Publicado: Jue Jul 19, 2007 9:29 pm
Parece que Jacbass me hubiera imaginado las intenciones, porque seguro que los dos estabamos trabajando a la vez sobre estas dos armas. 
Echaba de menos a este otro clásico, así que ahí va.
Saludos.
El FlaK 88.
El nombre genérico de "88" se aplica a una serie de cañones alemanes llamados oficialmente 8.8cm FlaK 18, 36 o 37, e incluye también a los más modernos FlaK41 y 43, aunque estos últimos sean armas distintas. Su amplio uso y capacidad como arma antitanque e incluso como artillería convencional le convirtieron en un arma altamente flexible y temida y, para algunos, la más famosa pieza de artillería de toda la Segunda Guerra Mundial.
En términos generales el cañón tenía menos prestaciones como arma antiaérea que el QF 3.7" británico o el norteamericano de 90mm, pero como contrapartida era mejor desplegado y fue construido en mucho mayor número y podía ser encontrado en prácticamente cualquier campo de batalla.
Su éxito como improvisada arma anticarro llevó a la industria alemana a producir una línea de armas antitanque totalmente distinta para dicha aplicación, conocidas como PaK 88 (Panzerabwehr Kanone) y que serían el armamento principal de tanques como el Tigre I. La introducción de los modelos FlaK41 y 43 supuso el desarrollo de nuevas armas anticarro de aún mayores prestaciones.
El término FlaK es una contracción para Fliegerabwehr Kanone y Flugabwehr Kanone, o Cañón Antiaéreo, el uso original para el que fue diseñado el 88. Entre la tropa era conocido más informalmente como Acht-Acht, contracción de Acht-komma-Acht Zentimeter (8,8cm=88mm). Durante la guerra fue la palabra "Flak" el término más utilizado por los aliados para referirse al fuego antiaéreo alemán, procediera o no de un 88.
Un 88 en posición en Rusia. Las marcas del cañón indican el número de presas cobradas, una pesadilla para los tanquistas soviéticos.
Los antecedentes de las armas antiaéreas durante la Primera Guerra Mundial no pasaban de ser adaptaciones de cañones de medio calibre sobre cureñas que permitían disparar en ángulos más elevados, y eran más un elemento disuasorio contra los vulnerables y lentos aviones de la época. Tan pronto como las prestaciones de los aviones fueron aumentando en el periodo de entreguerras, el arma antiaérea vio como su uso comenzaba a declinar, incapaz de alcanzar la altitud de los nuevo aviones y de sostener una cadencia de disparo que contrarrestara la creciente velocidad de los aparatos. La mayoría de los analistas militares acabaron por coincidir en que la artillería antiaérea había dejado de ser un arma efectiva, y su desarrollo y producción se vieron limitados en la mayoría de los paises.
Sin embargo, los expertos alemanes continuaron desarrollando cañones más potentes, con una mayor velocidad inicial de salida del proyectil que le permitían alcanzar una mayor altitud y una cadencia de disparo superior. Como los tratados impuestos a Alemania tras la Primera Guerra Mundial le impedían fabricar nuevas armas de prácticamente cualquier clase, Krupp desarrolló los nuevos cañones en colaboración con la sueca Bofors. El diseño original que llevaría hasta el definitivo 88 fue en realidad un arma de 75mm, pero durante la fase de prototipo el ejército requirió un cañón de mucha más capacidad que el 75.
Los diseñadores comenzaron a trabajar con otro calibre común en el ejército alemán, y finalmente el primer prototipo de 88 fue producido en 1928. El primer modelo, el FlaK 18, usaba un cañón de una sola pieza con una longitud de 56 calibres, lo que llevó a denominarle 88/L56.
El FlaK 18 iba montado sobre una cureña cruciforme que permitía abrir fuego en todas las direcciones, y en poco tiempo podía ser montado sobre un chasis de dos ruedas para su transporte. Un inconveniente era su peso, lo cual hacía que su transporte sólo fuera posible por vehículos de gran potencia, convirtiendo al semioruga KdKfz 7 en la pareja perfecta del arma. Un sencillo mecanismo semiautomático expulsaba las vainas de los proyectiles disparados y preparaba el siguiente, lo que le permitía una rápida operación y cadencia de tiro, de 15 a 20 disparos por minuto, casi el doble que la mayoría de armas similares del momento.
