Directiva 51
El 3 de noviembre de 1943, Hitler mandó distribuir un documento a sus principales generales, la Directiva 51, que exponía su firme convicción de que los aliados invadirían Francia al año siguiente y explicaba cómo derrotarlos.
3 de Noviembre de 1943.
Directiva Nú51: Cuartel General del Führer
Durante los últimos dos años y medios la amarga y costosa lucha contra el bolchevismo ha obligado a exigir demandas extremas sobre nuestros recursos militares. Esa comisión estaba en armonía con la seriedad del peligro, y la situación en general, situación que ha cambiado. Las amenazas remanentes en el Este son mínimas, pero un peligro incluso mayor asoma por el Oeste: ¡la invasión Anglo-Americana! En el Este, la inmensidad del territorio, permitirá como último recurso, una pérdida de territorio incluso en una escala importante, sin que la supervivencia alemana sufra un golpe mortal.
No ocurre lo mismo en el Oeste. Si el enemigo tiene éxito penetrando nuestras defensas en un amplio frente, ocurrirá una escalada de consecuencias impredecibles a muy corto plazo. Todo indica que ocurrirá una ofensiva contra el frente occidental europeo, no más tarde que en la primavera y tal vez antes.
Por esa razón, no puedo aceptar por más tiempo, el debilitamiento progresivo del Oeste en favor de otros frentes de guerra. Por lo tanto, he decidido consolidar las defensas en el Oeste, particularmente en los lugares desde los cuales desataremos nuestra guerra de largo alcance contra Inglaterra. Esos serán los puntos donde el enemigo atacará y es donde -a menos que las señales que recibimos sean engañosas- se lucharán las batallas decisivas.
Debemos esperar ataques sostenidos y ataques de diversión en otros frentes. Tampoco se puede excluir la posibilidad de una ofensiva contra Dinamarca. Eso plantearía mayores problemas navales y podría ser apoyada con menos con eficacia desde el aire, pero sin embargo, produciría un impacto político y estratégico muy grande si tuviera éxito.
Durante la fase de la inicio de la batalla, el poder de golpear, será dirigido por el enemigo contra nuestras fuerzas que defienden las costas. Solamente un esfuerzo extraordinario en la construcción de fortalezas, un esfuerzo sin igual que utilice toda la mano de obra disponible y recursos materiales de Alemania y de las áreas ocupadas, podrá consolidar nuestras defensas a lo largo de las costas, dentro del corto tiempo que todavía parece ser que tenemos.
Armas estacionarias (armamento antitanque pesado, tanques enterrados como artillería, cañones costeros, minas, etc.) llevadas rápidamente a Dinamarca y el Oeste ocupado, deberán concentrarse en los puntos defensivos más vulnerables de la costa. Al mismo tiempo debemos tomar el riesgo calculado de que por el momento no podremos mejorar nuestras defensas en lugares menos amenazados.
Sin embargo, si el enemigo forzara el desembarco concentrando de su ejército, deberá ser golpeado con toda la furia de un contraataque contundente. Para esa misión, se deberá contar con las amplias reservas móviles de hombres y material que tenemos, las que se transformarán con entrenamiento intensivo en unidades de primera clase. El contraataque de esas unidades, evitará el ensanchamiento de la cabeza de playa y echarán al enemigo al mar.
Adicionalmente, se tomarán medidas de emergencia bien planificadas, preparadas hasta el más mínimo detalles, que nos permitirán lanzar contra el enemigo, cada hombre y su equipo, desde los sectores costeros no atacados y desde la retaguardia.
Los fuertes ataques por mar y aire deberán ser enfrentados implacablemente por la Luftwaffe y la Kriegsmarine con todos los recursos disponibles.
Por tanto, ordeno lo siguiente:
Herees
1) El Jefe del Estado Mayor General del Ejército y el Inspector General de las Tropas Panzer, me enviarán tan pronto como sea posible un plan que contemple armamento, tanques, cañones de asalto, vehículos motorizados, y municiones que serán destinados a al Frente del Oeste y Dinamarca en el transcurso de los próximos tres meses. Ese plan se adecuará a la nueva situación. Las siguientes consideraciones serán las básicas
a) Para diciembre de 1943, se deberá contar con suficiente movilidad para todas las divisiones Panzer y de Granaderos Panzer en el Oeste con los equipos correspondientes para esas unidades, así como un gran número de armas antitanque.
Se reorganizarán de manera acelerada, veinte divisiones de campo de la Luftwaffe, en una efectiva fuerza de reservas móviles, que deberán estar listas para fines de 1943. Esta reorganización deberá incluir unidades con cañones de asalto.
