El Juicio de Nuremberg
Mié Abr 11, 2007 4:45 am
El Juicio de Nuremberg
En 1946 se estaban desarrollando las sesiones del proceso de Nuremberg, en el que fueron juzgados los dirigentes del régimen nazi que dirigió el III Reich Alemán. Algunos países y muchas gentes de la época no aceptaron la validez jurídica de aquel Tribunal Internacional. Se aducía que los vencedores no podían ser justos jueces de los vencidos. Sin embargo, los dirigentes de las naciones que se vieron arrastrados a la guerra tenían muy claro que aquello no podía volver a repetirse y que era necesario juzgar y condenar a los principales responsables de la terrible catástrofe de la Segunda Guerra Mundial. El tribunal era un primer paso para robustecer la paz futura y para garantizar un orden internacional que impidiera la repetición de situaciones semejantes.
Más de medio siglo después casi nadie discute la oportunidad de aquellos juicios. La Organización de Naciones Unidas configuró un nuevo sistema de relaciones internacionales, que no ha conseguido erradicar las guerras, pero que ha logrado controlarlas y localizarlas, evitando su extensión. No hemos alcanzado otra PAX Augusta, pero se ha evitado la conflagración total, a pesar de los difíciles tiempos de la guerra fría y la carrera de armamentos.
Por eso los Procesos de Nuremberg son uno de esos acontecimientos históricos complejos, que pueden ser analizados y juzgados desde distintas perspectivas, y que merece ser recordado.
Antecedentes:
En la historia no existían precedentes de la celebración de un juicio internacional contra los dirigentes de una nación soberana después de perder una guerra contra otras naciones.
La inexistencia de un derecho internacional reconocido por todas las naciones constituía un gran obstáculo para imputar delitos a los políticos desde instancias ajenas a la soberanía de su estado. Sus acciones estaban solo sometidas al ordenamiento jurídico de su país y el político era únicamente responsable ante los tribunales de este. Los políticos nazis, pues, solo podrían ser juzgados por los tribunales alemanes.
Las noticias de las atrocidades que estaban cometiendo los alemanes durante la guerra y la convicción de que el gobierno nazi había provocado deliberadamente la contienda favorecieron desde principios de 1941 el desarrollo de la idea de someter a un juicio internacional a los dirigentes del nazismo.
Wiston Churchill fue quien primero habló de crímenes de guerra y de la necesidad de que "el castigo por estos crímenes debiera tener lugar cuando se produjera el desenlace definitivo de la contienda".
En 1942 se creó una comisión con el fin de ir elaborando una lista de responsables que debían ser juzgados cuando terminase el conflicto.
En 1945, en la conferencia de Yalta, Stalin, Churchill y Roosevelt trataron también este tema, analizaron un amplio documento elaborado en Estados Unidos y establecieron las bases para llegar a un convenio entre los aliados sobre la forma en que el juicio debería celebrarse.
Finalmente, el 8 de agosto de 1945, cuando ya se había acabado la guerra, se firmó en Londres el acuerdo entre los 26 paises que habían intervenido en ella contra Alemania por el que se decidió la creación de un Tribunal Internacional Militar.
Juicio a criminales de guerra
Este proceso comienza con una sesión preliminar en Berlín, el 18 de octubre de 1945, presidida por el juez militar ruso Nikitchenko.
Pero el proceso como tal en contra de los principales culpables de crímenes contra la paz, de crímenes de guerra y de crímenes contra la humanidad se celebró entre el 20 de noviembre de 1945 y el 1 de octubre de 1946 en el Palacio de Justicia de la ciudad de Nuremberg. Lamentablemente muy pocos responsables de la barbarie alemana fueron juzgados e incluso muchos jerarcas nazis lograron evitar ser atrapados. A Nuremberg llegaron las caras más conocidas del III Reich, al menos, aquellas personas que aún seguían vivas al momento de celebrarse el proceso. Himmler, Goebbels y el propio Hitler se habían suicidado; solo Göring llegó vivo a Nuremberg en su condición de gran jerarca nazi.
Se escogió la ciudad de Nuremberg por una cuestión práctica: en Berlín no había quedado en pie ningún edificio que pudiera albergar un procedimiento judicial de estas características, pero Nuremberg poseía un palacio de justicia con una sala capaz para 600 personas, contiguo a un gran centro penitenciario en el que se podía recluir a los detenidos y con un acceso a la sala, que, por una parte, evitaba todo contacto no deseado de los dirigentes nazis, y por otra, hacía completamente seguros los traslados de los presos desde las celdas al tribunal.
Nuremberg ofrecía además, un aliciente añadido: había sido la sede de las grandes manifestaciones; allí habían desplegado todos sus símbolos y banderas aclamadas por multitudes, y allí se había aprobado las leyes más racistas del III Reich.
Los cargos de la acusación
La acusación formuló cuatro cargos:
1.- Crímenes contra la paz: es decir, actuaciones que llevaran a la planificación o ejecución de violaciones de tratados internacionales o comisión de actos de agresión injustificada contra naciones.
2.- Conspiración: actuación con otros o asociación con ellos para cometer cualquiera de los crímenes señalados en los cargos anteriores.
3.- Crímenes de guerra: violaciones de las leyes y convenios internacionales sobre la guerra.
4.- Crímenes contra la humanidad: planificación, ejecución o participación en exterminios y genocidios.
Jueces
El tribunal quedó consituido por cuatro jueces procedentes de las cuatro potencias principales que habían intervenido en la guerra: Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña y la URSS. Cada uno de ellos tenía un sustituto de su misma nacionalidad. La presidencia recayó en manos del inglés Geoffrey Lawrence. Los otros jueces serían, Francis Colddle por EEUU, Henri Donnedieu de Vabres por Francia y Iona Nikitchenko por la Unión Soviética. El juez federal americano Robert H. Jackson ejerció de abogado, fiscal acusador principal por parte de los EEUU, y se hizo cargo de la organización del juicio.
Acusados
Los acusados fueron seleccionados entre los ochocientos altos jefes detenidos en los últimos días de la guerra. La lista, al final, quedó reducida a 24 nombres, aunque el tribunal solo abrió la causa contra 22, porque la acusación contra el magnate de la industria pesada Gustav Krupp se sobreseyó por su avanzada edad y mala salud y porque Robert Ley, responsable de los campos de trabajo, consiguió suicidarse, ahorcándose con una sábana antes de que se abriera el proceso. Ante el tribunal se presentó todavía uno menos, ya que Martin Borman sería juzgado en rebeldía porque aun no se había confirmado su muerte en la batalla de Berlín (el total de acusados presentes en Nuremberg fue de 21 personas).
Borman, Martin; nacido en 1900; agrónomo; a partir de 1933 jefe de departamento bajo Rudolf Hess; asistente principal de Hitler en la central de comando del "Fuhrer" durante la Segunda Guerra Mundial. Se ignora qué fue de él al finalizar la guerra. Se le acusó de los cargos 1, 3 y 4; fue condenado a muerte en base a 3 y 4.
Dönitz, Karl; gran almirante, constituyó un "Gobierno Administrativo del Imperio" al morir Hitler el 2 de Mayo de 1945. Fue acusado de 1, 2 y 3; por 2 y 3 fue condenado a 10 años de prisión. Salió de prisión en 1956. Falleció en 1960
Frank,Hans; nacido en 1900, abogado. Fue gobernador de Polonia a partir de 1939. Se le acusó de 1, 3 y 4; fue condenado a muerte por 3 y 4.
Frick, Wilhelm; nacido en 1877; Ministro de Asuntos Interiores del Imperio. Acusado por 1, 2, 3 y 4. Fue condenado a muerte por 2, 3 y 4.
Fritzsche, Hans; nacido en 1900; periodista; director de las Fuerzas de Inteligencia dentro del Departamento de Prensa del Ministerio de Propaganda. En cierta forma, fue acusado en sustitución de Goebbels, quien se había suicidado. Fue acusado por 1, 3 y 4. Se le declaró inocente. A continuación fue sometido a 9 años de campo de trabajo como parte del proceso de desnazificación. Adquirió la libertad en 1950. Murió en 1953.
Funk, Walter; nacido en 1890; periodista en economía. Ministro de Economía y a partir de 1939 Presidente del Banco del Imperio. Se le acusó por 1, 2, 3 y 4 a cadena perpetua. Fue puesto en libertad por enfermedad en 1957. Murió en 1960.
Göring, Hermann; nacido en 1893. Creo en su función de Ministro de Asuntos Interiores de Prussia la " Policía Secreta Estatal", la cual más tarde resultaría en la Gestapo. A partir de 1936 movilizó al sector económico para el rearmamento de la nación. Se le acusó por 1, 2, 3 y 4; fue condenado a muerte por los 4 cargos. En vísperas de su ejecución se suicidó ingiriendo cianuro potásico. No fue posible aclarar con seguridad el origen de la cápsula que contenía la sustancia tóxica.