Su producción en gran número comenzó con la llegada al poder del partido nazi en 1933, estando disponible para la Legión Condor en la Guerra Civil Española, y demostrando ser la mejor arma antiaérea disponible y un excelente cañón anticarro a largas distancias. La experiencia de la Guerra Civil también sirvió para sacar a la luz algunos inconvenientes que se convirtieron en mejoras potenciales a futuro.
Muchas de esas mejoras fueron introducidas en el FlaK36, como por ejemplo un cañón de dos piezas que facilitaba su recambio y una nueva plataforma que, auqnue más pesada, permitía poner el arma en acción en un tiempo mucho menor. También se incluyó una protección frontal que proporcionaba mayor seguridad a los artilleros, pero en detrimento de aumentar la silueta del arma. Estos y otros cambios le dieron al arma unas mejores prestaciones para operaciones de movimiento, el concepto básico de la Guerra Relámpago.
Un 88 en acción en el Norte de África.
El 88 fue utilizado de dos maneras: como cañón antiaéreo móvil pesado, y en un despliegue más estático como defensa antiaérea fija. En este último caso se utilizaron fundamentalmente los más ligeros FlaK37 en grandes baterías dirigidas por un único controlador de fuego, y dotados de instrumentación adicional que permitía un seguimiento más fácil de los blancos.
Durante la fase inicial de la Batalla de Francia, los 88 fueron utilizados contra los fuertemente blindados Char B1 y Matilda II franceses y británicos, cuya protección frontal sólo podía ser penetrada por anticarros más ligeros en contadas circunstancias. Este uso como anticarro fue aún más común durante las batallas en el Norte de África y la Unión Soviética, mostrándose el 88 capaz de destruir blindajes de hasta 150mm a distancias de 2kms, y convirtiéndose en un arma anticarro de extraordinarias prestaciones incluso contra los más avanzados carros soviéticos y norteamericanos que aparecieron en los últimos meses de la guerra.
En Agosto de 1944 había 10.704 cañones FlaK 18, 36 y 37 en servicio. Debido al incremento de la ofensiva de bombardeo norteamericana y británica sobre Alemania en 1943 y 1944, la mayoría de ellos eran usados en papel original de armas antiaéreas, ahora acompañadas del FlaK 40 de 128mm.
Un 88 apostado en un camino de Normandía.
Comparativamente el 88 no era tan potente como sus contrapartidas aliadas. Como antiaéreo era capaz de disparar un proyectil de 20,3 libras con una velocidad inicial de 2.600 pies/seg. y un alcance máximo efectivo de 26.000 pies. Aunque esta potencia fuera suficiente contra los bombardeos diurnos norteamericanos, que operaban habitualmente a 25.000 pies, muchos eran los aviones que podían sobrepasar la altitud máxima para un 88, que era de 32.000 pies. El británico QF MkIII de 3,7 pulgadas podía disparar un proyectil de 28 libras con una velocidad inicial de 2.600 pies/seg a un techo efectivo de 32.000 pies, y el 90mm Mk1 norteamericano hacía lo propio con un proyectil de 23 libras a una velocidad de 2.700 pies/seg y un techo de 32.000 pies. Ambas armas tenían una cadencia de disparo mayor que el 88, y eran más efectivas por el uso de espoletas de proximidad. Pero por otra parte tanto el cañón británico como el norteamericano eran más pesados y tenían una menor movilidad, así como unas prestaciones como armas anticarro o de artillería convencional mucho más limitadas que las del 88, al menos hasta que estuvieron disponibles un gran número de modificaciones. Tal vez el 90mm norteamericano pudiera ser usado como un arma anticarro potente en algunas circunstancias, pero no llegó a ser tan universalmente desplegado como el 88.
El Sdkfz 7 y el FlaK 88, la pareja perfecta.
FlaK 41.
