Publicado: Lun Abr 12, 2010 9:16 pm
Fuente: https://www.planetadelibros.com/libro-e ... tler/12155
Título: En el búnker con Hitler
Título original: Dans le bunker de Hitler. 23 juillet 1944 – 29 avril 1945
Autor: Bernd Freytag von Loringhoven
Editorial: Crítica
Año de edición: 2007
ISBN: 9788484328568
Páginas: 175
Precio Euros: 17,50 (Tapa Dura), en Carrefour, 6,95 Euros
Formato: 12,5 x 19 cm
Encuadernación: Rústica
Sinopsis
Bernd Freytag von Loringhoven fue uno de los últimos hombres que salieron con vida del búnker de Berlín, el día antes del suicidio de Hitler. Durante nueve meses había estado al lado del Führer, asistiendo diariamente, como ayudante de campo del general Guderian, a las conferencias en que se decidía el curso de la guerra. Más tarde, ya en el búnker, se convirtió en el oficial encargado de proporcionar información, hasta que el propio Hitler le autorizó a marchar y le deseó buena suerte. Logró pasar entre las líneas rusas, fue detenido por los británicos y, una vez en el campo de prisioneros, escribió los recuerdos de lo que había visto en unos cuadernos que, sesenta años más tarde, le han servido para escribir este libro estremecedor, que es el mejor relato de los últimos días de Hitler, vividos en una atmósfera, mientras las ratas huían del barco, los fieles se emborrachaban y Magda Goebbels llevaba a sus seis hijos para darles muerte al lado del Führer
Fuente: Contraportada del libro
Comentario Personal
Desde mi punto de vista, se trata de un libro engañoso. Engañoso porque, a primera vista, parece que no va a aportar nada nuevo con sus “escasas” 175 páginas. Acostumbrados como estamos a que la mayoría de los libros sobre la SGM suelen ser aptos, además de para el desarrollo del músculo mental, para realizar ejercicios de culturismo incluso en las ediciones de bolsillo, el librito de Loringhoven puede aparentar, en una primera impresión, que no es más que un acercamiento superficial y carente de interés hacia un tema sobre el que sufrimos una cierta saturación en los últimos tiempos: los últimos momentos de la vida de Hitler.
Pero basta abrir el libro y comenzar a leerlo para perder esa impresión. Cierto es que no aporta información novedosa, datos sorprendentes, sesudas disquisiciones ni jugosos “cotilleos” sobre la vida en el búnker. Loringhoven cuenta sus experiencias desde un “simple” punto de vista de joven soldado y oficial.
El título también contiene su dosis de engaño, si bien es perdonable, porque se trata de un título mucho más atrayente que “Memorias de un joven oficial alemán” o “Yo fui ayudante de campo de Guderian”. Porque la obra no se limita sólo a las impresiones de Loringhoven durante su estancia en el búnker de Berlín, que comienzan más o menos hacia la mitad del libro, sino que también cuenta hechos sucedidos con anterioridad.
En las primeras páginas, el autor cuenta su origen y sus primeras experiencias como oficial en Polonia, Francia y Rusia. En estas, salpicadas de pequeñas anécdotas, se nos intenta presentar el sentir del soldado medio alemán durante ese periodo, influidos por la aparente invencibilidad de la Wehrmacht y la cuasidivina capacidad de Hitler de emprender y conseguir empresas cada vez más difíciles.
La redacción simple y directa, la falta de disquisiciones y el aporte de pequeñas historias engarzadas con su propia historia facilitan la lectura del libro, que se lee de forma fácil y amena y va interesando cada vez un poco más conforme se va avanzando en la lectura. Podemos encontrar así las vivencias de Loringhoven en primera línea, su asombrosa capacidad de supervivencia (hasta tres veces se libró de caer prisionero de los rusos, una de ellas en Stalingrado), sus observaciones e impresiones acerca de los acontecimientos que rodearon a la dirección de las operaciones militares durante los dos últimos años de guerra (incluyendo los que rodearon al fallido atentado del 20 de julio de 1944 y la posterior represión), la descripción acerada y crítica de los personajes de la cúpula nazi en los últimos momentos de la guerra o las sensaciones de asfixiante opresión que rodeaban a los últimos fieles del Führer antes del Götterdämmerung.
Porque Loringhoven, en su calidad de ayudante de campo de Guderian, a la sazón Jefe del Estado Mayor del OKH a partir de Julio del 44, pudo ser testigo, un día tras otro, de las famosas reuniones estratégicas de Hitler con sus generales, y su curiosa (por aplicar un adjetivo) forma de dirigir la guerra. En esa posición, privilegiada porque una de sus tareas era recopilar y preparar la información, pudo contemplar cómo Alemania terminó de derrumbarse sobre sí misma en aquellos últimos años de guerra.
No desvelaré más detalles. Dejo ese placer para los futuros lectores del libro. Es un libro que aconsejo, tanto por su facilidad de lectura, como por la información que proporciona, que si bien, insisto, seguramente no aporte nada nuevo, nos permitirá, seguramente, acceder a otro punto de vista. Muy recomendable para aquellos que se atreven por primera vez con esta etapa de la historia, porque les acercará a ella de forma amena. Y recomendable también, por qué no, para profundos aficionados y conocedores de la SGM, como un contrapunto “ligero” a otras lecturas sobre el periodo.