Hess, Rudolf; nacido en 1894. Fue sustituto de Hitler en el Partido Nacional Socialista Alemán de los Trabajadores a partir de 1933. En 1941 voló a Escocia en una misión que nunca pudo aclararse y fue internado en ese país. Se le acusó por 1, 2, 3 y 4; fue condenado a cadena perpetua por 1 y 2. Se suicidó en 1987 en la Prisión de Presos de Guerra de las Fuerzas Aliadas en Berlin-Spandau.
Jodl, Alfred; nacido en 1890. Coronel. Jefe de la Administración y Dirección Militar y consejo de Hitler en asuntos estratégicos y cuestiones operacionales. Fue acusado por los cargos 1, 2, 3 y 4. Se le condenó a muerte por 1, 2, 3 y 4
Keitel, Wilhelm; nacido en 1882. Jefe del Alto mando del Ejército Alemán. Se le acuso por 1, 2, 3 y 4. Fue condenado a muerte por 1, 2, 3 y 4.
Kaltenbruner, Ernst; nacido en 1903; Abogado. Jefe de la Policía Secreta y de la Oficina Central Imperial de Seguridad. Acusado por 1, 3 y 4, condenado a muerte por 3 y 4.
Krupp von Bohlen und Halbach, Gustav; nacido en 1870. Acusado como representante de la industria bélica y pesada alemana por 1, 2, 3 y 4. Debido a su incapacitación para tomar parte en las sesiones causada por un accidente de tráfico en 1944, el proceso en su contra fue suspendido en noviembre de 1945. Murió en 1950. El así denominado "Proceso Krupp" se llevó a cabo en 1948 ante un Tribunal Militar de los Estados Unidos Norteamericanos en la ciudad de Nuremberg. El hijo de Krupp, Alfredo Krupp fue condenado en este proceso a 12 años de prisión y se confiscó la fortuna familiar íntegra
Ley, Robert; nacido en 1890. Ingeniero Químico. Anuló en 1933 los sindicatos libres y a partir de entonces dirigió -basándose estrictamente en su ideología- el Frente de Trabajadores Alemanes (Deutsche Arbeitsfront). Fue acusado por los cargos 1, 2, 3 y 4. Se suicidó en la prisión de Nuremberg el día 26 de octubre de 1945.
Neurath, Konstantin; nacido en 1873. Miembro del Cuerpo Diplomático a partir de 1908. Desde marzo de 1939 a 1943 (cesado desde 1941). Fue Vicario Imperial de Bohemia y Moravia. Fue acusado por 1, 2, 3 y 4. Puesto en lobertad por enfermedad en 1954. Murió en 1956.
Papen, Franz von; nacido en 1879. Vicecanciller en el primer consejo de ministros de Hitler en 1933. Más tarde fue embajador en Viena y Ankara. Fue acusado por 1 y 2. Se le declaró inocente. A continuación fue condenado como proceso de desnazificación a 8 años de campo de trabajo. Murió en 1960.
Raeder, Erich; nacido en 1876. Fue Comandante en Jefe de la Marina de Guerra desde 1943. Se le acusó por 1, 2 y 3; condenado a cadena perpetua por 1, 2 y 3. Fue puesto en libertad en 1955 a causa de estar enfermo. Murió en 1960.
Ribbentrop, Joachim von; nacido en 1893. Comerciante. Ministro de Asuntos Exteriores del Imperio de 1938 a 1945. Acusado por 1, 2, 3 y 4; condenado a muerte por 1, 2, 3 y 4.
Rosenberg, Alfred; nacido en 1893. Ministro Imperial de los Territorios Ocupados del Este a partir de 1941. Se le acusó por 1, 2, 3 y 4; fue condenado a muerte por 1, 2, 3 y 4.
Sauckel, Fritz; nacido en 1894. A partir de 1942 fue apoderado general de Hitler para Servicios de Trabajo, y como tal, responsable de haber sometido a trabajos forzados en Alemania a más de 5 millones de hombres y mujeres de los territorios ocupados. Acusado por 1, 2, 3 y 4; condenado por 3 y 4 a muerte.
Schacht, Horace Greely Hjalmar; nacido en 1877. Banquero. Presidente del Banco Imperial Alemán y Ministro de Economía. A partir de 1944 en el campo de concentración de Flossenbuerg. Acusado por 1 y 2. Se le declaró inocente. Estuvo sometido a prisión por parte de las autoridades alemanas hasta 1948. Murió en 1970.
Schirach, Baldur von; nacido en 1907. Jefe de la Juventud del Imperio y (a partir de 1940) jefe de distrito de Viena. Acusado por 1 y 4; condenado a 20 años de prisión por 4. Puesto en libertad en 1966. Murió en 1974.
Seyb-Inquart, Alexander; nacido en 1892. Abogado. De 1940 a 1945 fue Comisario Imperial para los Territorios Holandeses Ocupados. Acusado por 1, 2, 3 y 4. Condenado a muerte por 2, 3 y 4
Speer, Alber; nacido en 1905. Arquitecto. Inspector General de Construcciones de Berlín a partir de 1937. A partir de 1942 a 1945 Ministro Imperial de Armamento y Munición. Acusado por 1, 2, 3 y 4. Condenado a 20 años de prisión por 3 y 4. Puesto en libertad en 1966. Murió en 1981.
Streicher, Julius; nacido en 1885. Maestro de educación escolar básica. Fue el fundador, en 1923, de la revista juvenil "Der Stuermer" - traducción: "Al Asalto"- la cual tenía como fin la agitación antisemita. Propietario y editor de tal publicación hasta 1945 -aún después de haber sido destruido de Franconia en 1940. Fue acusado por 1 y 4; condenado a muerte por 4.
El proceso
El Tribunal rechazó las argumentaciones de la defensa de que planificar o desarrollar una guerra no estaba definido con antelación como crímenes en derecho internacional, con lo que la condena de los acusados violaría el principio de la no retroactividad de la ley penal.
La causa se desarrolló durante 10 meses y 10 días, en 403 sesiones públicas. El proceso, las actas de acusación y las sentencias formaron parte de la doctrina que había quedado plasmada en la Carta de las Naciones Unidas.
Los veintiún acusados se sentaron en dos largos bancos corridos, con un pequeño pasillo en el centro, siguiendo cierto orden jerárquico. Ante ellos, sus abogados trabajaban sentados en sillas individuales y frente a éstos, en un estrado en alto, los jueces, tras los cuales se encontraban las banderas de los países vencedores.
Se reconstruyeron sucesos como el incendio del Reichstag, la Noche de los Cristales Rotos, la anexión de Austria, los Sudetes, la invasión de Checoslovaquia, la de Polonia, la operación Barbarroja, la invasión soviética, las técnicas dedespoblación, las ejecuciones masivas, las prácticas médicas contra enfermos y deficientes, los campos de concentración y exterminio -destinados sobre todo a la eliminación cruel y despiadada de la población judía-. También se proyectaron imágenes en diapositivas y películas y testimonios escalofriantesde algunas víctimas.
El único jerarca que acompañó a Göring durante el proceso fue Rudolph Hess quien, por su parte, aparentó no estar en sus cabales. Durante los interrogatorios Hess sonreía sin motivos, miraba fijo al techo o dibujaba mamarrachos sobre su banquillo. Apenas en su alegato final esbozó cierto grado de cordura cuando dijo que no se sentía arrepentido de haber servido al hombre más importante que había nacido en tierras alemanas en los últimos mil años, refiriéndose naturalmente a Adolf Hitler. Nunca se sabrá si Hess simuló su estado de locura aunque sus miradas cómplices con Göring parecen ratificar esta sospecha.
Hermann Göring, por su parte, también defendió a Hitler con una vehemencia que mereció la admiración de sus adversarios. Mientras los generales y ministros de Hitler se echaban las culpas unos a otros haciendo recaer la responsabilidad en Hitler como impartidor de las órdenes, Göring se levantó indignado y dijo ante el tribunal : "como me hubiese gustado que los alemanes aquí presentes hubiesen limitado su defensa a tres palabras: chúpame el culo". Göring bajó la vista una sola vez durante todo el proceso, en ocasión de la exhibición de algunas escenas de los campos de exterminio, y jamás se quebró ante el maltrato de sus carceleros.
Nuremberg fue un circo con Göring como figura estelar a falta de Hitler que astutamente se anticipó a la intención de los aliados suicidándose y ordenando quemar su cuerpo. El resto de los prisioneros, especialmente los ministros de Hitler, demostaron una conducta cobarde y egoísta que no sólo indignó a Göring sino también a sus acusadores. El arrogante y soberbio Ribbentropp se rebajó a niveles increíbles con tal de salvar su pellejo pronunciando frases ridículas como cuando se negó a revelar los secretos del pacto ruso-germano de 1939 alegando sus deberes de discreción como diplomático; Schact no entendía de qué lo acusaban; Frank apelaba al juicio de Dios para condenar el reinado de Hitler; Kaltembrunner se consideraba una víctima de Himmler; Von Papen en su rol de inocente consideraba a Hitler como un embustero patológico que los había engañado a todos;Hess repetía que no se acordaba de nada; Keitel se escudaba en su obediencia como soldado y por lo tanto se consideraba exento de toda responsabilidad. Albert Speer, organizador de la industria bélica, fue el único junto a Göring que no trató de eludir su responsabilidad y contestó siempre con rectitud.