Todas estas limitaciones no eran desconocidas para los ingenieros alemanes, y ya en 1939 al Luftwaffe requirió nuevas armas con mejores prestaciones. Rheinmetall respondío con un nuevo 88, el L/74. Disparaba un proyectil de 20,7 libras con una velocidad inicial de 3.280 pies/seg con un techo efectivo de 37.000 pies y un máximo de 48.000. También tenía una silueta más baja que sus predecesores, lo que le hacía todavía más efectivo como arma anticarro, pero su alto costo y la complejidad de su fabricación impidieron una producción masiva, alcanzándose una cifra de 556 unidades construidas de las que en Febrero de 1944 sólo habían sido desplegadas 279. Las mejoras en la recarga aumentaron la cadencia de tiro hasta 20/25 disparos por minuto. Se desarrollaron dos tipos de cañón, de tres y de cuatro secciones. La propuesta de Krupp fue el 8,8cm Gerat 42, pero no fue aceptado para producción como cañón antiaéreo, aunque Krupp continuó su desarrollo que llevaría al PaK 43 anticarro.
PaK 43 y KwK 43.
El PaK 43 fue desarrollado como cañón anticarro por Krupp a partir del Gerat 42. Utilizaba una nueva montura cruciforme que posicionaba al cañón más cerca del suelo, haciendole más fácil de ocultar y ofreciendo una silueta mucho más baja. También disponía de una protección blindada mejorada para los artilleros. El KWK 43, el arma estándar del Tigre II, era en esencia un PaK 43 modificado para ajustarse a las dimensiones de la torreta del carro. También se realizaron versiones autopropulsadas del arma, incluyendo los cazacarros Nashorn y Jagdpanther. Todas las versiones eran capaces de penetrar 200mm de coraza a 1.000 metros, convirtiendo en vulnerable a cualquier tanque de los existentes entre los aliados.
Cuando un Sherman y un 88 se encuentran puede pasar algo así.
Modelos:
Geschutze 8,8 kW FlaK. Entró en servicio en 1916 producido por Krupp.
8,8 cm FlaK 18. Recamara de carga semiautomática y disparo de alta velocidad. Entro en producción en 1933 producido por Krupp.
FlaK 18 1938 I. Actualizado para su uso con el Sonderanhanger 201. Peso de 7 toneladas. Cadencia de tiro de 15 a 20 disparos por minuto.
FlaK 18 Mod. 1940. Añadida la coraza de protección para la dotación. Producido por Krupp.
FlaK 18 Mod. 1938 II. 50 unidades modificadas para que un solo hombre pudiera realizar los movimientos de elevación y giro.
8,8cm FlaK 36. Entró en servicio en 1936-37. Compatible con el transporte Sonderanhanger 201 y capaz de disparar a blancos en tierra desde su posición de transporte. Peso de 7 toneladas. Cadencia de tiro de 15 a 20 disparos por minutos. Producido por Krupp.
8,8cm FlaK 36 Mod. 1940. Igual al anterior y dotado de una coraza de protección para la dotación. Los últimos modelos se adaptaron para un nuevo remolque, el Sonderanhanger 202 dotado de ruedas gemelas.
8,8cm FlaK 37. Sólo utilizado como arma antiaérea y equipado con el sistema de comunicación de datos Ubertragungser 37. Producido por Krupp.
8,8cm FlaK 41. Entró en servicio en 1943. Dotado de un cañón de mayor longitud y una vaina de proyectil mejorada. Utilizado como estándar con el Sonderanhanger 202. Producido por Rheinmetall-Borsig.
8,8cm Gerat 42. Diseñado por Krupp para el mismo uso que el FlaK 41, no llegó a entrar en servicio como antiaéreo. Su desarrollo posterior llevó al anticarro PaK 43.
8,8cm PaK 43. Anticarro desarrollado por Krupp desde el 8,8cm Gerat 42. Fabricado en diferentes versiones, incluyendo el KwK 43, por Dortmund Hoerder-Huttenverein, Henschel, Weserhutte y Fr. Garny.
8,8cm PaK 43/41. PaK 43 montado en un remolque de un solo eje como medida de emergencia ante la escasez de materiales. Peso de 4,9 toneladas.
8,8cm PaK 43/1. PaK 43 montado en el cazacarros Nashorn.
8,8cm PaK 43/2. PaK 43 montado en el cazacarros Ferdinand/Elefant. A veces llamado StuK 43/1.
