Publicado: Mié Sep 09, 2015 11:42 am
Pregunta 2714
- Aquí tiene, Herr Clar. Zarzaparrilla de parte de Herr Kaiser. Y unos boqueroncitos.
- Es muy pronto aún, pero bueno, no diré que no. Traiga, traiga.
- Aquí tiene...
- Sascha, yo estaba pensando... Ya nos conocemos hace unos cuantos años y no cuenta usted nada de su familia.
- Bueno, verá, es que no me gusta entretener a los clientes con cosas sin interés.
- ¿Deduzco entonces que en su familia no ocurren grandes acontecimientos?
- Hombre. Un tatarabuelo mío estuvo en la guerra de los Boers. Y mi abuela Clementina formó parte del cuerpo de costureras de un emperador.
- Caray, pues no es poco.
- Y tanto.
- Bueno, verá. La pregunta que voy a plantear es acerca de un militar. Un militar que casi por lógica debiera haber sido miembro del partido nazi, pero que no lo fue. Que luchó en el frente del este y en el occidental, y también en otro lugar de Europa donde, desde luego, se peleaba a muerte.
- Habrá tantos...
- Sí, pero en el caso que nos ocupa, su valedor, digamoslo así, terminó siendo ni más ni menos que Mariscal de Campo. Nuestro hombre también sirvió brevemente en una isla. No llegó al generalato. De sus hombres hubo militares norteamericanos que dijeron que eran los mejores contra los que se habían enfrentado.
- Vaya, vaya...
- Y este personaje del que le hablo sobrevivió a la guerra, y se fue a vivir a un lugar que está a miles de kilómetros de su país natal, concretamente a un país que había sido enemigo del suyo durante la guerra.
- Es bastante. pero ¿algo más?
- Sí. Apunte que empezó la guerra en el Heer, pero que no la terminó en el Heer. Cambió durante la contienda, precisamente a causa del empeño que en ello puso ese hombre que llegó a Mariscal de Campo.
- Pues apuntado queda.
- Invite a lo clásico al acertante.
- ¿Cerveza y gambas cabezonas?
- Exactamente.
- Aquí tiene, Herr Clar. Zarzaparrilla de parte de Herr Kaiser. Y unos boqueroncitos.
- Es muy pronto aún, pero bueno, no diré que no. Traiga, traiga.
- Aquí tiene...
- Sascha, yo estaba pensando... Ya nos conocemos hace unos cuantos años y no cuenta usted nada de su familia.
- Bueno, verá, es que no me gusta entretener a los clientes con cosas sin interés.
- ¿Deduzco entonces que en su familia no ocurren grandes acontecimientos?
- Hombre. Un tatarabuelo mío estuvo en la guerra de los Boers. Y mi abuela Clementina formó parte del cuerpo de costureras de un emperador.
- Caray, pues no es poco.
- Y tanto.
- Bueno, verá. La pregunta que voy a plantear es acerca de un militar. Un militar que casi por lógica debiera haber sido miembro del partido nazi, pero que no lo fue. Que luchó en el frente del este y en el occidental, y también en otro lugar de Europa donde, desde luego, se peleaba a muerte.
- Habrá tantos...
- Sí, pero en el caso que nos ocupa, su valedor, digamoslo así, terminó siendo ni más ni menos que Mariscal de Campo. Nuestro hombre también sirvió brevemente en una isla. No llegó al generalato. De sus hombres hubo militares norteamericanos que dijeron que eran los mejores contra los que se habían enfrentado.
- Vaya, vaya...
- Y este personaje del que le hablo sobrevivió a la guerra, y se fue a vivir a un lugar que está a miles de kilómetros de su país natal, concretamente a un país que había sido enemigo del suyo durante la guerra.
- Es bastante. pero ¿algo más?
- Sí. Apunte que empezó la guerra en el Heer, pero que no la terminó en el Heer. Cambió durante la contienda, precisamente a causa del empeño que en ello puso ese hombre que llegó a Mariscal de Campo.
- Pues apuntado queda.
- Invite a lo clásico al acertante.
- ¿Cerveza y gambas cabezonas?
- Exactamente.