Y para tener otro punto de vista, porque siempre es bueno comparar, aquí tenéis otro comentario sobre el libro:
http://www.hislibris.com/en-el-bunker-c ... ringhoven/
Referencias:
viewtopic.php?f=4&t=6146&p=80226
Bernd Freytag von Loringhoven fue uno de los últimos hombres que salieron con vida del búnker de Berlín, el día antes del suicidio de Hitler. Durante nueve meses había estado al lado del Führer, asistiendo diariamente, como ayudante de campo del general Guderian, a las conferencias en que se decidía el curso de la guerra. Más tarde, ya en el búnker, se convirtió en el oficial encargado de proporcionar información, hasta que el propio Hitler le autorizó a marchar y le deseó buena suerte. Logró pasar entre las líneas rusas, fue detenido por los británicos y, una vez en el campo de prisioneros, escribió los recuerdos de lo que había visto en unos cuadernos que, sesenta años más tarde, le han servido para escribir este libro estremecedor, que es el mejor relato de los últimos días de Hitler, vividos en una atmósfera, mientras las ratas huían del barco, los fieles se emborrachaban y Magda Goebbels llevaba a sus seis hijos para darles muerte al lado del Führer
Fuente: Contraportada del libro
Comentario Personal
Desde mi punto de vista, se trata de un libro engañoso. Engañoso porque, a primera vista, parece que no va a aportar nada nuevo con sus “escasas” 175 páginas. Acostumbrados como estamos a que la mayoría de los libros sobre la SGM suelen ser aptos, además de para el desarrollo del músculo mental, para realizar ejercicios de culturismo incluso en las ediciones de bolsillo, el librito de Loringhoven puede aparentar, en una primera impresión, que no es más que un acercamiento superficial y carente de interés hacia un tema sobre el que sufrimos una cierta saturación en los últimos tiempos: los últimos momentos de la vida de Hitler.
Pero basta abrir el libro y comenzar a leerlo para perder esa impresión. Cierto es que no aporta información novedosa, datos sorprendentes, sesudas disquisiciones ni jugosos “cotilleos” sobre la vida en el búnker. Loringhoven cuenta sus experiencias desde un “simple” punto de vista de joven soldado y oficial.
El título también contiene su dosis de engaño, si bien es perdonable, porque se trata de un título mucho más atrayente que “Memorias de un joven oficial alemán” o “Yo fui ayudante de campo de Guderian”. Porque la obra no se limita sólo a las impresiones de Loringhoven durante su estancia en el búnker de Berlín, que comienzan más o menos hacia la mitad del libro, sino que también cuenta hechos sucedidos con anterioridad.
En las primeras páginas, el autor cuenta su origen y sus primeras experiencias como oficial en Polonia, Francia y Rusia. En estas, salpicadas de pequeñas anécdotas, se nos intenta presentar el sentir del soldado medio alemán durante ese periodo, influidos por la aparente invencibilidad de la Wehrmacht y la cuasidivina capacidad de Hitler de emprender y conseguir empresas cada vez más difíciles.
La redacción simple y directa, la falta de disquisiciones y el aporte de pequeñas historias engarzadas con su propia historia facilitan la lectura del libro, que se lee de forma fácil y amena y va interesando cada vez un poco más conforme se va avanzando en la lectura. Podemos encontrar así las vivencias de Loringhoven en primera línea, su asombrosa capacidad de supervivencia (hasta tres veces se libró de caer prisionero de los rusos, una de ellas en Stalingrado), sus observaciones e impresiones acerca de los acontecimientos que rodearon a la dirección de las operaciones militares durante los dos últimos años de guerra (incluyendo los que rodearon al fallido atentado del 20 de julio de 1944 y la posterior represión), la descripción acerada y crítica de los personajes de la cúpula nazi en los últimos momentos de la guerra o las sensaciones de asfixiante opresión que rodeaban a los últimos fieles del Führer antes del Götterdämmerung.
Porque Loringhoven, en su calidad de ayudante de campo de Guderian, a la sazón Jefe del Estado Mayor del OKH a partir de Julio del 44, pudo ser testigo, un día tras otro, de las famosas reuniones estratégicas de Hitler con sus generales, y su curiosa (por aplicar un adjetivo) forma de dirigir la guerra. En esa posición, privilegiada porque una de sus tareas era recopilar y preparar la información, pudo contemplar cómo Alemania terminó de derrumbarse sobre sí misma en aquellos últimos años de guerra.
No desvelaré más detalles. Dejo ese placer para los futuros lectores del libro. Es un libro que aconsejo, tanto por su facilidad de lectura, como por la información que proporciona, que si bien, insisto, seguramente no aporte nada nuevo, nos permitirá, seguramente, acceder a otro punto de vista. Muy recomendable para aquellos que se atreven por primera vez con esta etapa de la historia, porque les acercará a ella de forma amena. Y recomendable también, por qué no, para profundos aficionados y conocedores de la SGM, como un contrapunto “ligero” a otras lecturas sobre el periodo.
Y para tener otro punto de vista, porque siempre es bueno comparar, aquí tenéis otro comentario sobre el libro:
http://www.hislibris.com/en-el-bunker-c ... ringhoven/
Referencias:
viewtopic.php?f=4&t=6146&p=80226