Publicado: Jue Jun 30, 2011 5:00 pm
por Kurt_Steiner
La posguerra
Tanto el IS-2 como el IS-3 fueron modernizados en los años que siguieron al fin de la Segunda Guerra Mundial. En 1954 los IS-2 fueron reconstruidos como IS-2M, que aumentaba la munición transportada para el cañón principal -de 28 a 35 granadas; disponían de un periscopio mejorado para el conductor, un modernizado sistema de refrigeración del motor y nuevos equipos de radio y de comunicación y se le dotó externamente de nuevos contenedor para herramientas. El programa de modernización para el IS-3M empezó a 1960 e incluía un refuerzo adicional del casco, el cambio de la ametralladora DShK por una DShKM, un equipo de visión nocturna TVN-2 para el conductor, un cambio de motor y numerosos cambios menores, como nuevas ruedas procedentes del diseño del tanque T-10. Un regimiento de T-10 fue empleado contra los insurgentes húngaros en 1956, sufriendo algunas perdidas.

Otro desarrollo del IS fue el Objekt 703, dotado de una transmisión eléctrica y que fue redesignado IS-6. Sin embargo, no llegó a entrar en producción al no resultar fiable, pesado e inestable.

Simultáneamente, se estudió el IS-7 como contramedida para el Tigre II. Montaría un motor diesel naval de 1050 hp y un cañón de 130 mm derivado de la pieza naval 56-SM, que disparaba una granada de 36.5 kg a 945 m/s, lo que la convirtió en el arma más potente jamás montada en un tanque soviético hasta esa fecha. Su arma coaxial era la ametralladora pesada KPVT de 12.7 mm y otra como arma AA, además de otras 6 de 7.62 montadas en la torre y el casco. El primer prototipo estuvo listo para las pruebas en 1948. Su interior no resultó del agrado de los tanquistas, pues faltaba espacio para moverse y para cargar el cañón. La suspensión, similar a la del Tigre II, demostró ser demasiado fragil cuando el tanque operaba a su máxima velocidad y su peso no fue del agrado del directorado del Ejército soviético, pues creaba problemas de transporte y había muy pocos puentes capaces de soportar su peso.

Sólo se fabricaron un pequeño número de tanques de prueba. Asimismo, aunque su potencia de fuego hubiera sido equivalente a la de un M60A1 o un Chieftain, su cañón y su sistema de tiro padecía las limitaciones de la tecnología de los años 40, lo que hubiera limitado o reducido la precisión de los citados carros de combate.

Imagen
(fuente, NV 7, Osprey)