el negocio de la familia, el padre de Tomas decició quedarse en Brno. A Tomas no se le permitió empezar la escuela porque era judío. Un año después, los padres de Tomas fueron forzados a vender su negocio a un alemán por 200 coronas checas, menos de $10. El 31 de diciembre de 1942, los Kulka fueron deportados al ghetto de Theresienstadt en el oeste de Checoslovaquia.
El 9 de mayo de 1942, Tomas fue deportado al campo de exterminio de Sobibor donde fue gaseado. Tenía siete años.

Fuente : http://www.ushmm.org/wlc/media_oi.php?l ... diaId=3004

Clara.

Jue Abr 24, 2008 3:10 am

Otro caso extraido de la pagina de la Fundacion Memoria del Holocausto (Argentina)


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Clara, una niña judeo-argentina víctima del nazismo

Ana Watch

De visita con su madre en Polonia, estalla la Guerra, y un día las cartas dejan de llegar al padre en Argentina.
Esta es la historia de Clara, una niña nacida en Buenos Aires en fecha patria, un 25 de mayo de 1936. Sus padres eran ambos polacos. El papá Samuel, de 26 años, hacía 9 que vivía en la Argentina. La mamá Raquel, también de 26 años, hacía un año que había llegado a Buenos Aires. Para poder bajar del barco, se tuvieron que casar en el Hotel de Inmigrantes, casi sin conocerse.
Raquel era diabética. Pasó un embarazo complicado por su enfermedad. Los primeros meses de vida de Clara estuvieron signados por los malestares y el encierro de su mamá, hasta que ella decide volver a Polonia a consultar con sus médicos y presentar a la beba a su familia. Samuel se queda en Bs. As. Raquel mejora su salud junto a los suyos. Envía cartas y fotos. Visita con frecuencia a la familia de Samuel, que vivía en una ciudad vecina. En las cartas expresa el deseo de volver a Buenos Aires junto a su marido, sintiéndose ya recuperada. Samuel se muestra temeroso de este reencuentro, recordando los tiempos difíciles que pasaron juntos. Les envía cartas y dinero con asiduidad.
Llegan fotos de los cumpleaños de Clara donde se la ve feliz con ambas familias, jugando en el bosque con un perro amigo, luciendo orgullosa el tapadito que papá le mandó, …¡su papá de la Argentina! Habla en idish y en polaco, "es alegre y muy inteligente" dice la mamá.
Alrededor de ellas, el clima social y político comienza a ensombrecerse. Impactan las medidas persecutorias y discriminatorias hacia el pueblo judío. Transcurre el ’38, el ’39 con gran incremento de la hostilidad, la guerra era inminente. "Ahora hay mucho tumulto, los ánimos están muy presionados" (14-5-39). En septiembre de ese año estalla la guerra.
En mayo del ’40 Clara pierde a su mamá, quien muere de difteria luego de sólo 3 días de enfermedad. La abuela paterna cuenta que la nena de 4 años le preguntó "¿bobe, está mi mamá en tu casa?, ¿por qué no regresa ya?"
Samuel desde Bs. Aires hace esfuerzos inútiles para traer a su hija, padres y hermanas a la Argentina. Las noticias eran cada vez más alarmantes. "La mente no puede comprender lo que está ocurriendo".
Sus familiares se dispersan teniendo que abandonar el hogar y todas sus pertenencias, mudándose constantemente de vivienda y de ciudad. Dice el papá: "¡no te podés imaginar lo que me alegra recibir cartas de ustedes!, en estos tiempos esto te da coraje para vivir y uno piensa en un mañana mejor, que algún día vamos a estar todos juntos" (15-10-40). "Supe del caso de un niño que nació en la Argentina, recibió una visa y puede volver con un acompañante" (19-12-40).
Clara vive con los abuelos maternos hasta mayo del ’41, cuando cumple 5 años, la abuela y tías paternas la llevan a vivir con ellas en muy precarias condiciones. Cuentan de Clara: "ella quisiera viajar a verte sólo por un día, para que le compres juguetes" (11-6-41).
Esta fue la última carta que llegó de la mamá de Samuel, la última noticia de su hija. Sólo quedan dos fechas marcadas en un viejo almanaque hebreo:
29-11-43 Clara, 22-01-44 mamá.
De esta historia, Samuel nunca pudo hablar. Volvió a casarse en Buenos Aires, tuvo tres hijas más, dos de ellas llevan los nombres de sus hermanas: Miriam y Paulina.
Mi nombre es Ana, soy la tercera, no cronológicamente. Después del fallecimiento de mi padre, encontré en una bolsita de nylon guardada en el aparador, un paquete con cartas en idish y fotos, que guardé cuidadosamente durante 9 años, hasta que decidí reconstruir la historia, hacer traducir las cartas, conseguir la partida de nacimiento de mi hermana y tratar de averiguar si fuera posible cómo fue su final.

Fuente : http://www.fmh.org.ar/revista/17/clarau.htm

Jue Abr 24, 2008 8:28 am

Verdaderamente conmovedor :cry: .Gracias, simón, por traernos a los que muchas veces son los grandes olvidados: los niños.
:cry: Un saludo cordial.
García-Morato.

