El Bombardeo de Hamburgo

[grognard]

Curzio Malaparte cuenta en su libro "La piel" lo siguiente sobre el bombardeo de Hamburgo:

"Aquella noche Lanza estaba en casa de Ridomi y los dos amigos estaban sentados en la oscuridad, hablando de los destrozos de Hamburgo. Las Memorías del cónsul general de Italia en Hamburgo, narraban hechos terribles. Las bombas de fósforo habían prendido fuego a barrios enteros de la ciudad, haciendo gran número de víctimas. Hasta aquí nada de extraño; también los alemanes son mortales. Pero millares y millares de desgraciados, chorreando fósforo ardiendo, esperando apagar de esa manera el fuego que los devoraba vivos, se habían arrojado a los canales que atraviesan Hamburgo en todos sentidos y en el río, el puerto y los estanques, incluso en las tazas de las fuentes de los jardines públicos, o se habían hecho cubrir de tierra en las trincheras abiertas para inmediato refugio en caso de inesperado bombardeo por las calles y las plazas; donde, agarrados a la ribera o a las barcas, con el agua hasta la boca o sepultados hasta el cuello, esperaban que la autoridad encontrase por fin algún remedio contra aquel fuego traidor. Porque el fósforo es tal que se agarra a la piel como una lepra viva y quema sólo al contacto del aire. Apenas aquellos desgraciados sacaban un brazo del agua o de la tierra, el brazo se encendía como una antorcha. Para resguardarse de ello, aquellos desgraciados se veían obligados a permanecer sumergidos en el agua o sepultados bajo tierra como los condenados del Infierno del Dante. Patrullas de socorro iban de un condenado a otro, llevándoles bebidas y alimentos, atando con cuerdas a la ribera a los sumergidos para que al abandonarse, vencidos por el cansancio, no se ahogasen, y probando un ungüento tras otro, pero en vano, porque mientras untaban un brazo, una pierna, un hombro, sacados por un instante del agua o de la tierra, las llamas se despertaban de nuevo como serpientes encendidas, y nada bastaba para detener aquella horrible lepra ardiente.
Durante algunos días, Hamburgo ofreció el aspecto de Dite, la ciudad infernal. Aquí y allá en las plazas, en las calles, en los canales, en el Elba, millares y millares de cabezas emergían del agua o de la tierra, y aquellas cabezas, que parecían fruto del hacha del verdugo, lívidas de espanto y dolor, movían los ojos, abrían la boca, hablaban. En torno a aquellas horribles testas, incrustadas en el pavimento de las calles y flotando en la superficie del agua, andaban y acudían de día y de noche los familiares del condenado, una muchedumbre sucia y desharrapada que hablaba en voz baja como para no turbar la horripilante agonía y les llevaban alimentos, bebida, ungüentos; quién un almohadón que poner bajo la nuca de su desgraciado familiar; otros, sentados al lado del sepulcro, le daban aire con un abanico para aliviarlo del calor del día; quiénes protegían la cara del sol bajo una sombrilla y le secaban la frente empapada de sudor, o le humedecían los labios con un pañuelo mojado o le arreglaban el cabello con un peine, o quién inclinándose desde una barca o desde la ribera del canal o del río, reconfortaba a los condenados arracimados en las cuerdas o flotando al amor de la corriente. Numerosos perros corrían aquí y allá ladrando, lamiendo el rostro del dueño enterrado o se arrojaban a nado para socorrerlo. Acaso alguno de aquellos condenados, movido por la impaciencia o por la desesperación, lanzaba un agudo grito, tratando de salir fuera del agua o la tierra y poner fin al sufrimiento de aquella inútil espera; pero en el acto, al contacto del aire, los miembros se inflamaban y llamas horrendas se encendían entre aquellos desesperados y sus familiares que a puñetazos, o pedradas o bastonazos, o con todo el peso de su propio cuerpo, se esforzaban en volver a meter en el agua o en la tierra aquella horrenda testa.
Los más valientes, los más pacientes, eran los chiquillos que no gritaban, no lloraban, que volvían los ojos para mirar serenamente el horrendo espectáculo, sonriendo a sus familiares, con esa maravillosa resignación del chiquillo que perdona la impotencia del adulto y siente piedad de los que no pueden ayudarle. Apenas caía la noche, nacía por doquier un suspiro, un murmullo, como el viento en la hierba, y esos millares y millares de cabezas miraban al cielo con ojos encendidos de terror.
Al séptimo día se dio orden de alejar a la población civil de aquellos lugares donde los condenados estaban sepultados en la tierra o sumergidos en el agua. La multitud de parientes se alejó en silencio, rechazada con dulzura por los soldados y enfermeros. Los condenados permanecían solos. Un balbuceo de terror, un rechinar de dientes, un llanto sofocado, brotaba de aquellas horribles cabezas emergiendo del agua o de la tierra, a lo largo de las riberas del río, en las calles y las plazas desiertas. Durante todo el día aquellas cabezas hablaron entre ellas, lloraron, gritaron, con la boca a flor de tierra, haciendo horrendas muecas, mostrando la lengua a los schupos de guardia en las esquinas, y parecía que se comiesen la tierra y escupiesen los guijarros. Después cayó la noche, y sombras misteriosas rondaban en torno a los condenados y se inclinaban sobre ellos, en silencio. Columnas de camiones con los faros apagados llegaban y se detenían. Se alzaba de todas partes un estrépito de palas y azadones, ruido de agua, el golpe seco de los remos en las barcas y gritos rápidamente apagados, lamentos y secos pistoletazos."