8,8cm PaK 43/3 y 43/4. PaK 43 montado en el cazacarros Jagdpanther.
8,8cm KwK 43. PaK 43 modificado como cañón de tanque. Arma principal del carro Tigre II.
El 88 en combate.
Las fuerzas del Tercer Reich utilizaron el 88 ampliamente durante la Segunda Guerra Mundial, no sólo en su papel original de cañón antiaéreo, sino también como arma antitanque.
La Legión Condor utilizó el 88 durante la Guerra Civil Española, donde su capacidad como anticarro y pieza de artillería de propósito general excedieron sus prestaciones como antiaéreo. Rommel también utilizó el 88 como antitanque, primero en Francia y más tarde en el Norte de África. Su entrada en combate a tiempo de detener el avance británico en Arrás acabó con las esperanzas de detener la Blitzkrieg en Mayo de 1940. En Libia y Egipto los 88 eran empleados en trampas mortales contra los tanques británicos, poniéndoles fuera de combate desde distancias inalcanzables para las armas de los tanques ingleses. Más tarde el 8ú Ejército británico aprendería a coordinar su artillería con los avances de las tropas, destruyendo los relativamente inmóviles 88 en sus emplazamientos una vez que sus posiciones eran descubiertas.
El 88 fue muy utilizado en el Frente Oriental, desempeñando un papel crucial durante los primeros meses de la Operación Barbarroja. La aparición del extraordinario T34 fue un mazazo para las unidades acorazadas alemanas, cuyos panzer equipados con cañones de 37mm y 50mm sólo podían poner fuera de combate al carro soviético a muy corta distancia. Hasta la llegada del Panzer IV F2 y del Tigre, el 88mm era la única arma que podía detener a los T34 y KV a distancias medias y largas.
El terreno menos despejado de Italia y el Norte de Francia era menos propicio para el uso del 88 como arma anticarro, y aunque su utilización siguió siendo exitosa los resultados no fueron tan espectaculares como en África y Rusia. Durante Overlord y Cobra la artillería y poder aéreo aliados neutralizaron el impacto del 88mm en el campo de batalla, aunque unas pocas y bien posicionadas baterías del cañón alemán causaran a menudo graves problemas a las tropas aliadas en su avance.
De cualquier modo es significativa la incidencia que el 88mm tuvo en el diseño de los tanques tanto aliados como alemanes, haciendo a aquellos investigar en nuevos diseños con mejor blindaje y protección, y a estos desarrollar armas tan magníficas como el PVI Tigre.
Prestaciones del 88mm KwK 36 L/56 (desarrollo del FlaK36 para el PVI Tigre).
Munición: Pzgr.39. Perforante explosiva.
Peso del proyectil 10,2kg.
Velocidad de salida 773 m/s.
Penetración en blindaje con inclinación de 30ú.
A 100m, 120mm (100% en instrucción, 100% en combate).
A 500m, 110mm (100% en instrucción, 100% en combate).
A 1000m, 99mm (100% en instrucción, 93% en combate).
A 1500m, 91mm (98% en instrucción, 74% en combate).
A 2000m, 83mm (87% en instrucción, 50% en combate).
Munición: Pzgr. 40. Perforante con nucleo de tungsteno.
Peso del proyectil 7,3kg.
Velocidad de salida 930 m/s.
Penetración en blindaje con inclinación de 30ú.
A 100m, 171mm (100% en instrucción, 100% en combate).
A 500m, 156mm (100% en instrucción, 100% en combate).
A 1000m, 138mm (100% en instrucción, 93% en combate).
A 1500m, 123mm (97% en instrucción, 74% en combate).
A 2000m, 110mm (89% en instrucción, 47% en combate).
Munición: Gr. 39 HL. Alto explosivo antitanque.
Peso del proyectil 7,65kg.
Velocidad de salida 600 m/s.
Penetración en blindaje con inclinación de 30ú.
A 100m, 90mm (100% en instrucción, 100% en combate).
A 500m, 90mm (100% en instrucción, 98% en combate).
A 1000m, 90mm (94% en instrucción, 62% en combate).
A 1500m, 90mm (72% en instrucción, 34% en combate).