Las ejecuciones fueron realizadas en la mañana del 16 de octubre de 1946, por un verdugo profesional, en un patíbulo instalado en el viejo gimnasio de la prisión de Nuremberg. Sus cuerpos fueron incinerados en un horno crematorio en Dachau y sus cenizas esparcidas en el cercano río Isar.
Los expedientes del Tribunal se encuentran en 22 tomos con 14.638 páginas. La acusación presentó 2.360 documentos, la defensa 2.700, el tribunal oyó a 240 testigos y verificó 300.000 declaraciones juradas. Los tribunales militares americanos realizaron otros doce juicios de oficiales alemanes de la Gestapo, SS, industriales alemanes y otras personas procesadas por sus actividades en los campos de concentración, deportaciones y experimentos médicos.
De forma parecida se realizaron con posterioridad los Juicios de Tokio para condenar a los criminales de guerra japoneses.
El Tribunal de Nuremberg puso los cimientos para la creación de un Tribunal Penal Internacional, establecido por 120 países en la Asamblea de la ONU celebrada en Roma el 19 de julio de 1998, y puesto en marcha en el año 2003 con sede en la Haya.
El proceso contribuyó a la objetivación y divulgación de las atrocidades nazis. Gracias al fiel cumplimiento de todas las garantías procesales que se establecen en un juicio, la historia posterior no puede dudar de la veracidad de los crímenes, todos ellos probados.
http://www2.cgae.es/es/cgae/revistapdf36/20.pdf
http://html.rincondelvago.com/los-juici ... mberg.html
En 1946 se estaban desarrollando las sesiones del proceso de Nuremberg, en el que fueron juzgados los dirigentes del régimen nazi que dirigió el III Reich Alemán. Algunos países y muchas gentes de la época no aceptaron la validez jurídica de aquel Tribunal Internacional. Se aducía que los vencedores no podían ser justos jueces de los vencidos. Sin embargo, los dirigentes de las naciones que se vieron arrastrados a la guerra tenían muy claro que aquello no podía volver a repetirse y que era necesario juzgar y condenar a los principales responsables de la terrible catástrofe de la Segunda Guerra Mundial. El tribunal era un primer paso para robustecer la paz futura y para garantizar un orden internacional que impidiera la repetición de situaciones semejantes.
Más de medio siglo después casi nadie discute la oportunidad de aquellos juicios. La Organización de Naciones Unidas configuró un nuevo sistema de relaciones internacionales, que no ha conseguido erradicar las guerras, pero que ha logrado controlarlas y localizarlas, evitando su extensión. No hemos alcanzado otra PAX Augusta, pero se ha evitado la conflagración total, a pesar de los difíciles tiempos de la guerra fría y la carrera de armamentos.
Por eso los Procesos de Nuremberg son uno de esos acontecimientos históricos complejos, que pueden ser analizados y juzgados desde distintas perspectivas, y que merece ser recordado.
Antecedentes:
En la historia no existían precedentes de la celebración de un juicio internacional contra los dirigentes de una nación soberana después de perder una guerra contra otras naciones.
La inexistencia de un derecho internacional reconocido por todas las naciones constituía un gran obstáculo para imputar delitos a los políticos desde instancias ajenas a la soberanía de su estado. Sus acciones estaban solo sometidas al ordenamiento jurídico de su país y el político era únicamente responsable ante los tribunales de este. Los políticos nazis, pues, solo podrían ser juzgados por los tribunales alemanes.
Las noticias de las atrocidades que estaban cometiendo los alemanes durante la guerra y la convicción de que el gobierno nazi había provocado deliberadamente la contienda favorecieron desde principios de 1941 el desarrollo de la idea de someter a un juicio internacional a los dirigentes del nazismo.
Wiston Churchill fue quien primero habló de crímenes de guerra y de la necesidad de que "el castigo por estos crímenes debiera tener lugar cuando se produjera el desenlace definitivo de la contienda".
En 1942 se creó una comisión con el fin de ir elaborando una lista de responsables que debían ser juzgados cuando terminase el conflicto.
En 1945, en la conferencia de Yalta, Stalin, Churchill y Roosevelt trataron también este tema, analizaron un amplio documento elaborado en Estados Unidos y establecieron las bases para llegar a un convenio entre los aliados sobre la forma en que el juicio debería celebrarse.
Finalmente, el 8 de agosto de 1945, cuando ya se había acabado la guerra, se firmó en Londres el acuerdo entre los 26 paises que habían intervenido en ella contra Alemania por el que se decidió la creación de un Tribunal Internacional Militar.
Juicio a criminales de guerra
Este proceso comienza con una sesión preliminar en Berlín, el 18 de octubre de 1945, presidida por el juez militar ruso Nikitchenko.
Pero el proceso como tal en contra de los principales culpables de crímenes contra la paz, de crímenes de guerra y de crímenes contra la humanidad se celebró entre el 20 de noviembre de 1945 y el 1 de octubre de 1946 en el Palacio de Justicia de la ciudad de Nuremberg. Lamentablemente muy pocos responsables de la barbarie alemana fueron juzgados e incluso muchos jerarcas nazis lograron evitar ser atrapados. A Nuremberg llegaron las caras más conocidas del III Reich, al menos, aquellas personas que aún seguían vivas al momento de celebrarse el proceso. Himmler, Goebbels y el propio Hitler se habían suicidado; solo Göring llegó vivo a Nuremberg en su condición de gran jerarca nazi.
Se escogió la ciudad de Nuremberg por una cuestión práctica: en Berlín no había quedado en pie ningún edificio que pudiera albergar un procedimiento judicial de estas características, pero Nuremberg poseía un palacio de justicia con una sala capaz para 600 personas, contiguo a un gran centro penitenciario en el que se podía recluir a los detenidos y con un acceso a la sala, que, por una parte, evitaba todo contacto no deseado de los dirigentes nazis, y por otra, hacía completamente seguros los traslados de los presos desde las celdas al tribunal.
Nuremberg ofrecía además, un aliciente añadido: había sido la sede de las grandes manifestaciones; allí habían desplegado todos sus símbolos y banderas aclamadas por multitudes, y allí se había aprobado las leyes más racistas del III Reich.
Los cargos de la acusación
La acusación formuló cuatro cargos:
1.- Crímenes contra la paz: es decir, actuaciones que llevaran a la planificación o ejecución de violaciones de tratados internacionales o comisión de actos de agresión injustificada contra naciones.
2.- Conspiración: actuación con otros o asociación con ellos para cometer cualquiera de los crímenes señalados en los cargos anteriores.
3.- Crímenes de guerra: violaciones de las leyes y convenios internacionales sobre la guerra.
4.- Crímenes contra la humanidad: planificación, ejecución o participación en exterminios y genocidios.
Jueces
El tribunal quedó consituido por cuatro jueces procedentes de las cuatro potencias principales que habían intervenido en la guerra: Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña y la URSS. Cada uno de ellos tenía un sustituto de su misma nacionalidad. La presidencia recayó en manos del inglés Geoffrey Lawrence. Los otros jueces serían, Francis Colddle por EEUU, Henri Donnedieu de Vabres por Francia y Iona Nikitchenko por la Unión Soviética. El juez federal americano Robert H. Jackson ejerció de abogado, fiscal acusador principal por parte de los EEUU, y se hizo cargo de la organización del juicio.
Acusados
Los acusados fueron seleccionados entre los ochocientos altos jefes detenidos en los últimos días de la guerra. La lista, al final, quedó reducida a 24 nombres, aunque el tribunal solo abrió la causa contra 22, porque la acusación contra el magnate de la industria pesada Gustav Krupp se sobreseyó por su avanzada edad y mala salud y porque Robert Ley, responsable de los campos de trabajo, consiguió suicidarse, ahorcándose con una sábana antes de que se abriera el proceso. Ante el tribunal se presentó todavía uno menos, ya que Martin Borman sería juzgado en rebeldía porque aun no se había confirmado su muerte en la batalla de Berlín (el total de acusados presentes en Nuremberg fue de 21 personas).
Borman, Martin; nacido en 1900; agrónomo; a partir de 1933 jefe de departamento bajo Rudolf Hess; asistente principal de Hitler en la central de comando del "Fuhrer" durante la Segunda Guerra Mundial. Se ignora qué fue de él al finalizar la guerra. Se le acusó de los cargos 1, 3 y 4; fue condenado a muerte en base a 3 y 4.
Dönitz, Karl; gran almirante, constituyó un "Gobierno Administrativo del Imperio" al morir Hitler el 2 de Mayo de 1945. Fue acusado de 1, 2 y 3; por 2 y 3 fue condenado a 10 años de prisión. Salió de prisión en 1956. Falleció en 1960
Frank,Hans; nacido en 1900, abogado. Fue gobernador de Polonia a partir de 1939. Se le acusó de 1, 3 y 4; fue condenado a muerte por 3 y 4.