He estado buscando información en internet (en español) y no he encontrado ninguna referencia digna de crédito que refrende o niegue lo que cuenta Malaparte en su libro. Me gustaría saber si alguien tiene alguna información relativa a este tema, sea para afirmarla o para rebatirla.
Gracias

[Balthasar Woll]

No se si ocurrió lo que Curzio Malaparte narra en la Piel, pero si es cierto que la Operación Gomorra fue una salvajada como tantas otras que ocurrieron durante la guerra. El dato que yo tengo es que durante la Operación, se lanzaron unas 80.000 bombas de fósforo, que son mortales. La cifra de muertos osciló entre los 60.000 y los 100.000 muertos. (Incluye los muertos por bombas explosivas)

Segun la Wikipedia:

Las partículas incandescentes del fósforo blanco que se producen en la explosión inicial pueden producir profundas, extensas y dolorosas quemaduras de segundo y tercer grado. Las quemaduras de fósforo conllevan una mortalidad mayor que otros tipos de quemaduras debido a la absorbción del fósforo en el cuerpo a través de las áreas alcanzadas, resultando dañados órganos internos como el corazón, el hígado o el riñón.

Estas armas son particularmente peligrosas al personal debido a que el fósforo blanco arde a menos que esté privado de oxígeno o hasta que este se consume totalmente, en algunos casos llegando la quemadura hasta el hueso. En algunos casos, las quemaduras pueden ser limitadas a las áreas donde la piel está expuesta porque las partículas del fósforo no arden completamente a través de la ropa.

Por tanto, lo que dice Malaparte podría ser cierto, aunque algo de exageración literaria habrá seguro.

Fuente de la cita:http://es.wikipedia.org/wiki/F%C3%B3sforo_blanco


Saludos.

[grognard]

Encontré datos sobre la Operación Gomorra tanto en Wikipedia como en otros foros de la SGM, y los efectos del fósforo son harto conocidos, no sólo en la SGM sino en ocasiones anteriores y posteriores. Lo que me impactó fue la descripción que hace Malaparte de la necesidad de enterrarse o sumergirse para limitar los efectos del fósforo, y la "solución" que insinúa al final del párrafo que posteé. De ahí mi demanda de información acerca de esa circunstancia en particular. Lo que he encontrado en la red (en español) es vago, impreciso, o procedente de fuentes nada fiables y con bastante sesgo.

