Cuando lo ejércitos alemanes, tras una serie de fulgurantes victorias, se hallaban a las puertas de Leningrado y de Moscú, amenazando de muerte a al URSS, los dirigentes soviéticos, encabezados por Stalin, no apelaron a la conciencia comunista de los ciudadanos rusos, sino a sus sentimientos nacionalistas y patróticos, invocando ejemplos a seguir las figuras de los "gloriosos antepasados", desde la de Alexander Nevsky (que habia derrotado a los Caballeros Teutones en 1242) ( hasta las de Suvorov y Kutuzov, héroes de la guerra contra Napoleón.
Saludos.