Publicado: Mié Abr 23, 2008 2:16 am
por Joaquin Garcia Morato
A ver, pirata "Gallandiano", otra anécdota de "tu" Galland:
Ya con 72 "castañas", el señorito Galland quedó prendado de una bella dama, llamada Heidi Horn, quien, a la sazón, era
instructora de vuelo en un club privado de avionetas mono-motores, en Alemania. Rendido ante los encantos de la aviadora, el "gallo" Galland
se presentó en el Aeródromo, sin revelar su identidad, al objeto de recibir clases de vuelo. La chica, sorprendida por la osadía del abuelete,
aceptó encantada. En su primera instrucción de vuelo, la instructora le explicó los pormenores del vuelo en mono-motor a...¡Adolf Galland!,
que sonreía, complacido, a la charla explicativa. Una vez en el aire, y con Adolf en el puesto del aprendiz, pidió a su bella instructora si por
favor le permitía hacerse un momento con los mandos de la avioneta, pues "le hacía mucha ilusión". La instructora, preocupada por lo que
pudiera ocurrir con su novato y anciano alumno, cedió finalmente "sólo un momento, nada más" los mandos al "As". Durante la media hora siguiente, Heidi Horn fue la única (y privilegiada) testigo, además del cielo berlinés, del regreso a un mono-motor de uno de los mejores pilotos de todos los tiempos. ¿ El final de esta historia ?
Lógico: se casaron a los pocos meses.
Qué, ¿ Te ha gustado, piratovich ? :wink:
:D Un saludo cordial.
García-Morato.