A 2000m, 90mm (52% en instrucción, 20% en combate).
Fuente: www.wikipedia.org
Echaba de menos a este otro clásico, así que ahí va.
Saludos.
El FlaK 88.
El nombre genérico de "88" se aplica a una serie de cañones alemanes llamados oficialmente 8.8cm FlaK 18, 36 o 37, e incluye también a los más modernos FlaK41 y 43, aunque estos últimos sean armas distintas. Su amplio uso y capacidad como arma antitanque e incluso como artillería convencional le convirtieron en un arma altamente flexible y temida y, para algunos, la más famosa pieza de artillería de toda la Segunda Guerra Mundial.
En términos generales el cañón tenía menos prestaciones como arma antiaérea que el QF 3.7" británico o el norteamericano de 90mm, pero como contrapartida era mejor desplegado y fue construido en mucho mayor número y podía ser encontrado en prácticamente cualquier campo de batalla.
Su éxito como improvisada arma anticarro llevó a la industria alemana a producir una línea de armas antitanque totalmente distinta para dicha aplicación, conocidas como PaK 88 (Panzerabwehr Kanone) y que serían el armamento principal de tanques como el Tigre I. La introducción de los modelos FlaK41 y 43 supuso el desarrollo de nuevas armas anticarro de aún mayores prestaciones.
El término FlaK es una contracción para Fliegerabwehr Kanone y Flugabwehr Kanone, o Cañón Antiaéreo, el uso original para el que fue diseñado el 88. Entre la tropa era conocido más informalmente como Acht-Acht, contracción de Acht-komma-Acht Zentimeter (8,8cm=88mm). Durante la guerra fue la palabra "Flak" el término más utilizado por los aliados para referirse al fuego antiaéreo alemán, procediera o no de un 88.
Un 88 en posición en Rusia. Las marcas del cañón indican el número de presas cobradas, una pesadilla para los tanquistas soviéticos.
Los antecedentes de las armas antiaéreas durante la Primera Guerra Mundial no pasaban de ser adaptaciones de cañones de medio calibre sobre cureñas que permitían disparar en ángulos más elevados, y eran más un elemento disuasorio contra los vulnerables y lentos aviones de la época. Tan pronto como las prestaciones de los aviones fueron aumentando en el periodo de entreguerras, el arma antiaérea vio como su uso comenzaba a declinar, incapaz de alcanzar la altitud de los nuevo aviones y de sostener una cadencia de disparo que contrarrestara la creciente velocidad de los aparatos. La mayoría de los analistas militares acabaron por coincidir en que la artillería antiaérea había dejado de ser un arma efectiva, y su desarrollo y producción se vieron limitados en la mayoría de los paises.
Sin embargo, los expertos alemanes continuaron desarrollando cañones más potentes, con una mayor velocidad inicial de salida del proyectil que le permitían alcanzar una mayor altitud y una cadencia de disparo superior. Como los tratados impuestos a Alemania tras la Primera Guerra Mundial le impedían fabricar nuevas armas de prácticamente cualquier clase, Krupp desarrolló los nuevos cañones en colaboración con la sueca Bofors. El diseño original que llevaría hasta el definitivo 88 fue en realidad un arma de 75mm, pero durante la fase de prototipo el ejército requirió un cañón de mucha más capacidad que el 75.
Los diseñadores comenzaron a trabajar con otro calibre común en el ejército alemán, y finalmente el primer prototipo de 88 fue producido en 1928. El primer modelo, el FlaK 18, usaba un cañón de una sola pieza con una longitud de 56 calibres, lo que llevó a denominarle 88/L56.
El FlaK 18 iba montado sobre una cureña cruciforme que permitía abrir fuego en todas las direcciones, y en poco tiempo podía ser montado sobre un chasis de dos ruedas para su transporte. Un inconveniente era su peso, lo cual hacía que su transporte sólo fuera posible por vehículos de gran potencia, convirtiendo al semioruga KdKfz 7 en la pareja perfecta del arma. Un sencillo mecanismo semiautomático expulsaba las vainas de los proyectiles disparados y preparaba el siguiente, lo que le permitía una rápida operación y cadencia de tiro, de 15 a 20 disparos por minuto, casi el doble que la mayoría de armas similares del momento.
