Publicado: Dom Feb 17, 2013 11:34 pm
por albert13
Lothar von Krossieg escribió:
albert13 escribió: con todo lo que está cayendo, quizá sí deberíamos empezar a cuestionar determinados mitos. El pasado no deja de iluminar nuestra experiencia actual y no existe historia más que desde el "presente", el cual fija las orientaciones de sentido de la exégesis historiográfica.
Si eran criminales, ¿por qué no iban también a mentirnos?


No es el lugar para plantearse la situación actual, ya sea política, social o económica, pero sólo me gustaría decir que sean crímenes de guerra o no, nos hayan "mentido" Churchill, Truman o Roosevelt sobre los cimientos de nuestras democracias occidentales, no hay fuera de este modelo político nada más, salvó los oscuros abismos de los extremismos autoritarios, sean del lado que sea, conviertiendo voces incomodas en silencio por la fuerza y eliminando los pensamientos auto-declarados peligrosos por medio de la violencia.

Ahora bien, en mi opinión, tales prácticas de bombardeos indiscriminados están por supuesto faltos de toda escusa y legalidad. No se sí se pueden incluir legalmente en el saco de crímenes de guerra, pero sobra decir que, como poco, fueron inhumanos.

Y no hace falta ser criminal para mentir, como dice la famosa frase "la historia la escriben los vencedores", y depende de ellos ser fieles a la realidad, o no.

Un saludo.


No hace falta ser criminal para mentir, pero la cuestión es la inversa, o sea, que para ser criminal es necesario, antes o después, siempre, mentir.

Precisamente, eso de "no hay fuera de este modelo político nada más" es lo que está en cuestión, pues si este modelo político es genocida e impune de sus genocidios, no veo qué diferencia existe entre el modelo político y los totalitarismos con los que se pretende atemorizarnos: todo ello depende de una determinada narración histórica, que es lo que nos interesa en este foro. Porque los totalitarismos son "malos" precisamente por sus crímenes, mientras aquí se nos dice que las "democracias" son buenas a pesar de sus crímenes, cosa que no parece muy coherente.

Por lo demás, si fuera como usted dice, la democracia admitiría esos crímenes: no los admite y la narración histórica pasa de puntillas a su lado. La irresponsabilidad de la historiografía oficial pone en evidencia que existen otras formas de coaccionar a las personas, además de las típicamente totalitarias, formas más sutiles y por ello más peligrosas: al historiador que se sale de la versión oficial se le calumnia y se arruina su carrera docente. Dice usted: "conviertiendo voces incomodas en silencio por la fuerza y eliminando los pensamientos auto-declarados peligrosos por medio de la violencia." Pero la violencia no es siempre el gulag o el campo de concentración.