Publicado: Sab May 03, 2008 3:05 am
por Roul Wallenberg
Este personaje sí es fascinante, un agente de altísimo nivel, sin entrar en polémicas lo equiparo a Richard Sorge, una lástima (supongo que por ser latino) haya sido ignorado del todo en los grandes escenarios de la historia militar.


Algo acerca de la vida del héroe:



<center>Garbo, el desertor español que engañó a Hitler



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Uno de los soldados que en octubre de 1938(Guerra Civil de España) fueron incorporados a la antigua XIII Brigada Internacional en su regreso al frente del Ebro, después de ser reorganizada como unidad enteramente española, fue un barcelonés de 26 años que entraría poco después en la Historia oculto bajo el sobrenombre de Garbo, el espía que hizo creer a los nazis que el desembarco aliado en las costas francesas se produciría en Calais y no en Normandía. Tendrían que pasar cuarenta años desde que fue dado por muerto por el servicio secreto británico, para que el periodista Nigel West descubriera a Garbo en Venezuela. Fue en 1984 cuando el mundo supo que el espía que había derrotado a Hitler se llamaba Juan Pujol García. Cuatro años después fallecía en Caracas. Tenía 76 años.

Hijo de una familia de la alta burguesía catalana, el futuro Garbo recibió una educación católica y liberal, marcada por un acendrado pacifismo. Pero todo el mundo de los Pujol naufragó con el estallido de la Guerra Civil. El padre ya había muerto, y la familia sufrió la hostilidad del ambiente de la Barcelona revolucionaria, e incluso su madre y su hermana estuvieron detenidas.A él mismo se le condujo a comisaría por no haberse presentado a filas al ser llamada su quinta.

Como recuerda Javier Juárez en su magnífica biografía sobre Garbo, después de pasar una semana en comisaría, Pujol fue liberado gracias a la organización quintacolumnista Socorro Blanco. A partir de entonces vivió escondido durante un año en una casa de este grupo en Barcelona. En aquellos meses de clandestinidad, llegó a perder 20 kilos y estuvo al borde de una insalvable depresión.

La documentación que he descubierto en el Archivo Militar de Avila demuestra que Pujol se presentó a filas el 14 de septiembre de 1938, un día antes de que expirara el plazo establecido en la amnistía decretada en agosto por Negrín para prófugos y desertores.Sin embargo, Pujol aprovecharía su marcha al frente para desertar del Ejército Popular sin haber cumplido un mes en filas. Los datos hasta hoy desconocidos de la fuga de Pujol y otros dos compañeros se encuentran detallados en un parte de la 13ª Brigada Mixta fechado el 11 de octubre de 1938, en el sector de Fayón y La Pobla de Massaluca, entre las provincias de Zaragoza y Tarragona:

"51 Batallón.- A las 19.30 horas de ayer se encontraron a faltar de la 3ª Cía. los soldados Pedro Pascual Ribas, Ramón Cortina Callart y Juan Pujol García, éste último telefonista. A las 19 horas aún se encontraban en la Cía. Pedro Pascual se encontraba de centinela y se supone se ha llevado consigo tres granadas de mano, por encontrarlas a faltar. Los otros dos no se han llevado absolutamente nada. Se supone que el soldado telefonista no posee clave alguna por estar destacado en la Cía., donde es difícil que la conociese por el poco tiempo que lleva en esta Unidad.Los tres ingresaron hace pocos días en el Batallón. Inmediatamente de notarse su desaparición salieron patrullas para ver si los encontraban, sin ningún resultado a pesar de haber estado toda la noche buscándolos". El día anterior a su fuga, evidencia mayúscula de la astucia del futuro espía, así como de su innata disposición al doble juego, Pujol dirigió una encendida charla de propaganda desde las posiciones republicanas a las trincheras franquistas con la que pretendía ganarse la confianza de sus mandos.

Los tres desertores se fugaron cinco días después de haber llegado a primera línea, favorecidos por la presencia de Pedro Pascual Ribas como centinela aquella noche, quien debió de ofrecerse a sus compañeros para permitirles la fuga y unirse a ellos. Pujol logró alcanzar las líneas franquistas, a pesar de que en un instante de desorientación volvió hacia las republicanas, desde donde fue tiroteado. Los franquistas le enviaron preso al campo de concentración de Deusto, del que salió gracias al aval de un sacerdote al que su madre había ocultado en su casa. Al poco le llegó la citación para presentarse en un centro de reclutamiento de Burgos, donde fue alistado por los nacionales como alférez.

"Mi padre me contó siempre", me dice su hijo Juan Kreisler -quien conserva el apellido de su padrastro-, "que sentía con orgullo el no haber disparado ni un tiro a favor de ninguno de los dos bandos. Era un hombre profundamente liberal, que rechazó los totalitarismos de uno y otro signo. Esto es lo que define la actitud de mi padre ante la Guerra Civil y la Segunda Guerra Mundial". Al final de la Guerra Civil marchó a Lisboa y fue allí donde comenzaron sus contactos con el servicio de espionaje alemán.Iniciada ya la II Guerra Mundial, recaló en Londres, donde se ofreció a los británicos como agente doble.


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Fuente: www.portalsedg.com/foro/showthread.php?t=40261. Portal Segunda guerra mundial.

Fotografía en uniforme, la misma fuente. Foto portada del Libro: Google, imágenes.


Salu2