Su producción en gran número comenzó con la llegada al poder del partido nazi en 1933, estando disponible para la Legión Condor en la Guerra Civil Española, y demostrando ser la mejor arma antiaérea disponible y un excelente cañón anticarro a largas distancias. La experiencia de la Guerra Civil también sirvió para sacar a la luz algunos inconvenientes que se convirtieron en mejoras potenciales a futuro.
Muchas de esas mejoras fueron introducidas en el FlaK36, como por ejemplo un cañón de dos piezas que facilitaba su recambio y una nueva plataforma que, auqnue más pesada, permitía poner el arma en acción en un tiempo mucho menor. También se incluyó una protección frontal que proporcionaba mayor seguridad a los artilleros, pero en detrimento de aumentar la silueta del arma. Estos y otros cambios le dieron al arma unas mejores prestaciones para operaciones de movimiento, el concepto básico de la Guerra Relámpago.
Un 88 en acción en el Norte de África.
El 88 fue utilizado de dos maneras: como cañón antiaéreo móvil pesado, y en un despliegue más estático como defensa antiaérea fija. En este último caso se utilizaron fundamentalmente los más ligeros FlaK37 en grandes baterías dirigidas por un único controlador de fuego, y dotados de instrumentación adicional que permitía un seguimiento más fácil de los blancos.
Durante la fase inicial de la Batalla de Francia, los 88 fueron utilizados contra los fuertemente blindados Char B1 y Matilda II franceses y británicos, cuya protección frontal sólo podía ser penetrada por anticarros más ligeros en contadas circunstancias. Este uso como anticarro fue aún más común durante las batallas en el Norte de África y la Unión Soviética, mostrándose el 88 capaz de destruir blindajes de hasta 150mm a distancias de 2kms, y convirtiéndose en un arma anticarro de extraordinarias prestaciones incluso contra los más avanzados carros soviéticos y norteamericanos que aparecieron en los últimos meses de la guerra.
En Agosto de 1944 había 10.704 cañones FlaK 18, 36 y 37 en servicio. Debido al incremento de la ofensiva de bombardeo norteamericana y británica sobre Alemania en 1943 y 1944, la mayoría de ellos eran usados en papel original de armas antiaéreas, ahora acompañadas del FlaK 40 de 128mm.
Un 88 apostado en un camino de Normandía.
Comparativamente el 88 no era tan potente como sus contrapartidas aliadas. Como antiaéreo era capaz de disparar un proyectil de 20,3 libras con una velocidad inicial de 2.600 pies/seg. y un alcance máximo efectivo de 26.000 pies. Aunque esta potencia fuera suficiente contra los bombardeos diurnos norteamericanos, que operaban habitualmente a 25.000 pies, muchos eran los aviones que podían sobrepasar la altitud máxima para un 88, que era de 32.000 pies. El británico QF MkIII de 3,7 pulgadas podía disparar un proyectil de 28 libras con una velocidad inicial de 2.600 pies/seg a un techo efectivo de 32.000 pies, y el 90mm Mk1 norteamericano hacía lo propio con un proyectil de 23 libras a una velocidad de 2.700 pies/seg y un techo de 32.000 pies. Ambas armas tenían una cadencia de disparo mayor que el 88, y eran más efectivas por el uso de espoletas de proximidad. Pero por otra parte tanto el cañón británico como el norteamericano eran más pesados y tenían una menor movilidad, así como unas prestaciones como armas anticarro o de artillería convencional mucho más limitadas que las del 88, al menos hasta que estuvieron disponibles un gran número de modificaciones. Tal vez el 90mm norteamericano pudiera ser usado como un arma anticarro potente en algunas circunstancias, pero no llegó a ser tan universalmente desplegado como el 88.
El Sdkfz 7 y el FlaK 88, la pareja perfecta.
FlaK 41.