Jue Abr 24, 2008 6:10 pm

En el caso de Clara, la verdad que no tenia ni idea que una "argentina con todas las letras" fuera victima del holocausto, sabia de argentinos en el reich, pero de argentinos que padecieron el holocausto no... Aca excluyo a los sobrevivientes que luego vinieron a la argentina y se radicaron, que en parte es el caso de clara, que por esas cosas del destino, fue de "vacaciones" a europa y no volvio nunca mas.

Jue Abr 24, 2008 8:14 pm

Y es que, del Holocausto, aún queda mucho por conocer. De hecho, hace poco leí un artículo que trataba precisamente de eso: animar
a todas las personas que hubieran conocido casos de víctimas de la Shoah, lo hicieran público, para un mejor conocimiento de la verdadera
magnitud que supuso. A ver en que queda.
:D Un saludo cordial.
García-Morato.

Vie Abr 25, 2008 2:13 am

Gracias por el post, tremendo. Les decía que no había tenido éxito en saber una cifra reconocida de niños muertos en el Holocausto, hay información muy disímil. Si alguien pudiera dar algo de luz sobre el tema, sería muy bueno.

Salu-2

Vie Abr 25, 2008 2:34 am

Roul Wallenberg escribió:Gracias por el post, tremendo. Les decía que no había tenido éxito en saber una cifra reconocida de niños muertos en el Holocausto, hay información muy disímil. Si alguien pudiera dar algo de luz sobre el tema, sería muy bueno.

Salu-2


No esto SEGURO... pero por ahi me parecio leer algo asi como 800.000 niños o menores de 15 años (creo que decia niños, pero tendria que revisar todos las paginas que veo y ya me estoy mareando :) ) Ya de por si la cifra asusta, pero se ajusta en parte a la realidad, aun asi podriamos simplemente calcular a razon de 4 por familia 6.000.000 /4 son 150.000 * 2 (los hijos obvio) nos da por lo menos 300.000 hijos, aunque este "argumento" es un tanto rebuscado... Solo puede darnos una idea "probable" de niños que quedaron sujetos a dicho crimen... vere si encuentro dicha cifra que se que vi en algun lado...

Jue May 01, 2008 3:35 am

Este post podría haber ido en la sección noticias, pero opté por ponerlo acá ya que toca un tema en curso y arroja luz sobre una de las dudas mayores en cuanto a la cantidad de niños que perecieron en la época.


La Casa Sefarad-Israel recuerda a los niños judíos asesinados en el Holocausto


La dignificación y la memoria del millón y medio de niños asesinados durante el Holocausto en la alemania nazi de la Segunda Guerra Mundial (1939-1945) subyace en la exposición 'No es juego de niños', promovida por la Casa Sefarad-Israel e inaugurada hoy en Valladolid.

Diecisiete paneles con información gráfica y literaria documentan las vicisitudes de los niños hebreos durante la Alemania del primer tercio del siglo XX, desde el ascenso nazi al poder (1933) hasta la finalización de la contienda mundial (1945), con citas intercaladas de escritores y pensadores judíos como Primo Levi y Hannah Arendt.

'Es la memoria de una infancia arrebatada', ha dicho a los periodistas Carmen Sáez, responsable de Comunicación de la Casa Sefarad-Israel, un consorcio institucional creado en 2006 entre el Ministerio de Asuntos Exteriores, la Comunidad y el Ayuntamiento de Madrid.

La vida cotidiana en guetos como los de Varsovia (Polonia) y campos de extermino como los de Auschwitz-Bikernau relata en imágenes la exposición, inaugurada en Valladolid dos fechas antes de la conmemoración del Iom Ha-Shoá o Día del Holocausto (2 de mayo).


<center>Imagen</center>


Sáez ha recordado que de los seis millones de sionistas asesinados por los nazis, 1,5 millones eran niños que perecieron en los guetos hacinados, por falta de comida y en condiciones infrahumanas, cuando no eran fusilados o gaseados por su escasa utilidad para la ejecución de los trabajos forzados a los que eran sometidos sus progenitores.

En otras ocasiones, ha recordado por su parte la concejala de Cultura del Ayuntamiento de Valladolid, Mercedes Cantalapiedra, eran utilizados para experimentos médicos.

La difícil supervivencia en los campos de exterminio, donde los más pequeños practicaban el contrabando de comida para el sustento de los suyos, también evoca la muestra que podrá verse en la capital vallisoletana hasta el 1 de junio.

'Debemos tener en cuanta que algunos países de la Europa moderna han asentado sus democracias bajo el recuerdo del Holocausto', ha recordado Sáez al presentar una exposición que se complementa con la proyección de un documental sobre la participación de la diplomacia española en la salvación de miles de judíos.

'Visados para la libertad' es el título de ese documental, elaborado por Alejandro Baer y Yessica San Román, donde se refleja el papel de los diplomáticos españoles destinados entre 1939 y 1945 en los territorios administrados por los nazis, quienes evitaron la segura muerte de hasta 60.000 hebreos, en su mayor parte sefarditas (descendientes de los expulsados en España a partir de 1492).