Acelerar la disponibilidad de todas las armas ordenadas para la División de Granaderos Panzer Hitlerjugend, la 21 División Panzer y las reservas de infantería estacionadas en Jutlandia.
b) Entregas adicionales de tanques Mark IV, cañones de asalto y antitanques pesados para las divisiones Panzer de reserva en el Oeste y en Dinamarca así como para el Batallón de Entrenamiento de Cañones de Asalto en Dinamarca.
c) Además de los requeridos para las nuevas unidades del frente del Oeste y de Dinamarca, entre noviembre y diciembre, se harán entrega de lotes mensuales de 100 cañones pesados antitanque, modelos 40 y 43. La mitad de ellos deberán ser móviles.
d) Para las unidades de defensa costera en el Oeste y Dinamarca, se suministrarán lotes de armas, incluyendo aproximadamente mil ametralladoras, para incrementar el armamento de las divisiones estáticas encargadas de la defensa costera en el Oeste y Dinamarca y para la estandarización del equipo de las unidades que serán sustraídas de los sectores que no estén bajo ataque.
e) En los sectores más vulnerables se suministrarán cantidades suficientes de armas antitanque para combate de corto alcance.
f) Se mejorará las defensas de artillería y antitanque de las unidades estacionadas en Dinamarca, así como de aquellas comprometidas en la protección costera en el Oeste ocupado. Se fortalecerá la artillería en los cuarteles generales.
2) Las unidades estacionadas en el Oeste o en Dinamarca, así como los Panzers, cañones de asalto y unidades antitanque a ser activadas en el Oeste, no deberán ser transferidas a otros frentes sin mi permiso. El Jefe del Estado Mayor General del Ejército, o el Inspector General de las Tropas Panzer me informarán por intermedio del Comando Supremos de las Fuerzas Armadas apenas se haya hecho entrega del armamento a los batallones Panzer y a los batallones de cañones de asalto, así como a los batallones y compañías antitanque.
3) Más allá de las medidas similares que se hayan tomado en el pasado, el Comandante en Jefe del Oeste establecerá cronogramas para realizar maniobras y ejercicios para movilizar las fuerzas que no se encuentren bajo ataque, hacia sectores que estén combatiendo. Esas unidades deberán ser capaces de de realizar misiones ofensivas, aunque limitadas. En relación con eso, demando que los sectores no amenazados por el enemigo, cedan el grueso de sus fuerzas, excepto pequeños destacamentos de vigilancia, para asistir a los sectores amenazados sin titubear. Los sectores que cedan sus fuerzas deberán destinar destacamentos de guardia y seguridad. Fuerzas de trabajadores, tomados de la población nativa deben ser organizadas en esos sectores, para mantener transitables los caminos destruidos por la aviación enemiga.
4) El Comandante de las Fuerzas Alemanas en Dinamarca tomará las medidas necesarias en la zona bajo su control, de acuerdo al párrafo 3 de arriba.
5) De acuerdo con órdenes separadas, el Jefe de Equipos del Ejército y el Comandante de Reemplazos del Ejército, formará Brigadas con fuerza de Regimiento, usando batallones de seguridad y batallones de ingenieros, de los cuadros de entrenamiento, reclutas, instructores y unidades convalecientes en la retaguardia. Esas tropas deberán estar listas para ser movilizadas en 48 horas.
Además, todo personal disponible será organizado en batallones de reemplazo y equipados con el armamento disponible, para poder reemplazar las grandes bajas que se presagian.
Luftwaffe
La efectividad ofensiva y defensiva de las unidades de la Luftwaffe en el Oeste y en Dinamarca será aumentada en concordancia con la situación cambiante. En ese sentido, se harán los preparativos para poner a disposición, las unidades necesarias para satisfacer los esfuerzos contra-invasión, esto es, todas las unidades aéreas, de artillería antiaérea que puedan disponerse de la retaguardia y de las escuelas y unidades de entrenamiento en el territorio nacional. Todas esas unidades serán destinadas al Oeste y posiblemente a Dinamarca.
Las unidades terrestres de la Luftwaffe en el sur de Noruega, Dinamarca, noroeste de Alemania y en el oeste, serán expandidas y reequipadas para poder desplazarse e impedir la acción de los bombarderos enemigos y desbaratar el esfuerzo ofensivo si realizaran operaciones a gran escala. En relación con esto, es de particular importancia nuestra Fuerzas de Caza. Las posibilidades para cumplir su cometido serán reforzadas con el establecimiento de numerosos campos aéreos avanzados. Se dará especial énfasis en el adecuado camuflaje. Espero también que la Luftwaffe de manera desinteresada suministre todas las fuerzas prescindibles en las zonas no amenazadas.