Frick, Wilhelm; nacido en 1877; Ministro de Asuntos Interiores del Imperio. Acusado por 1, 2, 3 y 4. Fue condenado a muerte por 2, 3 y 4.
Fritzsche, Hans; nacido en 1900; periodista; director de las Fuerzas de Inteligencia dentro del Departamento de Prensa del Ministerio de Propaganda. En cierta forma, fue acusado en sustitución de Goebbels, quien se había suicidado. Fue acusado por 1, 3 y 4. Se le declaró inocente. A continuación fue sometido a 9 años de campo de trabajo como parte del proceso de desnazificación. Adquirió la libertad en 1950. Murió en 1953.
Funk, Walter; nacido en 1890; periodista en economía. Ministro de Economía y a partir de 1939 Presidente del Banco del Imperio. Se le acusó por 1, 2, 3 y 4 a cadena perpetua. Fue puesto en libertad por enfermedad en 1957. Murió en 1960.
Göring, Hermann; nacido en 1893. Creo en su función de Ministro de Asuntos Interiores de Prussia la " Policía Secreta Estatal", la cual más tarde resultaría en la Gestapo. A partir de 1936 movilizó al sector económico para el rearmamento de la nación. Se le acusó por 1, 2, 3 y 4; fue condenado a muerte por los 4 cargos. En vísperas de su ejecución se suicidó ingiriendo cianuro potásico. No fue posible aclarar con seguridad el origen de la cápsula que contenía la sustancia tóxica.
Hess, Rudolf; nacido en 1894. Fue sustituto de Hitler en el Partido Nacional Socialista Alemán de los Trabajadores a partir de 1933. En 1941 voló a Escocia en una misión que nunca pudo aclararse y fue internado en ese país. Se le acusó por 1, 2, 3 y 4; fue condenado a cadena perpetua por 1 y 2. Se suicidó en 1987 en la Prisión de Presos de Guerra de las Fuerzas Aliadas en Berlin-Spandau.
Jodl, Alfred; nacido en 1890. Coronel. Jefe de la Administración y Dirección Militar y consejo de Hitler en asuntos estratégicos y cuestiones operacionales. Fue acusado por los cargos 1, 2, 3 y 4. Se le condenó a muerte por 1, 2, 3 y 4
Keitel, Wilhelm; nacido en 1882. Jefe del Alto mando del Ejército Alemán. Se le acuso por 1, 2, 3 y 4. Fue condenado a muerte por 1, 2, 3 y 4.
Kaltenbruner, Ernst; nacido en 1903; Abogado. Jefe de la Policía Secreta y de la Oficina Central Imperial de Seguridad. Acusado por 1, 3 y 4, condenado a muerte por 3 y 4.
Krupp von Bohlen und Halbach, Gustav; nacido en 1870. Acusado como representante de la industria bélica y pesada alemana por 1, 2, 3 y 4. Debido a su incapacitación para tomar parte en las sesiones causada por un accidente de tráfico en 1944, el proceso en su contra fue suspendido en noviembre de 1945. Murió en 1950. El así denominado "Proceso Krupp" se llevó a cabo en 1948 ante un Tribunal Militar de los Estados Unidos Norteamericanos en la ciudad de Nuremberg. El hijo de Krupp, Alfredo Krupp fue condenado en este proceso a 12 años de prisión y se confiscó la fortuna familiar íntegra
Ley, Robert; nacido en 1890. Ingeniero Químico. Anuló en 1933 los sindicatos libres y a partir de entonces dirigió -basándose estrictamente en su ideología- el Frente de Trabajadores Alemanes (Deutsche Arbeitsfront). Fue acusado por los cargos 1, 2, 3 y 4. Se suicidó en la prisión de Nuremberg el día 26 de octubre de 1945.
Neurath, Konstantin; nacido en 1873. Miembro del Cuerpo Diplomático a partir de 1908. Desde marzo de 1939 a 1943 (cesado desde 1941). Fue Vicario Imperial de Bohemia y Moravia. Fue acusado por 1, 2, 3 y 4. Puesto en lobertad por enfermedad en 1954. Murió en 1956.
Papen, Franz von; nacido en 1879. Vicecanciller en el primer consejo de ministros de Hitler en 1933. Más tarde fue embajador en Viena y Ankara. Fue acusado por 1 y 2. Se le declaró inocente. A continuación fue condenado como proceso de desnazificación a 8 años de campo de trabajo. Murió en 1960.
Raeder, Erich; nacido en 1876. Fue Comandante en Jefe de la Marina de Guerra desde 1943. Se le acusó por 1, 2 y 3; condenado a cadena perpetua por 1, 2 y 3. Fue puesto en libertad en 1955 a causa de estar enfermo. Murió en 1960.
Ribbentrop, Joachim von; nacido en 1893. Comerciante. Ministro de Asuntos Exteriores del Imperio de 1938 a 1945. Acusado por 1, 2, 3 y 4; condenado a muerte por 1, 2, 3 y 4.
Rosenberg, Alfred; nacido en 1893. Ministro Imperial de los Territorios Ocupados del Este a partir de 1941. Se le acusó por 1, 2, 3 y 4; fue condenado a muerte por 1, 2, 3 y 4.
Sauckel, Fritz; nacido en 1894. A partir de 1942 fue apoderado general de Hitler para Servicios de Trabajo, y como tal, responsable de haber sometido a trabajos forzados en Alemania a más de 5 millones de hombres y mujeres de los territorios ocupados. Acusado por 1, 2, 3 y 4; condenado por 3 y 4 a muerte.
Schacht, Horace Greely Hjalmar; nacido en 1877. Banquero. Presidente del Banco Imperial Alemán y Ministro de Economía. A partir de 1944 en el campo de concentración de Flossenbuerg. Acusado por 1 y 2. Se le declaró inocente. Estuvo sometido a prisión por parte de las autoridades alemanas hasta 1948. Murió en 1970.
Schirach, Baldur von; nacido en 1907. Jefe de la Juventud del Imperio y (a partir de 1940) jefe de distrito de Viena. Acusado por 1 y 4; condenado a 20 años de prisión por 4. Puesto en libertad en 1966. Murió en 1974.
Seyb-Inquart, Alexander; nacido en 1892. Abogado. De 1940 a 1945 fue Comisario Imperial para los Territorios Holandeses Ocupados. Acusado por 1, 2, 3 y 4. Condenado a muerte por 2, 3 y 4
Speer, Alber; nacido en 1905. Arquitecto. Inspector General de Construcciones de Berlín a partir de 1937. A partir de 1942 a 1945 Ministro Imperial de Armamento y Munición. Acusado por 1, 2, 3 y 4. Condenado a 20 años de prisión por 3 y 4. Puesto en libertad en 1966. Murió en 1981.
Streicher, Julius; nacido en 1885. Maestro de educación escolar básica. Fue el fundador, en 1923, de la revista juvenil "Der Stuermer" - traducción: "Al Asalto"- la cual tenía como fin la agitación antisemita. Propietario y editor de tal publicación hasta 1945 -aún después de haber sido destruido de Franconia en 1940. Fue acusado por 1 y 4; condenado a muerte por 4.
El proceso
El Tribunal rechazó las argumentaciones de la defensa de que planificar o desarrollar una guerra no estaba definido con antelación como crímenes en derecho internacional, con lo que la condena de los acusados violaría el principio de la no retroactividad de la ley penal.
La causa se desarrolló durante 10 meses y 10 días, en 403 sesiones públicas. El proceso, las actas de acusación y las sentencias formaron parte de la doctrina que había quedado plasmada en la Carta de las Naciones Unidas.
Los veintiún acusados se sentaron en dos largos bancos corridos, con un pequeño pasillo en el centro, siguiendo cierto orden jerárquico. Ante ellos, sus abogados trabajaban sentados en sillas individuales y frente a éstos, en un estrado en alto, los jueces, tras los cuales se encontraban las banderas de los países vencedores.
Se reconstruyeron sucesos como el incendio del Reichstag, la Noche de los Cristales Rotos, la anexión de Austria, los Sudetes, la invasión de Checoslovaquia, la de Polonia, la operación Barbarroja, la invasión soviética, las técnicas dedespoblación, las ejecuciones masivas, las prácticas médicas contra enfermos y deficientes, los campos de concentración y exterminio -destinados sobre todo a la eliminación cruel y despiadada de la población judía-. También se proyectaron imágenes en diapositivas y películas y testimonios escalofriantesde algunas víctimas.
El único jerarca que acompañó a Göring durante el proceso fue Rudolph Hess quien, por su parte, aparentó no estar en sus cabales. Durante los interrogatorios Hess sonreía sin motivos, miraba fijo al techo o dibujaba mamarrachos sobre su banquillo. Apenas en su alegato final esbozó cierto grado de cordura cuando dijo que no se sentía arrepentido de haber servido al hombre más importante que había nacido en tierras alemanas en los últimos mil años, refiriéndose naturalmente a Adolf Hitler. Nunca se sabrá si Hess simuló su estado de locura aunque sus miradas cómplices con Göring parecen ratificar esta sospecha.