Todas estas limitaciones no eran desconocidas para los ingenieros alemanes, y ya en 1939 al Luftwaffe requirió nuevas armas con mejores prestaciones. Rheinmetall respondío con un nuevo 88, el L/74. Disparaba un proyectil de 20,7 libras con una velocidad inicial de 3.280 pies/seg con un techo efectivo de 37.000 pies y un máximo de 48.000. También tenía una silueta más baja que sus predecesores, lo que le hacía todavía más efectivo como arma anticarro, pero su alto costo y la complejidad de su fabricación impidieron una producción masiva, alcanzándose una cifra de 556 unidades construidas de las que en Febrero de 1944 sólo habían sido desplegadas 279. Las mejoras en la recarga aumentaron la cadencia de tiro hasta 20/25 disparos por minuto. Se desarrollaron dos tipos de cañón, de tres y de cuatro secciones. La propuesta de Krupp fue el 8,8cm Gerat 42, pero no fue aceptado para producción como cañón antiaéreo, aunque Krupp continuó su desarrollo que llevaría al PaK 43 anticarro.
PaK 43 y KwK 43.
El PaK 43 fue desarrollado como cañón anticarro por Krupp a partir del Gerat 42. Utilizaba una nueva montura cruciforme que posicionaba al cañón más cerca del suelo, haciendole más fácil de ocultar y ofreciendo una silueta mucho más baja. También disponía de una protección blindada mejorada para los artilleros. El KWK 43, el arma estándar del Tigre II, era en esencia un PaK 43 modificado para ajustarse a las dimensiones de la torreta del carro. También se realizaron versiones autopropulsadas del arma, incluyendo los cazacarros Nashorn y Jagdpanther. Todas las versiones eran capaces de penetrar 200mm de coraza a 1.000 metros, convirtiendo en vulnerable a cualquier tanque de los existentes entre los aliados.
Cuando un Sherman y un 88 se encuentran puede pasar algo así.
Modelos:
Geschutze 8,8 kW FlaK. Entró en servicio en 1916 producido por Krupp.
8,8 cm FlaK 18. Recamara de carga semiautomática y disparo de alta velocidad. Entro en producción en 1933 producido por Krupp.
FlaK 18 1938 I. Actualizado para su uso con el Sonderanhanger 201. Peso de 7 toneladas. Cadencia de tiro de 15 a 20 disparos por minuto.
FlaK 18 Mod. 1940. Añadida la coraza de protección para la dotación. Producido por Krupp.
FlaK 18 Mod. 1938 II. 50 unidades modificadas para que un solo hombre pudiera realizar los movimientos de elevación y giro.
8,8cm FlaK 36. Entró en servicio en 1936-37. Compatible con el transporte Sonderanhanger 201 y capaz de disparar a blancos en tierra desde su posición de transporte. Peso de 7 toneladas. Cadencia de tiro de 15 a 20 disparos por minutos. Producido por Krupp.
8,8cm FlaK 36 Mod. 1940. Igual al anterior y dotado de una coraza de protección para la dotación. Los últimos modelos se adaptaron para un nuevo remolque, el Sonderanhanger 202 dotado de ruedas gemelas.
8,8cm FlaK 37. Sólo utilizado como arma antiaérea y equipado con el sistema de comunicación de datos Ubertragungser 37. Producido por Krupp.
8,8cm FlaK 41. Entró en servicio en 1943. Dotado de un cañón de mayor longitud y una vaina de proyectil mejorada. Utilizado como estándar con el Sonderanhanger 202. Producido por Rheinmetall-Borsig.
8,8cm Gerat 42. Diseñado por Krupp para el mismo uso que el FlaK 41, no llegó a entrar en servicio como antiaéreo. Su desarrollo posterior llevó al anticarro PaK 43.
8,8cm PaK 43. Anticarro desarrollado por Krupp desde el 8,8cm Gerat 42. Fabricado en diferentes versiones, incluyendo el KwK 43, por Dortmund Hoerder-Huttenverein, Henschel, Weserhutte y Fr. Garny.
8,8cm PaK 43/41. PaK 43 montado en un remolque de un solo eje como medida de emergencia ante la escasez de materiales. Peso de 4,9 toneladas.
8,8cm PaK 43/1. PaK 43 montado en el cazacarros Nashorn.
8,8cm PaK 43/2. PaK 43 montado en el cazacarros Ferdinand/Elefant. A veces llamado StuK 43/1.
8,8cm PaK 43/3 y 43/4. PaK 43 montado en el cazacarros Jagdpanther.
