Publicado: Mié Nov 18, 2009 6:48 pm
por Domper
La pérdida de los cuatro portaaviones resultó muy grave, desde luego. Pero no estará de más recordar que los norteamericanos sufrieron pérdidas similares en 1942 y se sobrepusieron a ellas: los Lexington, Yorktown, Wasp y Hornet se fueron al fondo ese año, y entre los cuatro embarcaban más aviones que los perdidos por Japón (los cuatro de Midway, el Shoho y el Ryujo). Más las repetidas averías sufridas por el Saratoga, que equilibraban sobradamente las del Shokaku y el Zuikaku, más el británico Hermes. Por otra parte, los pilotos en Midway no se hundieron con sus barcos. Las tripulaciones perdidas en Midway fueron pocas: nueve sobre el atolón, veintinueve en los ataques al Yorktown, diecisiete defendiendo los portaaviones, y un número indeterminado en los aviones preparados para despegar durante los minutos claves. En total, serían unas setenta, bastantes menos que las sufridas en las restantes batallas aeronavales de 1942.

El problema era que Estados Unidos podía hacer frente a las pérdidas en hombres y buques, y Japón no. Lo que resulta llamativo, porque Japón ya tenía la experiencia de perder gran número de aviones en China (en una ocasión un ataque entero del Kaga fue derribado por cazas chinos, menos un avión). Lo mismo, respecto a los portaaviones: si algo me resulta enigmático es que en Junio de 1942 los japoneses sólo tenían en construcción un portaaviones de flota (el malhadado Taiho), aunque estaban realizando varias conversiones ¿es que pensaban que no iban a tener pérdidas? La experiencia de las guerras con Rusia (1904) y Alemania (1914) no les autorizaban a pensar eso.

La cuestión es que Japón sufrió en Midway pérdidas graves en barcos, pero en los meses siguientes fueron parcialmente compensadas: con los dos Hiyo, el Ryujo y dos portaaviones de escolta. Por cierto, más adelante los portaaviones ligeros operarían con la flota sin problemas. En ese periodo los norteamericanos no recibieron ningún portaaviones de flota (el Essex no sería entregado hasta Diciembre de 1942) aunque sí bastantes portaaviones de escolta, la mayoría de los cuales fueron destinados al Atlántico, hasta 1943 no comenzaron a operar en las Salomon (y como portaaviones de flota, dos de la clase Sangamon). El problema es que en las dos batallas de las Salomon Japón tuvo pérdidas enormes: 75 aviones en las Salomon Orientales (con casi todas sus dotaciones), 99 en la de Santa Cruz. A eso sumemos las pérdidas sobre Guadalcanal, donde las tripulaciones veteranas fueron malgastadas: por ejemplo, al conocerse la noticia del desembarco se envió una fuerza de bombarderos en picado D3A “Val”, a sabiendas que su autonomía les impediría regresar, como ocurrió (lo que no se esperaba es que no se pudiese recuperar a las tripulaciones). Más las pérdidas en Nueva Guinea.

Y ahora mi pregunta: supongamos que Japón vence en Midway ¿qué podría haber ocurrido? Me parece improbable que hundiesen toda la flota norteamericana, pero supongamos que sólo uno escapa, a cambio de otro japonés (las condiciones meteorológicas favorecían las sorpresas). Estados Unidos se quedaría con tres portaaviones de flota (el superviviente, el Saratoga y el Wasp), Japón conservaría cinco (los tres supervivientes y los dos Shokaku) ¿qué podrían hacer? El mando japonés ya sabía que conservar Midway resultaría muy difícil. Si se trataba de seguir la progresión por Nueva Caledonia, Fiji y Samoa, estamos hablando de islas muy grandes (mayores que Guadalcanal), muy alejadas, y con una superioridad precaria, especialmente por carecerse de reservas de aviadores instruidos. Luego lo dicho, parece razonable que si se libraban nuevas batallas, serían parecidas al Mar del Coral (los japoneses enviando sólo parte de su fuerza, mala costumbre que no perderían hasta 1944), con grandes pérdidas por ambas partes.

Aventurando un pronóstico, 1942 podría acabar con Japón con tres portaaviones grandes en servicio, y dos o tres pequeños, y Estados Unidos con sólo uno, más los portaaviones de escolta, que en este escenario parece razonable que se enviarían al Pacífico al menos parte: media docena de barcos de la clase Bogue, un par de Sangamon, y tal vez el Ranger y el Victorious (ambos barcos pasaron al Pacífico ante la crisis sufrida tras las pérdidas de Santa Cruz). Para entonces la flota submarina norteamericana estaba solventando sus deficiencias (el Shokaku se libró por los pelos tras Santa Cruz), se producían aviones a miles, y también salían miles de pilotos de las escuelas. En Febrero de 1943 entraría el servicio el F4U Corsair, y en Septiembre, el Hellcat.

En Noviembre de 1943 la fuerza norteamericana era ya abrumadora: en Tarawa desplegaron 17 portaaviones (seis de batalla, cinco ligeros y seis de escolta, y no estaban presentes ni el Victorious, ni el Saratoga ni el Ranger, que cumplían otras misiones) y doce acorazados. Las bases de avanzada funcionaban perfectamente, luego no era preciso retener barcos en la Costa Este (como ocurrió durante 1942). Los submarinos actuaban con gran agresividad, torpedeando varios portaaviones en ese periodo. Etcétera.

Por eso, lo dicho. Una derrota en Midway cambiaba poco: retrasaría entre seis y doce meses la contraofensiva. A cambio Japón tendría que defender archipiélagos en el quinto pino (Samoa está muy muy lejos). Y si decidía atacar Australia… ojala. La palabra mágica es “tanques”.

Saludos