Hermann Göring, por su parte, también defendió a Hitler con una vehemencia que mereció la admiración de sus adversarios. Mientras los generales y ministros de Hitler se echaban las culpas unos a otros haciendo recaer la responsabilidad en Hitler como impartidor de las órdenes, Göring se levantó indignado y dijo ante el tribunal : "como me hubiese gustado que los alemanes aquí presentes hubiesen limitado su defensa a tres palabras: chúpame el culo". Göring bajó la vista una sola vez durante todo el proceso, en ocasión de la exhibición de algunas escenas de los campos de exterminio, y jamás se quebró ante el maltrato de sus carceleros.
Nuremberg fue un circo con Göring como figura estelar a falta de Hitler que astutamente se anticipó a la intención de los aliados suicidándose y ordenando quemar su cuerpo. El resto de los prisioneros, especialmente los ministros de Hitler, demostaron una conducta cobarde y egoísta que no sólo indignó a Göring sino también a sus acusadores. El arrogante y soberbio Ribbentropp se rebajó a niveles increíbles con tal de salvar su pellejo pronunciando frases ridículas como cuando se negó a revelar los secretos del pacto ruso-germano de 1939 alegando sus deberes de discreción como diplomático; Schact no entendía de qué lo acusaban; Frank apelaba al juicio de Dios para condenar el reinado de Hitler; Kaltembrunner se consideraba una víctima de Himmler; Von Papen en su rol de inocente consideraba a Hitler como un embustero patológico que los había engañado a todos;Hess repetía que no se acordaba de nada; Keitel se escudaba en su obediencia como soldado y por lo tanto se consideraba exento de toda responsabilidad. Albert Speer, organizador de la industria bélica, fue el único junto a Göring que no trató de eludir su responsabilidad y contestó siempre con rectitud.
Las ejecuciones fueron realizadas en la mañana del 16 de octubre de 1946, por un verdugo profesional, en un patíbulo instalado en el viejo gimnasio de la prisión de Nuremberg. Sus cuerpos fueron incinerados en un horno crematorio en Dachau y sus cenizas esparcidas en el cercano río Isar.
Los expedientes del Tribunal se encuentran en 22 tomos con 14.638 páginas. La acusación presentó 2.360 documentos, la defensa 2.700, el tribunal oyó a 240 testigos y verificó 300.000 declaraciones juradas. Los tribunales militares americanos realizaron otros doce juicios de oficiales alemanes de la Gestapo, SS, industriales alemanes y otras personas procesadas por sus actividades en los campos de concentración, deportaciones y experimentos médicos.
De forma parecida se realizaron con posterioridad los Juicios de Tokio para condenar a los criminales de guerra japoneses.
El Tribunal de Nuremberg puso los cimientos para la creación de un Tribunal Penal Internacional, establecido por 120 países en la Asamblea de la ONU celebrada en Roma el 19 de julio de 1998, y puesto en marcha en el año 2003 con sede en la Haya.
El proceso contribuyó a la objetivación y divulgación de las atrocidades nazis. Gracias al fiel cumplimiento de todas las garantías procesales que se establecen en un juicio, la historia posterior no puede dudar de la veracidad de los crímenes, todos ellos probados.
http://www2.cgae.es/es/cgae/revistapdf36/20.pdf
http://html.rincondelvago.com/los-juici ... mberg.html
Vie May 23, 2008 4:34 am
Mika, una cosa que apuntas, y es el "temita" de la legalidad tantas veces puesta en duda sobre estos juicios. Lo que aun no entiendo, es que algunos nazis se les perdonaran la vida, teniendo en cuenta lo que hicieron. Uno que en principio no fue nazi, pero compartio como funcionario toda la guerra fue Papen. Lo cierto que el juicio, sirvio mas que nada para lo que decis en el ultimo parrafo, porque a su vez que eran juzgados algunos, los otros (los menos conocidos) eran fugados "misteriosamente" por los msmos aliados (en particular los occidentales). Y asi hoy aparecen en USA, Canada, Argentina, Chile, Paraguay, Bolivia y anda saber que parte de sudamerica y latinoamerica, criminales de guerra que no pudieron ser juzgados como corresponde en su momento. La liviandad en ese momento de los aliados, hace que los que se estan capturando hoy en dia, practicamente no tengan una condena justa (Caso Priebke por ejemplo).
Que pudo ser un circo? Y si tal vez, porque dejaron fugarse al resto.
Pd : Excelente relato y sintesis
Que pudo ser un circo? Y si tal vez, porque dejaron fugarse al resto.
Pd : Excelente relato y sintesis
Vie May 23, 2008 4:52 am
Yo no creo que los hayan "dejado fugarse", con exepción de los que reclutaron para sus propios fines. El caos en Alemania y Europa en general tras la guerra debe haber sido tan fenomenal, con centenares de miles de desplazados, ruinas, documentos extraviados, archivos destruídos, etc etc., que no debe haber sido muy difícil para los criminales ocultarse o pasar desapercibidos, además, a no olvidarlo, había necesidades mucho más apremiantes, como la de no morirse de hambre y/o de frío.
Sin polemizar y en forma muy personal creo que se pudo pillar en esos momentos una cantidad muy apreciable de malulos teniendo en consideración las circunstancias. Por último, creo conveniente recordar que algunos de ellos, muy previsores, habían preparado sus fugas con antelación y tenían en su poder documentos falsos elaborados cuidadosamente, por lo que su pesquisa se hacía muy difícil, además que algunos recibieron ayuda organizada para huír a América, tema que ha sido tratado en profundidad en el foro.
Salu2
Sin polemizar y en forma muy personal creo que se pudo pillar en esos momentos una cantidad muy apreciable de malulos teniendo en consideración las circunstancias. Por último, creo conveniente recordar que algunos de ellos, muy previsores, habían preparado sus fugas con antelación y tenían en su poder documentos falsos elaborados cuidadosamente, por lo que su pesquisa se hacía muy difícil, además que algunos recibieron ayuda organizada para huír a América, tema que ha sido tratado en profundidad en el foro.
Salu2
Vie May 23, 2008 9:01 pm
Buenisimo informe de los juicios de Nuremberg, muy completo.
Pero a ver una cosa, alguien me puede explicar esto??
Speer, Albert; nacido en 1905. Arquitecto. Inspector General de Construcciones de Berlín a partir de 1937. A partir de 1942 a 1945 Ministro Imperial de Armamento y Munición. Acusado por 1, 2, 3 y 4. Condenado a 20 años de prisión por 3 y 4. Puesto en libertad en 1966. Murió en 1981.
Que paso con este tipo? se lo acuso por todos los cargos y como puede ser que solo se le condeno a 20 años de prision por los cargos 3 y 4? no deberia haber sido condenado a muerte?? los demas dirigentes nazis que presentaban las mismas acusaciones que Speer fueron a la "guillotina" de una.
Pero a ver una cosa, alguien me puede explicar esto??
Speer, Albert; nacido en 1905. Arquitecto. Inspector General de Construcciones de Berlín a partir de 1937. A partir de 1942 a 1945 Ministro Imperial de Armamento y Munición. Acusado por 1, 2, 3 y 4. Condenado a 20 años de prisión por 3 y 4. Puesto en libertad en 1966. Murió en 1981.
Que paso con este tipo? se lo acuso por todos los cargos y como puede ser que solo se le condeno a 20 años de prision por los cargos 3 y 4? no deberia haber sido condenado a muerte?? los demas dirigentes nazis que presentaban las mismas acusaciones que Speer fueron a la "guillotina" de una.
Vie May 23, 2008 9:11 pm
Si hubiera sido por el juez ruso... No quedaba titere con cabeza... Y si junto a otro fueron los unicos que por esos cargos no fueron condenados a muerte...
