Schweinfurt. Las Misiones 84 y 115, el Jueves Negro.Continua...La Misión 115. El Jueves NegroEse era el espíritu en las bases de la 8ª F.A. cuando las tripulaciones se despertaron antes del amanecer del 14 de Octubre de 1943. Cuando se les comunicó que el blanco de aquel día era Schweinfurt, los que aún estaban adormilados se despertaron de inmediato. Se habían estado oyendo rumores constantemente sobre una posible repetición de la Misión 84, y ahora estaba claro que los rumores estaban fundados. La fuerza atacante estaría formada por la 1ª y 3ª Divisiones de Bombardeo.
Mapa de ruta de la Misión 115.La 1ª Div., identificada por un triángulo blanco en la deriva de sus B17, estaba compuesta por los siguientes Grupos:
91ú Grupo de Bombardeo, con base en Bassingsbourne; 92ú Grupo de Bombardeo, con base en Alconbury; 303ú Grupo de Bombardeo, con base en Molesworth; 305ú Grupo de Bombardeo, con base en Chelveston; 306ú Grupo de Bombardeo, con base en Thurleigh; 351ú Grupo de Bombardeo, con base en Polebrook; 379ú Grupo de Bombardeo, con base en Kimbolton; 381ú Grupo de Bombardeo, con base en Ridgwell; y el 384ú Grupo de Bombardeo con base en Grafton-Underwood.
El Vicious Virgin, 303ú Grupo de Bombardeo, 427 Escuadrón, de la 1ú División.
La 3ª División de Bombardeo, identificada por un cuadrado blanco estaba compuesta por:
94ú Grupo de bombardeo, con base en Bury-St. Edmonds; 95ú Grupo de Bombardeo, con base en Horsham St. Faith; 96ú Grupo de Bombardeo, con base en Grafton-Underwood; 100ú Grupo de Bombardeo, con base en Thorpe Abbotts; 385ú Grupo de Bombardeo, con base en Great Ashfield; 388ú Grupo de Bombardeo, con base en Knettisham; y el 390ú Grupo de Bombardeo con base en Framlingham. Otros dos grupos equipados con B24, el 93ú y el 392ú, volarían una ruta más al sur que los B17, para encontrarse con ellos en las cercanías del blanco.
Un B17 perteneciente al 100 Grupo de Bombardeo, 418 Escuadrón, 3ª División.Poco antes de las 10 de la mañana, la calma de la típica campiña inglesa se rompió con el estruendo de los casi 1.400 motores de los bombarderos. El coronel "Budd" J. Peaslee, comandante de la Misión 115, volaba hacia Schweinfurt como copiloto del capitán James K. MacLaughlin, del 92ú Grupo de Bombardeo. A las 10:15 pudo ver la bengala de señales que indicaba que la misión se ponía en marcha. La densa niebla sobre Anglia Oriental, que limitaba la visibilidad a menos de 500m, había puesto en duda el arranque de la misión, pero la confirmación de buen tiempo y visibilidad sobre el continente pusieron fin a esa posibilidad.
Edgar Snyder (izda.), comandante del 303 Grupo de Bombardeo en la Misión 115.El despegue se realizó casi sin incidentes, aunque el plan de reunión previsto no llegó a ser tan perfecto como fue planeado. El 305ú Grupo de Bombardeo no fue capaz de enlazar con el resto de su Ala de Combate, la 40ú, y se vio forzado a unirse a la 1ª Ala de Combate. Por su parte, la 40ª Ala de Combate, ahora compuesta sólo por los Grupos de Bombardeo 92ú y 306ú, se unió a la 41ª Ala de Combate. Debido a la densa niebla, sólo 29 de los 60 Liberators asignados a la misión lograron despegar, y ocho de ellos no puedieron alcanzar la formación y volvieron a la base. Los restantes 21 bombarderos pusieron rumbo a Emden para realizar un ataque de diversión. De todos los B17 de la fuerza principal, 26 tuvieron que abandonar en ruta por diversas razones. En resumen, de los 351 aviones que debían participar en el ataque, 86 no estaban disponibles cuando se alcanzó la frontera alemana.
Formación de B17s de la 1ª División.La meteorología también causó problemas a los escoltas. Los Grupos de Caza 353ú y 56ú, formados por P47, consiguieron unirse a la formación de bombarderos, informando del derribo de 13 cazas. Por el contario, el 4ú Grupo de Caza no pudo localizar a los B17 y tuvo que regresar a la base. El 352ú Grupo de Caza enlazó con la fuerza de B24 y les dio escolta durante su ataque a Emden, pero el Grupo de Caza 55ú, compuesto por P38, no pudo estar operativo a tiempo para unirse a la misión.
