Publicado: Jue Abr 15, 2010 7:33 pm
por Kurt_Steiner
Atlantis -3-
HSK 2; Schiff 16, Corsario C


El 11 de noviembre, tras una persecución y varios disparos, se captura al Automedon, que transportaba piezs de recambio para vehículos y aviones, además de suministros y repuestas para maquinaria. Lo más importante era, a parte de detalles de las defensas inglesas en Singapur, varios cientos de cajas de whisky, varios millones de cigarrilos y comida congelada, así como fresca. Tras salvar toda la carga que pudieron, el Automedón fue hundido.

Tras reunirse con el Ole Jacob y transferirle a los prisioneros, lo enviaron a Kobe, en la neutral Japón, para cambiar el combustible de aviación por diesel. El 7 de diciembre el crucero auxiliar HSK 5 Pinguin se unió al Altantis, y pocos después lo hizo el petrolero capturado Storstad. El Atlantis rellenó sus depósitos de combustible y Rogge se enteró de que le habían condedido la cruz de caballero.

Se partió hacia el archipielago de Kerguelen, en el sur, donde se descansó un poco y se reparó el barco. Un mes después partía hacia los cotos de caza situados entre Madagascar y la India, cobrandose varias presas, como el Ketty Brovig, con una valiosa carga de fuel oil y diesel. Tras varias semaas sin éxito el buque se deantró en el atlántico sur, capturando a un buque de pasajeros, el Zam Zam, que entre su carga incluía material de guerra y civiles americanos, algunos de los cuales iban dotados, por desgracia, con cámaras, cuyas fotos no tardaron en llegar a manos británicas.

La siguiente víctima fue el carguero inglés Rabaul, hundido el 13 de mayo. Cinco días después, un portaaviones y el acorazado HMS Nelson pasaron cerca del corsario sin verlo, lo que sería lamentado, el 24 de mayo, por el carguero Trafalgar, que transportaba carbón, que fue hundido por el Atlantis. El mismo destino corrió el Tottenham, que transportaba material de guerra, incluídos aviones y camiones, hundido el 17 de junio, y el Balzac, con comida, el 22.

Tras quince meses de constnte navegación, el buque y sus tripulantes necesitaban un descanso, por lo que se salieron de las rutas de navegación, para realizar algunas reparaciones y darse un erspiro, antes de reuinrse con el HSK 1 Orion para darle algo de combustible.

De vuelta a la acción capturaría al carguero Silvaplana en el Cabo de Hornos, el 10 de septiembre. Tras rabastecerse y transferir sus prisoineros al buque de suministros Kunsterland el 21 de ese mes, el Atlantis dejó el Cabo para volver al Atlántico.

El 13 de noviembre reabasteció de combustible al U-68, y el 22 hacía lo mismo con el U-126 cuando apareció de repente el HMS Devonshire, que identificó al Atlantis gracias a las fotos del Zam Zam. El HMS Devonshire dañó al Altantis con sus cañones, mientras disparaba lejos del alcance de los cañones ligeros del Atlantis, por lo que Rogge optó por lanzar humo y ordenar el abandono del barco. En ese momento, recordando que había un submarino alemán por la zona, el HMS Devonshire se alejó. El U-126, que se había sumergido, regresó a la superfície para recoger a los supervivientes. Estos serían recogidos por el buque de suministros Phyton; el buque debía reabastecer a varios submarinos mientras regresaba a casa, y, en uno de esos reaprovisionamientos, apareció otro crucero inglés, el HMS Dorsetshire, gemelo del que hundió al Atlantis y que hizo lo propio con el Phyton. De nuevo se repitió la historia. El HMS Dorsetshire se retiró para evitar ser torpedeado y los supervivientes del Atlantis y del Python quedaron a la deriva, en espera de ser rescatados. Varios submarinos llegaron a por los supervivientes y, llenando cualquier rincón de sus estrechos cascos, los llevaron a Francia, a donde llegó el último naufrago el 29 de diciembre de 1941.

Un agradecido almirante Raeder ascendió a todos los marinos y a todos los oficidales. Rogge recibió las hojas de roble para su Cruz de Caballero.

Bernhard Rogge sobrevivió a la guerra y sirvió en la Bundesmarine. Murió en Hamburgo el 29 de junio de 1982.