Re: El Juicio de Nuremberg
Sab Abr 04, 2009 4:56 am
A mi muchas de las acusaciones me parecen injustas, estas son las creo injustas
Bormann acusado de 3
Donitz acusado de 2
Frank acusado de 3
Frick acusado de 3
Fritzsche acusado de 3
Funk acusado de 1, 2, 3 y 4
Goering acusado de 4
Hess acusado de 3
Jodl acusado de 2 y 4
Keitel acusado de 2 y 4
Kaltenbruner acusado de 3
Krupp acusado de 1, 2, 3 y 4
Ley acusado de 3
Neurath acusado de 3
Papen acusado de 1 y 2
Raeder acusado de 2
Ribbentrop acusado de 3
Rosenberg acusado de 3
Sauckel acusado de 2 y 3
Schacht acusado de 1 y 2
Seyb-Inquart acusado de 3
Speer acusado de 3
Para mi de todos ellos los unicos que cometieron crimenes de guerra fueron los militares (Keitel, Jodl, Goering, Raeder y Donitz), tambien me parece injusto que juzgaran a Fritzsche y a Kaltenbruner por lo que hicieron Goebbels y Heydrich respectivamente, tambien me parece injusto que Sauckel, que fue acusado y declarado culpable exactamente por los mismos crimenes que Speer, fuera condenado a muerte y Speer a solo 20 años de carcel. Pero sin duda para mi lo mas injusto es que la URSS no tenia ningun derecho de participar en el proceso pues ella tambien habia cometido horribles crimenes antes y durante la guerra como la masacre de Katyn
Por cierto Baron Rojo a Speer lo condenaron a 20 años de carcel porque brindo a los aliados informacion muy valiosa que ayudo a condenar a Goering, a Sauckel e incluso a si mismo
Bormann acusado de 3
Donitz acusado de 2
Frank acusado de 3
Frick acusado de 3
Fritzsche acusado de 3
Funk acusado de 1, 2, 3 y 4
Goering acusado de 4
Hess acusado de 3
Jodl acusado de 2 y 4
Keitel acusado de 2 y 4
Kaltenbruner acusado de 3
Krupp acusado de 1, 2, 3 y 4
Ley acusado de 3
Neurath acusado de 3
Papen acusado de 1 y 2
Raeder acusado de 2
Ribbentrop acusado de 3
Rosenberg acusado de 3
Sauckel acusado de 2 y 3
Schacht acusado de 1 y 2
Seyb-Inquart acusado de 3
Speer acusado de 3
Para mi de todos ellos los unicos que cometieron crimenes de guerra fueron los militares (Keitel, Jodl, Goering, Raeder y Donitz), tambien me parece injusto que juzgaran a Fritzsche y a Kaltenbruner por lo que hicieron Goebbels y Heydrich respectivamente, tambien me parece injusto que Sauckel, que fue acusado y declarado culpable exactamente por los mismos crimenes que Speer, fuera condenado a muerte y Speer a solo 20 años de carcel. Pero sin duda para mi lo mas injusto es que la URSS no tenia ningun derecho de participar en el proceso pues ella tambien habia cometido horribles crimenes antes y durante la guerra como la masacre de Katyn
Por cierto Baron Rojo a Speer lo condenaron a 20 años de carcel porque brindo a los aliados informacion muy valiosa que ayudo a condenar a Goering, a Sauckel e incluso a si mismo
Re: El Juicio de Nuremberg
Sab Abr 04, 2009 2:04 pm
¿Altos jerarcas como Göring, Bormann o Speer acusados injustamente? ¿Por qué? ¿No eran ellos los máximos responsables? Lo mismo digo de la cúpula militar. Y el resto, ¿vas a decirme que un Director de la RSHA como Katelbrunner no era responsable de nada? Además te contradices, si es que sabes lo que dices. Primeros pones a Göring, Donitz, Jodl y otros en la lista de acusados injustamente y luego dices que estos sí podían ser acusados de crímenes de guerra. Y aquí me parece que es donde te estás liando, porque en Nüremberg no sólo se juzgó por crímenes de guerra. En el artículo de Mikha pone bien claro los cargos y las acusaciones contra cada encausado.
Sobre Friztsche este fue absuelto por falta de pruebas. Sobre Speer no te lo discuto: tendrían que haberlo colgado como al resto. Y sobre los soviéticos tampoco te lo discuto. Es más, soviéticos y alemanes no fueron los únicos en cometer crímenes de guerra, y la URSS también podía ser acusada del 1º y 2º cargo dado el Pacto Ribbentrop-Molotov. Sin embargo cabe recordar que parte de la responsabilidad de ese pacto recae en el aislamiento al que fue sometida la URSS por parte, especialmente, de los británicos. Con todo, Robert Gellately (Las entrevistas de Nüremberg) lo deja bien claro cuando dice que acusar a la URSS en aquel entonces resultaba muy difícil de digerir desde un punto de vista político.
Como ya dije en otra ocasión, los juicios de Nüremberg estuvieron mal hechos y no fueron del todo justos. Pero fueron necesarios porque había que crear jurisprudencia en tal de que las atrocidades cometidas por los nazis no volvieran a repetirse o, al menos, quedase claro que podían e iban a ser juzgadas. Pese a todo, fueron un hito en la historia judidial que ha traído más bienes que males.
Sobre Friztsche este fue absuelto por falta de pruebas. Sobre Speer no te lo discuto: tendrían que haberlo colgado como al resto. Y sobre los soviéticos tampoco te lo discuto. Es más, soviéticos y alemanes no fueron los únicos en cometer crímenes de guerra, y la URSS también podía ser acusada del 1º y 2º cargo dado el Pacto Ribbentrop-Molotov. Sin embargo cabe recordar que parte de la responsabilidad de ese pacto recae en el aislamiento al que fue sometida la URSS por parte, especialmente, de los británicos. Con todo, Robert Gellately (Las entrevistas de Nüremberg) lo deja bien claro cuando dice que acusar a la URSS en aquel entonces resultaba muy difícil de digerir desde un punto de vista político.
Como ya dije en otra ocasión, los juicios de Nüremberg estuvieron mal hechos y no fueron del todo justos. Pero fueron necesarios porque había que crear jurisprudencia en tal de que las atrocidades cometidas por los nazis no volvieran a repetirse o, al menos, quedase claro que podían e iban a ser juzgadas. Pese a todo, fueron un hito en la historia judidial que ha traído más bienes que males.
Re: El Juicio de Nuremberg
Sab Abr 04, 2009 9:03 pm
No digo que 100% injustamente acusados, ahi he puesto especificamente una lista de que cargo o cargos especificos me parecen injustos
Re: El Juicio de Nuremberg
Sab Abr 04, 2009 9:16 pm
No se si colocar este post en éste hilo, pero como se me ocurrió mientras lo leía, lo dejeré aquí.
Entiendo que el juicio de Nuremberg no es solamente un juicio como tal, el más conocido es el de los juzgados que tenían un alto cargo dentro del gobierno aleman y el ejército, aparte de éste estubo el juicio de los doctores en el cual hubieran juzgado a Mengele si lo hubiesen capturado y otros que no recuerdo, pero a lo que quiero llegar es a ésto:
¿Que hubiera pasado si a Hitler lo capturan vivo?
Le hubieran echo un juicio aparte en Nuremberg o lo hubiesen colocado a la par de Goering ó... si los rusos lo capturan lo habrían fusilado sumariamente. ¿Que creen que hubiese pasado si a Hilter lo capturan vivo?
Entiendo que el juicio de Nuremberg no es solamente un juicio como tal, el más conocido es el de los juzgados que tenían un alto cargo dentro del gobierno aleman y el ejército, aparte de éste estubo el juicio de los doctores en el cual hubieran juzgado a Mengele si lo hubiesen capturado y otros que no recuerdo, pero a lo que quiero llegar es a ésto:
¿Que hubiera pasado si a Hitler lo capturan vivo?
Le hubieran echo un juicio aparte en Nuremberg o lo hubiesen colocado a la par de Goering ó... si los rusos lo capturan lo habrían fusilado sumariamente. ¿Que creen que hubiese pasado si a Hilter lo capturan vivo?
Re: El Juicio de Nuremberg
Sab Abr 04, 2009 10:17 pm
Hola Rodolfo, ¿reiteras que, por ejemplo, que Göring fue injustamente acusado de los cargos? ¿En qué te basas?
Re: El Juicio de Nuremberg
Dom Abr 12, 2009 9:46 am
Aclaremos un poco los tanto Rodolfo. Este juicio no fue un invento de los sovieticos... De hecho los sovieticos participaron bien poco en el asunto. De los cuatro Jueces, solo uno era sovietico. El fiscal acusador era americano (era el fiscal que llevaba la batuta). De haber sido por Stalin no hubiera habido juicio. Injusto? Si injusto porque algunos pajaros como Speer zafaron, Los grandes empresarios que participaron en el exterminio tambien, Muchos jerarcas salieron salvos. Pero algo es algo, y amen de eso habia que asentar jurisprudencia de una buena vez para este tipo de crimenes. Solo los mandos militares dices? Y que hay de los dueños de la IG Farben? La Krupp y otras grandes empresas que usaron mano de obra esclava, o que participaron tecnologicamente en la implantacion del exterminio? Lo injusto es que ellos salvaran el pellejo.
Re: El Juicio de Nuremberg
Dom Abr 12, 2009 10:39 pm
Siento discrepar, pero fue precisamente Stalin el primer interesado en que se celebrara un juicio, al contrario que Cnurchill y Roosevelt, que temían que la celebración de un juicio sirviera como un elemento de propaganda y/o justificación de los crímenes nazis.
Según cita Richard Overy en su obra Interrogatorios, refiriéndose a una carta dirigida por Churchill a Roosevelt tras unas conversaciones con Stalin en Octubre de 1944:
"Tio Joe adoptó una postura inesperádamente ultrarrespetuosa... Que no debe haber ejecuciones sin proceso; de lo contrario el mundo dirá que tenemos miedo a juzgarlos... Si no hay juicios no debe haber penas de muerte."
Saludos.