Ángel Sanz Briz, Bernardo Rolland de Miota, Eduardo Propper de Callejón, Sebastián Romero Radigales, Julio Palencia, José Rojas Moreno y José Ruiz Santaella son algunos de los protagonistas del filme.

La exposición se estructura en forma de paneles distribuidos por etapas, cada una de las cuales se separa visualmente a través de una cita impresa en la pared con las firmas de filósofos como Theodor Adorno, primo Levi y Hannah Arendt; escritores como Imre Kertesz y Jean Améry, y Elie Wiesel, Premio Nobel de la Paz por sus investigaciones sobre el Holocausto.

El martirio e intento de exterminio de la población judía centroeuropea a manos de los nazis afectó a unos seis millones de personas, al margen de a 800.000 gitanos, a cuatro millones de prisioneros de guerra soviéticos, y en un menor porcentaje a discapacitados, homosexuales y opositores alemanes al régimen de su país.


<center>Gueto de Varsovia

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Terra Actualidad - EFE



Salu-2

Jue May 01, 2008 3:42 am

Wallen, cada vez que veo estas fotos y similares, me dan ganas de mandarlos bien a la que ya sabes... Y encima muchos de los hp que hicieron esto estan vivos y coleando.
Habria que mandarlos a treblinka y darle lo mismo que ellos hicieron hasta que palmen...

Bestias... y no sigo porque me caliento.

Vistes las caritas de esos nenes? Y el nenito tirado en la calle? No se puede creer que no tuvieran siquiera un poco de compasion...

Jue May 01, 2008 3:51 am

:cry: Yo...no tengo palabras para estas cosas..
Por eso, y hasta el día que me muera, desde mi humilde posición denunciaré toda forma de nazismo.
¿ Olvido ? Jamás.
Un saludo cordial.
García-Morato.

Jue May 01, 2008 5:24 am

La atrición a la humanidad de un millón y medio de niños es algo para muchos muy difícil de dimensionar. En el aspecto moral y criminal se ha ya escrito y establecido mucho y se seguirá haciendo.

Empero las consecuencias de una enormidad tan grande son también demasiado amplias para poder dimensionarlas. En lo personal creo que por sólo citar un aspecto, se hizo un enorme daño al arte. Los judíos eran y siguen siendo muy aficionados al arte y para algunas son de especiales condiciones, como para la música. En la literatura, la sola interrupción de la vida de Ana Frank nos hace pensar acerca de lo que la novel escritora (que podría estar viva aún) podría haber producido, quizás una obra monumental.

Volviendo a la música, era común entre las personas de clase media y pudientes instruír a sus hijos e hijas en la ejecución de instrumentos musicales, y el mundo ha recibido el aporte de excelentes intérpretes de origen judío presentes en casi todo el orbe; por solo recordar algunos a modo de ejemplo, los descollantes violinistas judíos de la Unión Soviética. Así entonces, la desaparición de una cantidad tan grande de niños me hace pensar que con toda seguridad deben haberse perdido incontables talentos de los cuales el nazismo nos privó a los contemporáneos. Una cuenta insaldable.

Para muestra un virtuoso, Itzhac Perlman, a quien afortunadamente el destino no puso a sus padres al alcance de la tempestad hitleriana:


<center><object width="425" height="355"><param name="movie" value="http://www.youtube.com/v/1qLePhm-xGs&hl=en"></param><param name="wmode" value="transparent"></param><embed src="http://www.youtube.com/v/1qLePhm-xGs&hl=en" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" width="425" height="355"></embed></object></center>




Salu-2

Dom May 04, 2008 5:24 pm

simon_dice escribió: Y el nenito tirado en la calle? No se puede creer que no tuvieran siquiera un poco de compasion...


El niño lamentablemente ya estaba muerto.

Lun May 05, 2008 11:54 am

Esa foto del niño muerto, y 3 individuos pasando al lado...impresiona.
Saludos.

Lun May 05, 2008 4:16 pm

Shindler escribió:
simon_dice escribió: Y el nenito tirado en la calle? No se puede creer que no tuvieran siquiera un poco de compasion...


El niño lamentablemente ya estaba muerto.


Con mas razon aun, era una criatura, como la dejaron morir asi... Me da bronca, muchisima bronca.

Lun May 05, 2008 4:42 pm

simon_dice escribió:Con mas razon aun, era una criatura, como la dejaron morir asi... Me da bronca, muchisima bronca.



Amigo Simon, quienes dejaron morir a ese y muchos niños más fueron los Nazis del régimen de Adolf Hitler. En los guetos confinaban a todos los judios, homosexuales, gitanos y extranjeros (ancianos, jovenes y niños) y los más débiles eran los que menos soportaban, los niños son los mas indefensos, su inmunidad a las diferentes enfermedades es inferior a la de un adulto, su capacidad para soportar frío y hambre estan muy por debajo de lo que un adulto puede soportar. Muchos niños de los guetos estaban solos sin familia (estos fueron asesinados o transportados a otros "lugares") y por ende indefensos totalmente. No te extrañes amigo, y bronca... A mi me da impotencia.



Saludos
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