Publicado: Mar Mar 04, 2014 2:13 pm
por Domper
La calma antes de la tempestad

27 de Septiembre de 1940

“Gran Bretaña:

El enemigo continua su ofensiva aérea contra los aeródromos de West Anglia, aunque el mal tiempo les está dificultando las operaciones. El abandono de los aeródromos de West Anglia está dificultando las operaciones sobre el Canal, donde se han repetido los ataques con bombarderos Stuka contra las defensas costeras.

Tras los dos grandes ataques sobre Londres de hace quince días no ha lanzado nuevas incursiones a gran escala sobre la capital, pero envía todas las noches un pequeño grupo de bombarderos, seguramente no para conseguir daños tangibles sino para impedir el descanso de los civiles.

El Coastal Command y el Bomber Command han continuado bombardeando los puertos del Canal destruyendo un importante número de embarcaciones de asalto, aunque a costa de serias pérdidas. El Bomber Command ha efectuado dos incursiones más contra Berlín y una contra Kiel.

Aunque un gran contingente alemán sigue desplegado en los aledaños del Canal de la Mancha parte de las embarcaciones de asalto han sido desplazadas a puertos más resguardados de nuestros ataques. Por eso se cree que los alemanes han desistido de sus intenciones de desembarcar en Inglaterra este año. Sin embargo, no disponemos de confirmación de las intenciones alemanas. Las lanchas de asalto podrían ser desplazadas a la costa en un plazo breve, y la división paracaidista alemana sigue desplegada en la periferia de París. Por ello se cree que aunque no hay peligro inminente de invasión, la situación podría cambiar en pocos días.

Es preciso mantener la defensa de Inglaterra mediante unidades aéreas, navales y terrestres, al menos hasta que el mal tiempo impida las operaciones, y teniendo en cuenta que los ataques pueden empeorar en periodos de buen tiempo.

Atlántico:

Han seguido los ataques contra buques principalmente por submarinos aunque los ataques por aviones de gran radio de acción se están haciendo más frecuentes. Los ataques se producen sobre todo contra mercantes navegando independientemente, pero el convoy HX–72 perdió once buques la semana pasada. No sabemos si se repetirán los ataques a convoyes escoltados.

En el Sur del Atlántico y el Índico se han producido varios ataques atribuidos a cruceros auxiliares camuflados.

Gibraltar:

El avance en Andalucía de los primeros días resultó muy exitoso, penetrando casi 5 km en territorio español, lo que impide el emplazamiento de la artillería pesada enemiga. Sin embargo se han producido repetidos bombardeos aéreos que aunque no han afectado a las instalaciones subterráneas han destruido parte de la ciudad y de los muelles. Nuestra artillería sigue bloqueando la navegación por el Estrecho y ha librado duelos con baterías españolas de la otra orilla, sin consecuencias. La guarnición dispone de recursos para persistir durante seis meses. No se han producido intentos de asalto por los españoles.

Canarias:

Tras la toma de la ciudad de Las Palmas parte de los españoles se retiraron a las fortificaciones de “La Isleta”, desde donde dominaban el puerto. Hasta que los últimos defensores no capitularon el día 17 no ha sido posible usar el puerto, que ha sufrido graves daños al ser demolidas gran parte de las instalaciones. El resto de las tropas españolas se retiraron al interior montañoso. Una columna ha intentado reducirlos, pero ha sido detenida por la fuerte defensa y lo difícil del terreno. Siguen las obras para reconstruir el aeródromo de Gando, y se espera que la próxima semana sea parcialmente operativo. La población civil resulta indiferente a nuestras tropas. En Las Palmas se han repetido los incidentes de la Línea, por lo que ha sido preciso destinar tres batallones para controlar la ciudad. Ha habido ataques aislados contra nuestras tropas atribuidos a soldados españoles dispersos.

Los bombardeos del aeródromo de Tenerife y de su capital han disminuido los ataques aéreos a nuestras unidades, pero no han conseguido la capitulación de la isla.

En las operaciones se han perdido tres cargueros, dos destructores y el crucero ligero Dragon, este último al ser torpedeado por un submarino.

En la costa africana se ha detectado la presencia de aviones alemanes.

Se recomienda que una vez controlada la isla de Gran Canaria sea ocupada la de Lanzarote, para impedir que los españoles usen su aeródromo.

Mediterráneo:

Prosiguen las operaciones navales de abastecimiento a Malta. Durante la operación Hats un carguero fue hundido y el crucero York recibió daños importantes por ataques aéreos por aviones alemanes. Malta ha sufrido dos nuevos ataques aéreos que han causado pocos daños. En los ataques han participado aviones franceses procedentes de Túnez.

El enemigo ha comenzado a enviar convoyes escoltados a Libia. Parece que está siendo enviada una fuerza alemana al mando del general Manstein, cuyo paso por el Brennero ha sido detectado.

Yugoslavia:

La firma del Pacto de Aquisgrán por el Príncipe Paul ha sido muy mal vista por la población serbia y por el ejército, de mayoría serbia. Varios militares serbios se han puesto en contacto con nuestra embajada en Grecia.

Grecia:

Tras el hundimiento del crucero Elli no se habían producido nuevos combates. Sin embargo los italianos acumulaban tropas en Albania. Inglaterra ha ofrecido auxilios, pero el gobierno griego los ha rechazado.

Palestina:

Se han producido escaramuzas con tropas regulares francesas de Siria, pero no operaciones a gran escala.

Egipto:

La ofensiva italiana se ha pausado, probablemente para reavituallamiento. El enemigo ha construido varias posiciones fortificadas.

África Oriental:

Tras la invasión de Somamliland los italianos se han detenido y en la frontera con Kenya solo se han producido escaramuzas. En Sudán se han detectado incursiones italianas de pequeña entidad. Un mercante ha sido hundido en el Estrecho de Adén por un submarino. Los bombarderos italianos han seguido atacando Adén con escasos resultados.

Extremo Oriente:

Un crucero francés ha capturado dos barcos en el Estrecho de Malaca.”


El informe presentado por el General Dill era tranquilizador. A pesar de las pérdidas sufridas por la RAF la invasión no era inminente. Egipto, Malta y Gibraltar resistían, y las operaciones en Canarias proseguían aunque a ritmo lento. Churchill consultó sobre la posibilidad de enviar refuerzos a Gibraltar, pero el almirante Pound respondió que se trataba de una operación enormemente arriesgada y que, aunque los buques de guerra consiguiesen superar el bloqueo, no lo harían los barcos de carga. Recomendaba en cambio enviar refuerzos a Canarias. Churchill lo admitió, pero insistió que se estudiasen operaciones para liberar Gibraltar. También sugirió a Menzies que una crisis en Yugoslavia permitiría retrasar las operaciones de alemanes e italianos en el Mediterráneo.