Según cita Richard Overy en su obra Interrogatorios, refiriéndose a una carta dirigida por Churchill a Roosevelt tras unas conversaciones con Stalin en Octubre de 1944:
"Tio Joe adoptó una postura inesperádamente ultrarrespetuosa... Que no debe haber ejecuciones sin proceso; de lo contrario el mundo dirá que tenemos miedo a juzgarlos... Si no hay juicios no debe haber penas de muerte."
Saludos.
Re: El Juicio de Nuremberg
Lun Abr 13, 2009 12:47 am
En realidad, como suele suceder, la cosa fue por "capítulos". Primero tanto Churchill como Roosevelt y Stalin optaban por una ejecución sumaria de los responsables nazis. Fue Molotov, el 14 de octubre del 42, quien propuso realizar juicios. La razón era que la URSS comenzaba a sospechar del hecho de que los británicos no quisieran juzgar a Hess, por no decir de que los Aliados occidentales pudieran llegar a algún tipo de acuedo con los alemanes. El 1 de noviembra se realizó la Declaración de Moscú, donde los tres Jefes de Gobierno se pusieron de acuerdo en juzgar a los criminales en el lugar de los hechos, quedando el juicio y sentencia arreglo el país donde se sucedieron estos hechos. Para los principales responsables, cuyos crímenes eran generales en todos los territorios afectados, se debía proceder de otra manera que no se especificó.
Churchill defendía la idea de elaborar una lista de hasta 100 nazis responsables y limitar los juicios a la tarea de identificarles. Tras esto serían declarados fugitivos y cualquiera podría matarles con todas las de la ley. Parece ser que logró consenso sobre esta idea dentro de su gabinete.
Roosevelt y Morgenthau estaba por la labor de ejecutar sumariamente a un hermoso número de responsables nazis, mientras que Stimson reclamaba un juicio acorde con las leyes.
Stalin, se supone, que no hubiese dudado en ejecutar a cuantos hiciese falta y unos cuantos más. Lo hacía en su casa y no se ve el por qué no iba a hacerlo con sus peores enemigos. Realmente, lo único que deseaba evitar Stalin, es que los angloamericanos llegasen a algún tipo de acuerdo con los alemanes antes de finalizar la guerra, o que Hess quedara desapareciera en manos británicas y no se resolviera su misterioso viaje.
Roosevelt y Churchill se pusieron de acuerdo y declararon en Quebec, en agosto del 44, que no aprobaban un juicio a responsables de la talla de Himmler, Göring, Goebbels o el propio Hitler, aduciendo que se trataba más de una cuestión política que judicial pues, dada su importancia, debía quedar en manos de los dirigentes políticos y no de los jueces. Convencidos de que Stalin aprobaría la propuesta, se llevaron el varapalo de un cambio de opinión de Stalin, el cual ahora apoyaba por completo la propuesta de Molotov: un juicio internacional. Según algunos, Stalin pretendió una propaganda, bien de consumo interno, bien como medio para mejorar su imagen en occidente. Pero lo cierto es que en los territorios ocupados por la URSS ya se venían celebrando juicios contra nazis e, incluso, colaboradores soviéticos. El primero fue en Krasnodar en julio del 43, gracias al cual se dio a conocer al mundo entero uno de los primeros casos de matanza de judíos. Estos juicios recibían una gran publicidad por todos los medios posibles, por lo que parece probable la tesis de que Stalin deseaba una propaganda que lavara su imagen dentro y fuera de la URSS.
En los EUA las gestiones de Stimson dieron pie a un influyente documento que abogaba por unos juicios capaces de criminalizar no sólo a los dirigentes, sino a las organizaciones nazis como las SS o el propio NSDAP. Si la organización era declarada culpable, cualquiera de sus integrantes lo sería automáticamente. Esto al final se modificó y en los juicios llevados a cabo los miembros de una organización declarada culpable tenían su propio juicio. Hull apoyó esta propuesta y entre todos trataron de convencer a Roosevelt sin éxito. Fue Truman quien compartió estos criterios y logró convencer a los británicos. Una resolución conjunta de los tres Jefes de Estado (cuatro si contamos a Francia) llegó por fin el 3 de mayo del 45, y hasta el 8 de agosto no terminaron las negociaciones sobre los estatutos del juicio. Luego aún tuvieron que limarse diferencias, pues para los soviéticos los juicios debían ser un teatro, tal y como solían hacer desde los Procesos de Moscú. En cambio, para los aliados occidentales, el juicio debía contemplar la presunción de inocencia. También había diferencias entre la forma de entender el proceso judicial entre los estadounidenses y los británicos, reflejo del sistema judicial en cada país. Los soviéticos, desde luego, entendía menos todo esto.
Churchill defendía la idea de elaborar una lista de hasta 100 nazis responsables y limitar los juicios a la tarea de identificarles. Tras esto serían declarados fugitivos y cualquiera podría matarles con todas las de la ley. Parece ser que logró consenso sobre esta idea dentro de su gabinete.
Roosevelt y Morgenthau estaba por la labor de ejecutar sumariamente a un hermoso número de responsables nazis, mientras que Stimson reclamaba un juicio acorde con las leyes.
Stalin, se supone, que no hubiese dudado en ejecutar a cuantos hiciese falta y unos cuantos más. Lo hacía en su casa y no se ve el por qué no iba a hacerlo con sus peores enemigos. Realmente, lo único que deseaba evitar Stalin, es que los angloamericanos llegasen a algún tipo de acuerdo con los alemanes antes de finalizar la guerra, o que Hess quedara desapareciera en manos británicas y no se resolviera su misterioso viaje.
Roosevelt y Churchill se pusieron de acuerdo y declararon en Quebec, en agosto del 44, que no aprobaban un juicio a responsables de la talla de Himmler, Göring, Goebbels o el propio Hitler, aduciendo que se trataba más de una cuestión política que judicial pues, dada su importancia, debía quedar en manos de los dirigentes políticos y no de los jueces. Convencidos de que Stalin aprobaría la propuesta, se llevaron el varapalo de un cambio de opinión de Stalin, el cual ahora apoyaba por completo la propuesta de Molotov: un juicio internacional. Según algunos, Stalin pretendió una propaganda, bien de consumo interno, bien como medio para mejorar su imagen en occidente. Pero lo cierto es que en los territorios ocupados por la URSS ya se venían celebrando juicios contra nazis e, incluso, colaboradores soviéticos. El primero fue en Krasnodar en julio del 43, gracias al cual se dio a conocer al mundo entero uno de los primeros casos de matanza de judíos. Estos juicios recibían una gran publicidad por todos los medios posibles, por lo que parece probable la tesis de que Stalin deseaba una propaganda que lavara su imagen dentro y fuera de la URSS.
En los EUA las gestiones de Stimson dieron pie a un influyente documento que abogaba por unos juicios capaces de criminalizar no sólo a los dirigentes, sino a las organizaciones nazis como las SS o el propio NSDAP. Si la organización era declarada culpable, cualquiera de sus integrantes lo sería automáticamente. Esto al final se modificó y en los juicios llevados a cabo los miembros de una organización declarada culpable tenían su propio juicio. Hull apoyó esta propuesta y entre todos trataron de convencer a Roosevelt sin éxito. Fue Truman quien compartió estos criterios y logró convencer a los británicos. Una resolución conjunta de los tres Jefes de Estado (cuatro si contamos a Francia) llegó por fin el 3 de mayo del 45, y hasta el 8 de agosto no terminaron las negociaciones sobre los estatutos del juicio. Luego aún tuvieron que limarse diferencias, pues para los soviéticos los juicios debían ser un teatro, tal y como solían hacer desde los Procesos de Moscú. En cambio, para los aliados occidentales, el juicio debía contemplar la presunción de inocencia. También había diferencias entre la forma de entender el proceso judicial entre los estadounidenses y los británicos, reflejo del sistema judicial en cada país. Los soviéticos, desde luego, entendía menos todo esto.
Re: El Juicio de Nuremberg
Lun Abr 13, 2009 1:49 am
Miller una pregunta, sin poner en duda lo que han dicho vos y bichin, que hay con la famosa frase del tio pepito, en la conferencia de Yalta, que por mencionarla de una manera imprudente por mi parte, casi termino en patitas en la calle?
Hasta donde se, la idea de Stalin era ejecutar x cantidad de oficiales de la Wermacht y del partido nazi... Entonces Josesito tenia una doble politica?? (no seria de estrañar de ese turro puedo esperar cualquier cosa)....
Por eso mi percepcion de que a la URSS le interesaba tres cuernos el juicio. Y que para Stalin el juicio deberia hacerse onda propaganda, lo que salio es algo muy diferente, y el hecho que Speer salvara el pellejo es un reflejo de esto... a mi modo de ver.
Hasta donde se, la idea de Stalin era ejecutar x cantidad de oficiales de la Wermacht y del partido nazi... Entonces Josesito tenia una doble politica?? (no seria de estrañar de ese turro puedo esperar cualquier cosa)....
