Publicado: Mié Ene 02, 2008 3:40 am
Que va, no me he mosqueado en absoluto, y menos por algo que sólo es cuestión de gustos. 
Sin embargo, y con independencia de las preferencias personales, creo que en Salvar al Soldado Ryan se dan varios aspectos que son los que diferencian a una gran película de una película más. En primer lugar los actores, perfectos cada uno en su papel y absolutamente creibles y sin caer en estereotipos. Desde el punto de vista de la imagen, tanto la cámara como la fotografía y el montaje son perfectos. Estoy intentando recordar y no caigo en ninguna otra película anterior en la que el uso de la cámara subjetiva al hombro o fija haya sido usada con tal contundencia. La dirección de fotografia ya es casi un clásico que se ha repetido en Hermanos de Sangre, Jarhead, Black Hawk Derribado y Banderas de Nuestros Padres, por ejemplo. La dirección artística y la ambientación son perfectas en un 98%, lo cual es muchiiiiiiísimo para una película ambientada en la SGM, a la vista de otras cosas perpetradas con anterioridad en las que los M48 eran Tigres II y otras lindezas similares. El audio está extremadamente cuidado, tanto como para que ya recordemos para siempre el -cling- de los peines vacios de los M1 o sepamos identificar el sonido de una MG42 a la perfección o el chirrido de las cadenas de un tanque. Y por último el director, tremendo, grandísimo, como sólo los grandes directores son capaces de trabajar para crear obras cinematográficas tan cercanas a la perfección como esta.
¿Y donde está el guión? Pues el guión está donde está, justamente en esas preferencias personales que son las imposibles de defender, ya que no existe ningún parámetro técnico que permita establecer un baremo sobre los buenos o malos guiones al depender de lo que cada uno considere como bueno o malo. Un ejemplo, salí dando palmas con las orejas cuando vi La Delgada Línea Roja, mientras que amigos que también alababan Salvar al Soldado Ryan echaban pestes de la película de Mallik. Guión y forma de contarlo, eso es todo.
Un par de cosillas. La historia contada en Tiburón por Quint (Robert Shaw) sobre el USS Indianápolis es totalmente cierta. El submarino japonés que torpedeó al crucero no se paró a recoger supervivientes, lo que habría sido inutil ya no había espacio para los al menos 800 tripulantes del Indianápolis que sobrevivieron al ataque. Después los tiburones y el retraso en el rescate hicieron el resto.
Y la otra, pues que yo no tendría reparos en no poner en esa lista a La Chaqueta Metálica, y sin embargo si estaría en ella Senderos de Gloria. Tal vez incluso por delante de Salvar al Soldado Ryan.
Saludos cinéfilos.
Sin embargo, y con independencia de las preferencias personales, creo que en Salvar al Soldado Ryan se dan varios aspectos que son los que diferencian a una gran película de una película más. En primer lugar los actores, perfectos cada uno en su papel y absolutamente creibles y sin caer en estereotipos. Desde el punto de vista de la imagen, tanto la cámara como la fotografía y el montaje son perfectos. Estoy intentando recordar y no caigo en ninguna otra película anterior en la que el uso de la cámara subjetiva al hombro o fija haya sido usada con tal contundencia. La dirección de fotografia ya es casi un clásico que se ha repetido en Hermanos de Sangre, Jarhead, Black Hawk Derribado y Banderas de Nuestros Padres, por ejemplo. La dirección artística y la ambientación son perfectas en un 98%, lo cual es muchiiiiiiísimo para una película ambientada en la SGM, a la vista de otras cosas perpetradas con anterioridad en las que los M48 eran Tigres II y otras lindezas similares. El audio está extremadamente cuidado, tanto como para que ya recordemos para siempre el -cling- de los peines vacios de los M1 o sepamos identificar el sonido de una MG42 a la perfección o el chirrido de las cadenas de un tanque. Y por último el director, tremendo, grandísimo, como sólo los grandes directores son capaces de trabajar para crear obras cinematográficas tan cercanas a la perfección como esta.
¿Y donde está el guión? Pues el guión está donde está, justamente en esas preferencias personales que son las imposibles de defender, ya que no existe ningún parámetro técnico que permita establecer un baremo sobre los buenos o malos guiones al depender de lo que cada uno considere como bueno o malo. Un ejemplo, salí dando palmas con las orejas cuando vi La Delgada Línea Roja, mientras que amigos que también alababan Salvar al Soldado Ryan echaban pestes de la película de Mallik. Guión y forma de contarlo, eso es todo.
Un par de cosillas. La historia contada en Tiburón por Quint (Robert Shaw) sobre el USS Indianápolis es totalmente cierta. El submarino japonés que torpedeó al crucero no se paró a recoger supervivientes, lo que habría sido inutil ya no había espacio para los al menos 800 tripulantes del Indianápolis que sobrevivieron al ataque. Después los tiburones y el retraso en el rescate hicieron el resto.
Y la otra, pues que yo no tendría reparos en no poner en esa lista a La Chaqueta Metálica, y sin embargo si estaría en ella Senderos de Gloria. Tal vez incluso por delante de Salvar al Soldado Ryan.
Saludos cinéfilos.