Kriegsmarine
La Kriegsmarine preparará las fuerzas más poderosas posibles para atacar a las flotas enemigas de desembarco. Las instalaciones de defensa costera en proceso de construcción, serán completadas a máxima velocidad. Deberá estudiarse la posibilidad de emplazar baterías costeras adicionales y de sembrar nuevos campos de minas.
Todo el personal de escuelas, entrenamiento y otro personal de tierra, apto para combate terrestre, deberá prepararse para ese efecto, de manera que sin retraso alguno, pueda ser empleado como fuerzas de seguridad en las zonas de desembarco enemigas.
Mientras se prepara el reforzamiento de las defensas en el Oeste, la Kriegsmarine deberá tener en cuenta que podrá ser llamada para repeler desembarcos simultáneos en el Oeste y Dinamarca. En ese sentido, doy particular importancia al aprestamiento de numerosos submarinos en el Mar del Norte. Debe arriesgarse un debilitamiento temporal de las fuerzas U-Boot en el Atlántico.
SS
El Reichsführer-SS deberá determinar que fuerzas Waffen-SS y de policía pueden ponerse a disposición para el combate, seguridad y servicios de vigilancia. Deberá preparase a organizar fuerzas de combate y fuerzas de seguridad a partir de unidades de entrenamiento, reemplazo y convalecientes, así como de escuelas y otros establecimientos en el territorio nacional.
Los comandantes en jefe de los servicios, el Reichsführer-SS, el Jefe del Cuartel General del Ejército, el Inspector General de las Tropas Panzer, así como el Comandante de las Fuerzas Alemanas en Dinamarca me informarán a más tardar el 15 de noviembre de las medidas tomadas o planeadas.
Espero que todos los departamentos hagan un esfuerzo supremo para aprovechar todo el tiempo que queda en prepararse para la batalla decisiva en el Oeste.
Todas las autoridades evitarán perder tiempo y energía en querellas jurisdiccionales y dirigirán todo sus esfuerzos hacia el fortalecimiento de nuestro poder defensivo y ofensivo.
Firmado:
Adolf Hitler
Durante años,Hitler, se había fiado de una especie de intuición para tomar sus decisiones estratégicas más importantes y ya sea por la casualidad sus instintos habían acertado, los aliados habían tratado antes de hacerle creer que la invasión de Franca era inminente, pero Hitler siempre había sido capaz de percibir el engaño. esta vez no solo sabía que la invasión era inminente, sino que creía saber donde tendría lugar, el Paso de Calais.
El Paso de Calais poseía varios puertos importantes y los aliados necesitarían uno para desembarcar sus tropas. La región era el lugar donde Hitler planeaba colocar las V-1 y V-2 y que pronto estarían operativas.Los ingleses poseían esta información y eso les proporcionaba una razón para invadir Francia por el Paso de Calais antes de que Hitler iniciara su campaña de lanzamiento de misiles contra Gran Bretaña.
En la Directiva, se advertía de que esperaran una gran campaña de engaño para encubrir el momento y lugar de la invasión.Los alemanes tenían que descubrir estos engaños y repeler el desembarco, y a pesar de los recientes contratiempos del esfuerzo bélico alemán, Hitler rebosaba de optimismo.Unos años antes había encargado la construcción del Muro del Atlántico, línea de fortificaciones a lo largo de la costa de Francia a Noruega, contaba con más de diez millones de soldados a su disposición, un millón en Francia.La industria bélica alemana producía cada vez más armas y mejores, controlaba la mayor parte de Europa, lo que le proporciona enormes recursos y opciones de movilización de sus ejércitos.
Para invadir Francia, los aliados necesitarían una armada numerosa, que una vez reunida sería imposible de ocultar.Hitler había infiltrado agentes en todos los niveles de las fuerzas armadas británicas, lo que le facilitaría el momento y lugar de la invasión.Los aliados no le sorprenderían.Una vez derrotados en las playas, Inglaterra tendría que buscar la paz,Roosvelt perdería las elecciones que estaban a punto de celebrarse y entonces podría concentrar todo su esfuerzo bélico completo contra la Unión Soviética y derrotarla por fin.La invasión de Francia era la oportunidad que esperaba para dar un vuelco a la guerra.
Continuará...