Por eso mi percepcion de que a la URSS le interesaba tres cuernos el juicio. Y que para Stalin el juicio deberia hacerse onda propaganda, lo que salio es algo muy diferente, y el hecho que Speer salvara el pellejo es un reflejo de esto... a mi modo de ver.
Re: El Juicio de Nuremberg
Lun Abr 13, 2009 12:42 pm
No creo que tuviese una doble política porque, con juicio o sin él, la resolución soviética era la misma: los nazis iban a ser ejecutados. Más bien cambió de opinión sobre cómo lograr lo mismo: venganza y publicidad. A mí me da la impresión de que la macabra broma de Stalin en Teherán fue un test. Stalin solía realizar este tipo de artimañas y tanto Churchill como Roosevelt picaron. Con la bromita, Stalin averiguó que Roosevelt era partidario de una ejecución sumaria y masiva, y Churchill no tan masiva. Como que los primeros juicios soviéticos ya se habían dado y había resultado un gran éxito publicitario, es de suponer que Stalin ya estaba convencido del método y deseaba averiguar qué pensaban sus "socios".
De hecho, Roosevelt y Churchill picaron hasta tal punto que pensaron que Stalin aprobaría la solución intermedia entre la propuesta británica y la estadounidense: juicio a responsables de talla menor y ejecución sumaria a los principales. Eso fue en el verando del 44. Para entonces estaba claro que Stalin era el héroe de la URSS y este deseaba potenciar su imagen tanto dentro como fuera de sus fronteras, pues también estaba claro que iba a ser el amo y señor de media Europa. Por ello apoyó la propuesta de Molotov de un juicio internacional, pues ya era muy consciente de que los angloamericanos no estaban por la labor. Había captado la diferencia de ideas, lo cual suponía una fisura política entre sus "aliados", y había comprobado el efecto propagandístico de los juicios, un efecto que quería para sí.
¿Qué hubiera pasado si Roosevelt no hubiese fallecido? No lo sabemos. Sólo sabemos que Roosevelt nunca apoyó la idea del juicio y siempre optó por la ejecución sumaria. De hecho la política EUA respecto a qué hacer con la Alemania derrotada podría haber sido muy diferente, pues Roosevelt aprobaba por completo las ideas de Morgenthau de acabar con su poder industrial. Fue Truman el que varió esta política hacia Alemania, y también hacia la URSS, por cierto. Ello torció los planes de Stalin. Para postre los juicios se realizarían más a la manera angloamericana que a la soviética, es decir, las pruebas eran presentadas ante el juez y los interrogatorios los realizaban fiscales y abogados. En un juicio soviético era el juez quien interrogaba a los testigos y, en base a las pruebas, decidía la sentencia. Es decir, el juez y el fiscal eran la misma persona, y al acusado sólo se le permitía hacer una declaración al final de juicio. Que los soviéticos no se enteraron del sistema angloamericano lo prueba el hecho de que el juez soviético tuviera que preguntar cuando se le presentaron los estatutos. Ello supone que los soviéticos apoyaron la propuesta sin saber realmente cómo iba a ser el juicio, y de hecho la cosa no fue como ellos esperaban y de ahí sus posteriores protestas pues se sintieron, y con razón, engañados. Al final no fueron ellos los que se llevaron el beneficio propagandístico, y ni tan siquiera lograron que se ejecutaran a todos los encausados. Para postre, Hess fue dado por loco y en este aspecto tampoco se salieron con la suya. En definitiva, les salió el tiro por la culata pues no lograron sus objetivos de propaganda para sí, desprestigio para el resto y aniquilación total del enemigo.
De hecho, Roosevelt y Churchill picaron hasta tal punto que pensaron que Stalin aprobaría la solución intermedia entre la propuesta británica y la estadounidense: juicio a responsables de talla menor y ejecución sumaria a los principales. Eso fue en el verando del 44. Para entonces estaba claro que Stalin era el héroe de la URSS y este deseaba potenciar su imagen tanto dentro como fuera de sus fronteras, pues también estaba claro que iba a ser el amo y señor de media Europa. Por ello apoyó la propuesta de Molotov de un juicio internacional, pues ya era muy consciente de que los angloamericanos no estaban por la labor. Había captado la diferencia de ideas, lo cual suponía una fisura política entre sus "aliados", y había comprobado el efecto propagandístico de los juicios, un efecto que quería para sí.
¿Qué hubiera pasado si Roosevelt no hubiese fallecido? No lo sabemos. Sólo sabemos que Roosevelt nunca apoyó la idea del juicio y siempre optó por la ejecución sumaria. De hecho la política EUA respecto a qué hacer con la Alemania derrotada podría haber sido muy diferente, pues Roosevelt aprobaba por completo las ideas de Morgenthau de acabar con su poder industrial. Fue Truman el que varió esta política hacia Alemania, y también hacia la URSS, por cierto. Ello torció los planes de Stalin. Para postre los juicios se realizarían más a la manera angloamericana que a la soviética, es decir, las pruebas eran presentadas ante el juez y los interrogatorios los realizaban fiscales y abogados. En un juicio soviético era el juez quien interrogaba a los testigos y, en base a las pruebas, decidía la sentencia. Es decir, el juez y el fiscal eran la misma persona, y al acusado sólo se le permitía hacer una declaración al final de juicio. Que los soviéticos no se enteraron del sistema angloamericano lo prueba el hecho de que el juez soviético tuviera que preguntar cuando se le presentaron los estatutos. Ello supone que los soviéticos apoyaron la propuesta sin saber realmente cómo iba a ser el juicio, y de hecho la cosa no fue como ellos esperaban y de ahí sus posteriores protestas pues se sintieron, y con razón, engañados. Al final no fueron ellos los que se llevaron el beneficio propagandístico, y ni tan siquiera lograron que se ejecutaran a todos los encausados. Para postre, Hess fue dado por loco y en este aspecto tampoco se salieron con la suya. En definitiva, les salió el tiro por la culata pues no lograron sus objetivos de propaganda para sí, desprestigio para el resto y aniquilación total del enemigo.
Re: El Juicio de Nuremberg
Mar Abr 14, 2009 3:50 pm
Hummm, interesante Bichin, y tu Upham? Estas mas o menos de acuerdo? Me gustaria saber tu position, porque es muy interesante lo que dice Bitxo y ademas porque nos ayuda a comprender un poco mas el estofado de Nuremberg con sus imperfecciones y todo eso.
Re: El Juicio de Nuremberg
Mié Abr 15, 2009 6:17 pm
Simon, perdona que no te responda antes, pero ando bastante liado y la cuestión merece ser tratada como es debido. Esta noche te suelto el ladrillo. 
Saludos.
Saludos.
Re: El Juicio de Nuremberg
Mié Abr 22, 2009 12:19 am
Juicio a los Principales Criminales de Guerra Alemanes
En Nuremberg, Alemania
Del 3 al 14 de diciembre de 1945
Version en español de los documentos del juicio.
http://www.nizkor.org/hweb/imt/tgmwc/tg ... 4-sp.shtml
(es incompleta pero suficiente).
Saludos
En Nuremberg, Alemania
Del 3 al 14 de diciembre de 1945
Version en español de los documentos del juicio.
http://www.nizkor.org/hweb/imt/tgmwc/tg ... 4-sp.shtml
(es incompleta pero suficiente).
Saludos
Re: El Juicio de Nuremberg
Mié Abr 22, 2009 1:11 am
A ver si los Sres. de Nizkor nos obsequian con la traducción al español de todas las actas del Juicio. Están disponibles, en inglés:
http://www.nizkor.org/hweb/imt/tgmwc/
http://www.nizkor.org/hweb/imt/tgmwc/
Re: El Juicio de Nuremberg
Sab Abr 25, 2009 12:12 am
Caaaaapiiii.... aun espero jaja...
Una pregunta, sera por eso que lo dejaron a Hess preso hasta que lo suicidaron??? jejeje
Una pregunta, sera por eso que lo dejaron a Hess preso hasta que lo suicidaron??? jejeje
Re: El Juicio de Nuremberg
Sab Abr 25, 2009 5:55 am
Dije "esta noche", pero no dije de que día.
No, ahora en serio, mea culpa, tienes toda la razón.
Saludos.
No, ahora en serio, mea culpa, tienes toda la razón.
Saludos.
Re: El Juicio de Nuremberg
Dom Sep 20, 2009 10:21 am
Re: El Juicio de Nuremberg
Sab Ene 15, 2011 4:13 am
Que hubieran hecho los Alemanes con los lideres enemigos si hubieran ganado, creen que habria habido algun juicio?
yo creo que no se hubieran molestado, simplemente habrian desaparecido y nadie se hubiese atrevido a preguntar que les paso....
Saludos
yo creo que no se hubieran molestado, simplemente habrian desaparecido y nadie se hubiese atrevido a preguntar que les paso....
Saludos
Re: El Juicio de Nuremberg
Sab Ene 15, 2011 11:38 am
Sabiendo lo que hicieron con los "rebeldes" de las SA, con algunos opositores políticos y con los miembros de la resistencia, uno se imagina con bastante facilidad lo que hubieran hecho los nazis con los líderes enemigos.