Publicado: Mar Mar 11, 2014 3:40 pm
por Domper
Crucero por el Mediterráneo

25 de Enero de 1941

El Almirante Cunningham se había retirado a su camarote bajo el puente del Warspite al atardecer, para ver si conseguía descansar un poco si le dejaban las preocupaciones. Siempre había pensado que la guerra en el Mediterráneo sería difícil, aunque durante los primeros meses hubiesen sido canela en rama. Había derrotado a la flota italiana en Calabria y en Tarento, y los convoyes a Malta habían llegado sin pérdidas. Pero desde primeros de año todo había cambiado. En pocos días los Stukas alemanes habían hundido uno de sus mejores cruceros y dañado a otro. Peor había sido lo del portaaviones Illustrious, que no se había ido al fondo de casualidad, pero que por lo visto había sufrido enormes averías.

Por lo menos el portaaviones había podido escapar de Malta y mañana llegaría a Alejandría. Mientras Cunningham había salido con la flota para intentar interceptar alguno de los numerosos convoyes que estaban aparejando desde Nápoles hacia Libia. Lo malo es que solo disponía del viejo portaaviones Eagle para defenderse de los bombarderos del Eje, por eso había ordenado desembarcar los torpederos Swordfish y sustituirlos por los últimos cazas Fulmar y Gladiator que quedaban en Egipto.

Cunningham había pensado acercarse con sus tres acorazados y el Eagle hasta 200 millas al Este de Malta y luego destacar a cuatro cruceros para hacer un barrido nocturno por la costa tunecina. Aunque no consiguiese hundir ningún barco la presencia de la flota británica impediría la navegación de los convoyes italianos durante unos días. Esperaba que si se mantenía a esa distancia de Malta podría eludir los aviones de reconocimiento enemigos…

¡¡¡BUMM!!! El Warspite se sacudió y empezó a vibrar como si hubiese sido golpeado por un martillo gigante. Las luces se apagaron y empezaron a sonar los timbres de alarma. Cunningham se apresuró a subir al puente, donde ya estaba el Capitán Fisher.

— Almirante, hemos sido alcanzados por un torpedo por la amura de babor. Aun no conozco la extensión de los daños pero parecen serios. Nos hemos quedado sin propulsión y sin energía eléctrica, supongo que a causa de la sacudida. He enviado al segundo para conocer la magnitud de los daños.

Cunningham salió al alerón de babor, y a la media luz del ocaso pudo ver la herida que el torpedo había hecho en su barco, por la que escapaba un torrente de petróleo. También vio como el Valiant y el Barham caían a estribor para evitar al buque insignia, detenido bruscamente. Pero el Eagle hizo la maniobra contraria y cayó a babor, probablemente para esquivar al Barham.

— Señalero, ordene al Eagle que vire en redondo. — dijo el almirante —. Hay un submarino por ahí y se está exponiendo a…

¡¡¡BUMM!!! ¡¡¡BUMM!!! Dos columnas de agua se elevaron del flanco del Eagle.