La Luftwaffe, aparentemente conocía las limitaciones de radio de acción de los P47, y la mayoría de los cazas alemanes retrasaron su salida hasta asegurarse de que la escolta había abandonado a la fuerza principal de bombarderos. Rápidamente, la caza enemiga comenzó a reunirse en torno a las formaciones de B17, y los interfonos de los aviones empezaron a llenarse de avisos de alarma de "bandidos", primero a las 12 en punto arriba, y después en todas las direcciones posibles. Intentando controlar los nervios de sus tripulaciones, los capitanes de cada bombardero insistían en mantener silencio en lo posible y en no malgastar munición, disparando sólo cuando los cazas enemigos estuvieran a distancia de alcance. Según el jefe de la misión, el coronel Peaslee, comentó a Martin Caidin, autor del libro Black Thursday,
"los cazas irrumpieron entre nuestras formaciones a toda velocidad, hasta seis grupos de Me109 nos atacaron simultáneamente… podía verlos justo a mi lado… dejando finas estelas de humo tras ellos al dispararnos ráfagas cortas y precisas. Era un ataque coordinado, perfectamente preciso y con una técnica magistral".Un B17 del 100 Grupo de Bombardeo a punto de ser atacado por un caza alemán.Aunque todavía se encontraban lejos del blanco, se empezaron a producir las primeras bajas. En total, 37 B17 fueron derribados o tuvieron que abandonar la formación con graves daños. Los restantes 228 aparatos continuaron rumbo a Schweinfurt, quedando reducida la fuerza original a aproximadamente dos tercios de lo previsto.
El B17 bautizado como
Brennan’s Circus, perteneciente al 94ú Grupo de Bombardeo, fue un ejemplo típico del grado de heroísmo que se convirtió en rutinario durante aquel día. A diez minutos de distancia del blanco, el
Circus perdió un motor, y comenzó a rezagarse de la formación principal al no poder desprenderse de sus bombas. Para escapar de los cazas, su piloto, Joseph Brennan, realizó un picado, mientras que la tripulación conseguía lanzar las bombas, pero otro de los motores se averió y tuvo que ser detenido. Sobrevolando Holanda y Bélgica, ya de vuelta, un tercer motor fue alcanzado por el fuego antiaéreo. El
Circus pudo a duras penas continuar su rumbo sobre el Mar del Norte, ahora con un único motor, hasta caer al mar a unas pocas millas de la costa de Inglaterra. En el transcurso de la misión, su tripulación había derribado cuatro cazas alemanes y averiado a un quinto.
El 306 Grupo de Bombardeo volando entre la flak sobre Schweinfurt.Mientras tanto, de vuelta a la formación en vuelo hacia el blanco, los ataques de los cazas alemanes se volvieron menos intensos, debido a que sus pilotos fijaron la atención sobre los grupos aislados de la formación principal. Fue la única pausa para la mayoría de las tripulaciones de los B17 en las más de tres horas de constantes combates que tuvieron que mantener, tanto en el vuelo de ida como en el de vuelta. En el viaje de regreso los ataques fueron menos precisos, ya que muchos de los pilotos de la Luftwaffe tuvieron que aterrizar para repostar y rearmar separados de sus escuadrillas, y al retomar el vuelo lo hicieron uniéndose a otros grupos, con lo que su estrategia de caza perdió parte de la precisión y coordinación de los primeros ataques.
Un Me110 atacando a B17s del 91 Grupo de Bombardeo.
Se ha estimado que más de 300 cazas alemanes participaron aquel día en los combates. La mayoría eran los ya conocidos Me109 y Fw190, pero la Luftwaffe también utilizó en gran número cazas nocturnos Ju88 y Me110. Otros aviones, cuya presencia fue reportada por las tripulaciones norteamericanas, fueron bombarderos Ju87 Stuka y Do17, que lanzaban sus bombas en paracaídas para estallar, por medio de espoletas de altitud, entre las formaciones de bombarderos, cazas bimotores Me210, aviones de reconocimiento táctico Fw189 y experimentales que prácticamente no habían sido puestos en servicio durante la guerra, como el He100. En palabras de Walter Peters, navegante en el B17 apodado
Yank,
"lo único que no nos arrojaron encima aquel día fueron las propias fábricas de aviones".La tripulación del Yank. Peters es el primero por la derecha de la fila inferior."Los cazas atacaban sin pausa, aquello era sencillamente una matanza…", recuerda Carl Abele, navegante en un B17 perteneciente al 544ú Escuadrón del 384ú Grupo de Bombardeo, bautizado con el nombre de
Blackjack. Era la cuarta misión para ellos, y el nombre aún no había sido pintado en el fuselaje del avión.
