Os traigo la tercera parte de mi viaje a Bastogne. Se tráta de una espectacular exposición en un centro cultural ya casi en las afueras del pueblo. El título de la exposición era "Yo tenía 20 años en Bastogne en 1945"
Sin duda fue una agradable sorpresa encontrarme con está magnífica muestra. Una recopilación de enseres personales, de objetos cotidianos y de las propias historias de las gentes que vivieron una de las etapas más duras de la historia; ahí las tenía; delante de mi. Todo un lujo el poder haberlas disfrutado. Además de este tipo de objetos, me encontré también con un buen número de piezas de excavación que muestran lo duro de los combates a lo largo de la guerra; armas, cascos, cuchillas y cremas de afeitar, uniformes, palas...
Una exposición de los más emotiva, muy bien organizada, que contaba con un espacio de 2 plantas y con unas 10 salas (inclusive una reproducción de un cementerio militar, con tumbas de alemanes y norteamericanos) que contaba con una amplísima gama de objetos que hicieron mis delicias. Varias de estas salas, cuentan con recreaciones excepcionales de las dependencias alemanas en Bastogne, como por ejemplo una sala de mapas u otra de transmisiones, así como dependencias de las cásas de los habitantes, que nos dan una idea muy clara de lo duro que tuvo que ser para ellos aquellos días de Diciembre-Enero, cuando la artillería alemana martilleaba el pueblo continuamente.
Cuando anteriormente me he referido a que tuve suerte al poder verla, lo digo porque esta exposición es muy diferente de lo que se puede ver en cualquier museo relacionado con la SGM, ya que cuenta los elementos proceden de colecciones personales y que forman parte de la herencia trasnmitida por varias generaciones de los habitantes de Bastogne. Va más allá de la simple exposición de unos objetos.
Os voy a dejar pués, con una buena cantidad de fotografías de la exposición que a buen seguro os encantarán a todos. Disfrutarlas porque vale la pena.
Un saludo.