[Marseille]

Recuerdo una vez en el laboratorio de química de la Universidad, estabamos precisamente haciendo un experimento con fosforo, no recuerdo de que era exactamente el experimento, es asunto es que a una mi compañera descuidadamente le cayó una minuscula partícula de foforo en la mano y en efecto al contacto con el aire éste se enciende, lo que más recuerdo es que el "pedacito" de fosforo que tenía en la mano se adhirio a esta y ni el chorro de agua del lababo se lo removía, la solución fue mantener mojada su mano y bajo el agua y con unas pinzas le removieron dolorosamente el pedazo de fosforo que no era más grande que el punto de la letra "i" de éste texto pero le provocó una quemadura como de dos milímetros de ancho.
Por eso creo que aunque Malaparte cuenta de las personas semienterradas o sumergidas en el río no es producto de la imaginación del escritor, creo que es todo lo que podían hacer las personas a las cuales se les adhería una "esquirla" de fosfoforo blanco. Segun entiendo, en alguna parte leí, que un troso de fosforo de éstas bombas, se adhiere a la piel y practicamente la perfora al ir quemando el tejido, incluso llegando hasta el hueso.
Ahora, voy a hablar de memoria, pero me parece que una partícula de fosforo blanco puede tener una temperatura de más de 1200 grados centígrados, que es suficiente para derretir algunos metales como el aluminio, se imaginan eso pegado en su piel.

Lo único que encontré fue información de una granada moderna, pero si bien no es de la época de la SGM, aporta un dato importante, para detener la combustión del fosforo, hay que aplicar una solución de Sulfato de Cobre ésto permitirá remover las particulas en "seco" y sin ignición.

http://www.fas.org/man/dod-101/sys/land/m15.htm

Voy a revisar si encuentro algo entre los manuales del ejército que tengo.

Saludos

[grognard]

En concreto, en la página que aporta Marseille, dice lo siguiente en relación a Primeros Auxilios:

Primeros auxilios - El tratamiento de quemaduras causadas por Fósforo Blanco es el mismo que para las quemaduras ordinaria. Si las partículas de Fósforo Blanco están incrustados en la carne, sumerja la herida en agua o en paquete con paños húmedos para detener la combustión. A continuación, retirar o extraer el Fósforo Blando. Las partículas reiniciarán la combustión espontáneamente si se dejan secar. Aplicar solución de sulfato de cobre para poner fin a la combustión de las partículas. Esto les permite ser retiradas sin que se enciendan.
(Traducción Google Traductor + Algún ajuste)

En el link especifica que las granadas de fósforo blanco se utilizan para señalizar, indicar o incendiar.

Gracias por el aporte, Marseille.

[Joaquin Garcia Morato]

Como serían de horribles las consecuencias del bombardeo de Hamburgo que alguien tan poco impresionable por los efectos de los bombardeos indiscriminados, como lo era Athur Harris, manifestó sobre los efectos del mismo que fueron más devastadores que la bomba atómica lanzada sobre Hiroshima.
( Fuente: D. Luis de Marimón. " Enciclopedia de Aviación y Astronáutica ". Editorial Garriga. )

[Joaquin Garcia Morato]

Vayamos con algunos datos:

Fueron un total de 5 ataques consecutivos entre el 24 de julio y el 3 de agosto de 1943. El primero de ellos fue lanzado en la noche del 24 al 25 de julio por 791 bombarderos Avro " Lancaster " del Bomber Command. A la mañana siguiente lo hicieron 235 bombarderos de la VIII AAF norteamericana, y en la noche del mismo día un menor número de aviones británicos continuó la tarea. En la noche del 29 al 30 de julio, 699 " Lancaster " lanzaron otro ataque. Aún fueron enviados en la noche del 2 al 3 de agosto otros 740 " Lancaster" quienes, por razones climatológicas adversas, no pudieron realizar el ataque con acierto.

El número total de aparatos usados en la " Operación Gomorra " fue de 2.533, arrojando alrededor de 9.000 toneladas de bombas, de las cuales:

- 80.000 explosivas
- 80.000 incendiarias
- 5.000 de fósforo.