8,8cm KwK 43. PaK 43 modificado como cañón de tanque. Arma principal del carro Tigre II.
El 88 en combate.
Las fuerzas del Tercer Reich utilizaron el 88 ampliamente durante la Segunda Guerra Mundial, no sólo en su papel original de cañón antiaéreo, sino también como arma antitanque.
La Legión Condor utilizó el 88 durante la Guerra Civil Española, donde su capacidad como anticarro y pieza de artillería de propósito general excedieron sus prestaciones como antiaéreo. Rommel también utilizó el 88 como antitanque, primero en Francia y más tarde en el Norte de África. Su entrada en combate a tiempo de detener el avance británico en Arrás acabó con las esperanzas de detener la Blitzkrieg en Mayo de 1940. En Libia y Egipto los 88 eran empleados en trampas mortales contra los tanques británicos, poniéndoles fuera de combate desde distancias inalcanzables para las armas de los tanques ingleses. Más tarde el 8ú Ejército británico aprendería a coordinar su artillería con los avances de las tropas, destruyendo los relativamente inmóviles 88 en sus emplazamientos una vez que sus posiciones eran descubiertas.
El 88 fue muy utilizado en el Frente Oriental, desempeñando un papel crucial durante los primeros meses de la Operación Barbarroja. La aparición del extraordinario T34 fue un mazazo para las unidades acorazadas alemanas, cuyos panzer equipados con cañones de 37mm y 50mm sólo podían poner fuera de combate al carro soviético a muy corta distancia. Hasta la llegada del Panzer IV F2 y del Tigre, el 88mm era la única arma que podía detener a los T34 y KV a distancias medias y largas.
El terreno menos despejado de Italia y el Norte de Francia era menos propicio para el uso del 88 como arma anticarro, y aunque su utilización siguió siendo exitosa los resultados no fueron tan espectaculares como en África y Rusia. Durante Overlord y Cobra la artillería y poder aéreo aliados neutralizaron el impacto del 88mm en el campo de batalla, aunque unas pocas y bien posicionadas baterías del cañón alemán causaran a menudo graves problemas a las tropas aliadas en su avance.
De cualquier modo es significativa la incidencia que el 88mm tuvo en el diseño de los tanques tanto aliados como alemanes, haciendo a aquellos investigar en nuevos diseños con mejor blindaje y protección, y a estos desarrollar armas tan magníficas como el PVI Tigre.
Prestaciones del 88mm KwK 36 L/56 (desarrollo del FlaK36 para el PVI Tigre).
Munición: Pzgr.39. Perforante explosiva.
Peso del proyectil 10,2kg.
Velocidad de salida 773 m/s.
Penetración en blindaje con inclinación de 30ú.
A 100m, 120mm (100% en instrucción, 100% en combate).
A 500m, 110mm (100% en instrucción, 100% en combate).
A 1000m, 99mm (100% en instrucción, 93% en combate).
A 1500m, 91mm (98% en instrucción, 74% en combate).
A 2000m, 83mm (87% en instrucción, 50% en combate).
Munición: Pzgr. 40. Perforante con nucleo de tungsteno.
Peso del proyectil 7,3kg.
Velocidad de salida 930 m/s.
Penetración en blindaje con inclinación de 30ú.
A 100m, 171mm (100% en instrucción, 100% en combate).
A 500m, 156mm (100% en instrucción, 100% en combate).
A 1000m, 138mm (100% en instrucción, 93% en combate).
A 1500m, 123mm (97% en instrucción, 74% en combate).
A 2000m, 110mm (89% en instrucción, 47% en combate).
Munición: Gr. 39 HL. Alto explosivo antitanque.
Peso del proyectil 7,65kg.
Velocidad de salida 600 m/s.
Penetración en blindaje con inclinación de 30ú.
A 100m, 90mm (100% en instrucción, 100% en combate).
A 500m, 90mm (100% en instrucción, 98% en combate).
A 1000m, 90mm (94% en instrucción, 62% en combate).
A 1500m, 90mm (72% en instrucción, 34% en combate).
A 2000m, 90mm (52% en instrucción, 20% en combate).
Fuente: www.wikipedia.org