Lun Sep 14, 2015 8:46 am
Reino Unido conmemora el "Blitz" como símbolo de la unidad nacional
13.09.2015
Con exposiciones, actos oficiales y visitas guiadas, Reino Unido conmemora el “Blitz”, el bombardeo continuo alemán durante la Segunda Guerra Mundial.
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El Imperial War Museum de Londres ocupa un edificio que antaño fue el manicomio de Bethlem. Quizá pueda sonar irónico, pero lo cierto es que recorriéndolo se mastica la locura que es la guerra, sus destrozos en las vidas de las personas. Y en el marco de esta conmemoración del "Blitz", dicho museo acoge estos días una excelente exposición titulada "Una familia en tiempo de guerra". Es la historia de los Allpress, vecinos en el Sur de Londres de una casa con pequeño jardín trasero, con padre maquinista ferroviario y nueve hijos. En 1940, el Gobierno había distribuido entre la población con jardín o patio unos 2,3 millones de los llamados "Refugios Anderson", el nombre del secretario encargado de la protección aérea. Pensados para seis personas, eran de hierro, en forma de bóveda de cañón, y debían cubrirse con un manto de tierra. Se entregaban con unas precisas instrucciones de montaje, como los muebles para armar que se venden hoy.
Una familia dentro de un Refugio Anderson
En la exposición se reconstruyó el refugio Anderson de los Allpress. Puedes entrar y sentarte bajo la luz de un candil en el banquillo de madera en ese angosto espacio, de 2 metros de largo y 1,8 de alto. Una megafonía reproduce el estruendo que levantaban las bombas. Sentado allí, experimentas la angustia claustrofóbica de los vecinos. Todo esto ocurría en Europa hace 75 años. Viven miles de personas que lo recuerdan perfectamente. Seres humanos de dos naciones "sumamente civilizadas", que se dedicaban a matarse muy organizadamente.
Los londinenses solían sembrar hortalizas sobre la cubierta de sus refugios Anderson. Los Allpress, abonados a la esperanza, plantaron flores.
Mar Sep 15, 2015 6:04 pm
El príncipe Enrique participa en la conmemoración de la Batalla de Inglaterra
15/09/2015
El príncipe Enrique, nieto de la reina Isabel II, dedicó hoy la jornada de su 31 cumpleaños a conmemorar el 75 aniversario de la Batalla de Inglaterra, en plena II Guerra Mundial y en la en que la Real Fuerza Aérea británica (RAF) se enfrentó y derrotó a la aviación alemana.
El príncipe Enrique, hermano menor del príncipe Guillermo -segundo en la línea de sucesión al trono británico-, tenía previsto volar en uno de los Spitfire PV202, el caza con el que en 1940 la RAF hizo frente a las avalanchas de bombarderos nazis, que participaron en los vuelos conmemorativos.
Sin embargo, el príncipe, militar de carrera, finalmente cedió su puesto a un compañero cuyo avión presentaba problemas mecánicos.
Según su portavoz, el príncipe "sacrificó" esta oportunidad de montar en uno de los históricos cazas de la RAF para que pudiera hacerlo el piloto de 95 años Tom Neil, veterano de la Batalla de Inglaterra, cuyo desenlace impidió que Alemania prosiguiera con sus planes de invadir por tierra el territorio británico.
Unos 40 Spitfires, Hurricanes y Bristol Blenheim volaron en formación desde el aeródromo de Goodwood, en el condado inglés de West Sussex, para después dispersarse por los escenarios de los principales combates que jalonaron aquella batalla aérea, considerada como decisiva en el devenir de la Segunda Guerra Mundial.
Se considera que la de hoy ha sido la mayor reunión de aviones de la Batalla de Inglaterra desde que ésta sucedió.
Este aniversario será el último en que puedan participar los pilotos que estuvieron en el conflicto, ya en edad avanzada, por lo que ha estado marcado por varios actos, entre ellos una misa en la catedral de San Pablo de Londres, a la que asistieron el primer ministro británico, David Cameron, y el nuevo líder del Partido Laborista, Jeremy Corbyn.
El príncipe Enrique, que dejó el Ejército el pasado junio y se dedica a labores caritativas, dijo sentirse "increíblemente honrado" de dedicar el día de su cumpleaños a asistir a la exhibición aérea, y no se prevé que haga ninguna otra celebración pública.