Lun Sep 09, 2019 9:01 am
Más de 36.000 personas desalojadas por una bomba de la Segunda Guerra Mundial
8 de septiembre de 2019
Una ciudad de 50.000 habitantes, convertida prácticamente en un desierto. Una bomba de la Segunda Guerra Mundial ha obligado a desalojar a 36.177 personas de su casa en Battipaglia, una ciudad de la provincia italiana de Salerno. La bomba fue encontrada hace semanas en una zona agrícola junto a la principal autovía y de las vías del tren que conecta el norte y el sur de Italia.
Los expertos en desactivación de explosivos determinaron que la bomba no se podía mover porque, por el tipo de detonador, corría el riesgo de que explotara, y la solución ha sido espectacular: se tiene que detonar en el mismo lugar y, por seguridad, se ha desalojado un radio de 1.600 kilómetros donde hay cerca de 20.000 viviendas.
Este domingo de madrugada ha empezado este insólito operativo, que ha convertido Battipaglia en un desierto por un día. También se han cortado todas las comunicaciones, como la autovía o la red de trenes, provocando un pequeño caos.
Centenares de coches, autobuses y ambulancias
Los altavoces anunciaban que "la evacuación está en progreso y todas las viviendas tienen que ser desalojados; se han establecido controles policiales y de voluntarios a todos los puntos de acceso, centenares de coches y de autobuses han ido transportando a los habitantes fuera de la ciudad y las ambulancias han contribuido, también, a esta evacuación total de más de media ciudad.
El espectacular dispositivo también cuenta, claro está, con el ejército, que ha montado un gran bunker con barricadas de arena para hacer estallar la bomba y minimizar los daños. Para evitar daños superiores, además, se ha cortado todo el suministro eléctrico y de gas.
Se espera que los casi 40.000 evacuados se tengan que esperar unas doce horas hasta poder volver a casa en lo que será un operativo histórico. Eso sí, para evitar que los ladrones aprovechen el toque de queda para saquear todo el que puedan, se han desplegado numerosos drones que vigilan todas las calles de la ciudad para detectar movimiento.