"Tal y como fueron las cosas, aquel nombre estaba destinado a no ser pintado", recuerda Abele.
"Perdimos uno de los motores por fuego antiaéreo y otro más en el ataque de un caza, y más tarde un tercero comenzó a fallar. El piloto logró nivelar el avión mientras saltábamos en paracaídas, y cuando todos estábamos fuera él fue el último en saltar. No recuerdo haber visto como se habría mi paracaídas, lo siguiente de lo que fui consciente era que estaba tumbado en la parte de atrás de un camión de las SS, camino a un campo de prisioneros". Soldados alemanes inspeccionan un B17 derribado.Los artilleros de los B17 lucharon sin descanso aquel día, y llegaron a reclamar un total de 187 cazas enemigos derribados. Sin embargo, los documentos analizados después de la guerra , mostraron unas bajas reconocidas por la Luftwaffe de aproximadamente 40 aviones. Resulta evidente que los derribos reportados por los artilleros son exagerados, pero por otra parte normales, ya que combatiendo en una formación, varios artilleros podían disparar sobre un mismo avión, y producirse por tanto varios informes de derribo respecto de un mismo enemigo. Los ataques de los cazas continuaron durante el vuelo de regreso, agravándose la situación ante la imposibilidad de contar con caza de escolta por culpa del mal tiempo. Incluso, unos pocos cazas alemanes persiguieron a los bombarderos hasta casi la misma costa de Inglaterra.
Un Fw190 A4-R6 armado con cohetes, un arma letal contra formaciones cerradas de bombarderos.Tan pronto como el ruido de los motores de los bombarderos que regresaban comenzó a oirse en el cielo de sus bases, resultó evidente que el resultado del ataque había sido desastroso. Con los aviones ya en tierra, el recuento de bajas dio 60 bombarderos derribados sobre Europa, cinco más perdidos cerca de Inglaterra y 17 dañados sin posibilidad de reparación. Un total de 122 bombarderos recibieron daños de distinta consideración que precisaron de reparaciones antes de volver a volar. Del total de 2.900 miembros de las tripulaciones, 650 hombres no regresaron, aunque 65 de ellos sobrevivieron como prisioneros de guerra, y 590 fueron dados como desaparecidos en combate. Sólo 33 bombarderos consiguieron aterrizar en sus bases sin haber sufrido ningún daño. Aunque otras misiones sobre otros blancos produjeron iguales o mayores pérdidas, el 26% que daba como resultado las producidas el Jueves Negro significa que aquella fue la peor misión de toda la guerra para la 8ª Fuerza Aérea.
Egon Mayer (izda.), As de la Luftwaffe, contempla los restos de un B17 derribado por él mismo.El factor aleatorio que interviene en la posibilidad de morir, resultar herido o ser capturado, nunca fue más evidente que en esta misión. Mientras que algunos grupos fueron prácticamente aniquilados, otros no tuvieron una sola baja. El 305ú Grupo de Bombardeo perdió 13 de sus 15 B17, y el 306ú tuvo 12 bajas; mientras que los otros tres grupos de la 1ª División (92ú, 379ú y 384ú) perdieron seis aviones cada uno. La 3ª División tuvo mejor suerte, perdiendo sólo 15 bombarderos entre siete de sus grupos, y sólo uno cada uno de los otros tres, sumando un total de 18 aviones derribados.
De haber continuado aquella campaña en intervalos de dos meses durante un periodo de seis, la industria alemana de producción de rodamientos habría sido destruida por completo. Pero si esta afirmación hubiera sido hecha por el mismísimo Speer directamente al Mando de Bombardeo Aliado, el resultado habría sido el mismo, ya que la 8ª FA no disponía de recursos suficientes para mantener aquel esfuerzo. Sin escolta de caza que ayudara a minimizar las pérdidas, la 8ª FA habría desaparecido, y ningún resultado previsto, por excelente que fuera, lo habría justificado. La solución estaría disponible en breve, el P51, que comenzaría a llegar a Inglaterra en Diciembre.
