Publicado: Vie Dic 15, 2017 1:14 am
por Domper
Savely, antes Tuoma, ahora Fricis, bajó del metro en la Reinickendorfer Strasse. Tuvo un momento de duda, pero la luz del sol orientó sus pasos hacia el canal Schifffahrts. Como llevaba semanas estudiando el plano de la capital no dudó y enseguida encontró la esquina que buscaba. Ni se acercó, sino que estuvo perdiendo tiempo por el barrio hasta que vio que alguien había tirado junto a una papelera una fruta medio mordida. Entonces se agachó para atarse el zapato, momento que aprovechó para vigilar el entorno. Había gente, pero no demasiada, y no parecía que nadie estuviese controlándolo. De todas maneras siguió de largo, rodeó la manzana y al volver a la esquina, arrugó el papel que llevaba en la mano. Buscó con la mirada una papelera donde tirarlo. Cuando la localizó cruzó la calle con cuidado, educadamente como haría un berlinés, introdujo el papel y cuidadosamente recogió un pequeño paquete.

A cien metros de distancia un ex policía metido a agente de contraespionaje se maravilló de la habilidad con la que el desconocido había dado el cambiazo. Qué pena no saber de su contenido, pero Joachim lo acababa de dejar ahí no haría ni quince minutos. Dudó si sería mejor alertar a la Central o seguir al intruso, pero viendo cómo se alejaba no tuvo más remedio que ir tras él procurando no dejarse ver. Pero el que había recogido el paquete, que como le habían dicho era un hombre alto y delgado, se dirigió a la boca de metro más cercana. El policía lo siguió aunque no de cerca en el torno, y luego cuando subió al tren. El policía montó a otro vagón, intentando no perderle de vista. Cuando se iban a cerrar las puertas el desconocido bajó. El hizo lo mismo, pero el hombre alto volvió a entrar con las puertas ya cerrándose. El policía perdió el convoy, y tuvo que buscar una cabina para avisar a la Central. Para entonces Savely se había perdido en el populoso barrio de Moabit.

Desde la Central el Director ordenó la caza del hombre delgado.