El 74 % de la zona central de la ciudad quedo arrasado; 186 fábricas y casi todas las instalaciones portuarias fueron inutilizadas, así como un gran número de barcos; 277.330 viviendas fueron destruidas y aproximadamente 1.000.000 de personas quedaron sin alojamiento. Como nota anecdótica cabe destacar que en estas incursiones se usó por vez primera el sistema antirradar " Windows " consistente en arrojar grandes cantidades de pequeñas tiras de aluminio, que confundían a los radaristas alemanes.

El balance definitivo de víctimas no se concluyó hasta el año 1957, resultando un total de entre 40.000 a 50.000 muertos.

Datos sacados de la " Enciclopedia de Aviación y Astronáutica ", de la Editorial Garriga.

[Marseille]

¿Alguien sabe que bombardeo fue más letal, el de Hamburgo o el de Hiroshima y Nagasaki?
Creo recordar que en Hamburgo murieron más personas que en hiroshima (lo lei en algun lado) pero en la red encuentro que murieron unas 50,000 personas en amburgo y 70,000 en japon, alguien me podría aclarar el asunto.

[Joaquin Garcia Morato]

El más letal, en cuanto a víctimas mortales se refiere, fue el de Hiroshima, con un total de víctimas de 78.150 muertos y 51.408 heridos según fuentes oficiales, por los entre 40.000 y 50.000 en Hamburgo.
Si nos referimos al tanto por ciento de destrucción, en este caso sería Hamburgo, con el 74 % de destrucción, frente al 60 % de Hiroshima.

[grognard]

No es por comparar, pero tan horrible debe ser morir quemado por el fósforo como hacerlo de resultas de la bestial energía liberada por una bomba atómica... o meses o años después por culpa de la radiación.

[Joaquin Garcia Morato]

Ambos son un horror absoluto, en efecto, grognard...escapa a la razón el sufrimiento en ambos casos, desde luego.

[Marseille]

Gracias Joaquín, ahora lo tengo más claro. Sin lugar a dudas es lo feo de la guerra, los civiles y especialmente los niños muertos.

Saludos

[Joaquin Garcia Morato]

[Domper]

Varias cuestiones:

- La cifra de víctimas de los bombardeos de Hamburgo de Julio de 1943 fue de algo más de 45.000, no de 80.000 a 100.000. No es casual: aunque en una catástrofe de semejante magnitud muchas víctimas simplemente desaparecerían, el Reich se esforzaba en identificar cada víctima. Por ello la cifra de víctimas en los tres grandes ataques de la Operación Gomorra no alcanzaría los 50.000. Hubo un cuarto ataque en la noche del 2 al 3 de Agosto, pero el mal tiempo salvó lo que quedaba de la ciudad.

- La enorme destrucción de Hamburgo no se debió sólo a los ataques de 1943. En 1944 y 1945 sufrió ataques constantes, incluyendo seis grandes ataques de la RAF, 16 bombardeos diurnos norteamericanos, y casi todas las semanas era atacada por aviones Mosquito, a veces con ataques con más de 50 aviones.

- Las víctimas de Hamburgo perecieron casi todas durante la tormenta de fuego de la noche del 27 al 28 de Julio de 1943, tres noches tras un gran ataque que causó 1.500 víctimas. La mayor parte de las víctimas murieron envenenadas por monóxido de carbono, el resto por bombas explosivas o quemadas en el incendio. Pocas perecerían por efecto directo del fósforo: aunque se lanzaron una enorme cantidad de artefactos incendiarios (de fósforo) durante esa fase del ataque la población estaba refugiada en refugios y sótanos, salvo algunos vigías en las azoteas.

- Aunque las quemaduras producidas por el fósforo son terribles, y el fósforo debe ser arrancado (o dejado consumir) no producen el efecto relatado por Malaparte, es una exageración. Como ya se ha dicho esas quemaduras tienen métodos de tratamiento.

Saludos

[grognard]

Gracias por la aclaraciones, Domper. Sospechaba que podía ser una cierta exageración literaria, independientemente de lo terrible que resulta que haya 45.000 víctimas civiles en un bombardeo de una ciudad. Una cosa no disminuye la repercusión de la otra.