Schweinfurt bombardeada (arriba) y la destrucción de la fábrica VKF Verk 2 (abajo)A la vista de los resultados del Jueves Negro, podría parecer que la doctrina británica de bombardeo nocturno de zona era la correcta, y que la norteamericana de bombardeo diurno de precisión resultaba errónea en la práctica, pero debido a diversas razones no era este el caso. Los bombarderos pesados americanos eran capaces de soportar más daño que otros, y por ello los alemanes se vieron en la obligación de añadir armamento pesado (cañones y cohetes) a sus cazas, para así aumentar su potencia de fuego y lograr derribar o dañar a los bombarderos desde una distancia prudente, sin exponerse a ser ellos los cazados por la cortina de fuego defensivo de las formaciones de bombarderos. Este aumento en capacidad ofensiva de la caza alemana llevo aparejado un peso más elevado y una reducción en la maniobrabilidad y velocidad, haciéndola más vulnerable a los cazas de escolta de largo alcance y ampliando las posibilidades de supervivencia de los bombarderos.
A veces se tenía que recurrir a remedios de bricolage para mejorar la protección. Un montaje doble del 0,50 en la proa del Flak Wolf.Según escribió Cajus Bekker en su libro Luftwaffe War Diaries,
"sin su propia escolta de caza, los bombarderos no eran rival para los cazas enemigos… aunque el efecto de sus propias armas, multiplicado por el fuego concentrado de la formación cerrada proporcionara una barrera de cierta efectividad". El bombardeo de área efectuado por la RAF, aunque destructivo, tenía un efecto poco apreciable sobre la industria alemana de armamento, como el propio Speer y otros han remarcado repetidamente. Tampoco afectó a la moral de la población civil, al igual que anteriormente en los raids de la Luftwaffe sobre Inglaterra y como sucedería con los bombardeos incendiarios sobre Japón.
"No fue el bombardeo de área lo que acabó minando la supervivencia de Alemania", escribió Bekker.
"Esto se logró gracias al bombardeo selectivo y de precisión realizado por la 8ª FA. La selección cuidadosa de los blancos… fue lo que llevó al colapso de la industria alemana."Otra imagen de la destrucción de los complejos industriales de Schweinfurt.Por otra parte, tampoco la ofensiva de bombardeo nocturno de la RAF fue inmune a los efectos de las defensas alemanas. En la noche del 19 al 20 de Febrero de 1944, en misión sobre Leipzig, la RAF perdió 78 bombarderos. Otros 72 se perdieron el 24 de Marzo sobre Berlín y 94 el 30 de Marzo sobre Nuremberg. Estas pérdidas catastróficas llevaron a la suspensión temporal de la ofensiva nocturna de la RAF.
El mismo ritual de costumbre en decenas de aeródromos. En Molesworth, de regreso, entero, cerveza, chicas y un recuerdo para los compañeros que no volarán. La vida sigue, al menos hoy.Fue a partir de principios de 1944, con la llegada de cazas de escolta de largo alcance aparejada a la mejora del armamento defensivo de los B17 y B24, cuando la ofensiva de bombardeo de la 8ª FA sobre Alemania comenzaría a cobrarse sus frutos. No sólo significó la reducción y el colapso final de la capacidad industrial del III Reich, sino que también impuso una sangría constante a los efectivos de la Luftwaffe, tanto en pilotos como en material, en un grado difícil sino imposible de reemplazar. El 14 de Octubre de 1944, en el marco de la Operación Hurricane, conjunta USAAF/RAF, la 8ª FA desplegó 1.251 bombarderos sobre blancos en Sarrebruck, Kaiserslautern y Colonia, contando con una escolta de 749 cazas. Aquel día las pérdidas fueron de seis bombarderos y un caza, mucho había cambiado en sólo un año. Alemania, que había iniciado la guerra sirviéndose de la calidad y eficacia de su arma aérea, terminaría viendo como la destrucción de lo que en palabras de Hitler sería "el Reich de los Mil Años" también llegaría desde el cielo.
Saludos.
Fuentes para texto e ilustraciones:
http://www.wikipedia.org
http://www.historynet.com
http://www.stelzriede.com/warstory.htm
/images.google.com/hosted/life
http://www.thirdreichruins.com
http://www.303rdbg.com
http://www.archives.gov
USAAF Heavy Bomb Groups. Aircam Aviation.
303rd Bombardment Group. Osprey Publishing.
B17 in Action. Squadron Signal Publ.
On Camera. MBI Publishing.
The Luftwaffe Illustrated History. Motorbooks.
Armagedón. Max Hastings. Ed. Crítica.