Publicado: Lun Oct 22, 2007 11:32 am
por Kurt_Steiner
El Ejército alemán, debido a la acumulación de bajas en todos los frentes, empezó a sufrir una escasez de efectivos que se fue haciendo cada vez mas crónica. Debido a la situación en el Frente del Este y a la descomposición del Frente Oeste en verano de 1944, y por tanto, a la proximidad del enemigo a las fronteras alemanas, las autoridades tomaron medidas de emergencia. En septiembre de 1944, mediante decreto del Führer se formó el Volkssturm para enrolar a todos los hombres entre los 16 y los 60 años, capaces de manejar un arma en defensa del suelo patrio. El Alto Mando alemán pretendía poner en armas a 6 millones de hombres con los cuales se formarían nuevas divisiones para defender el territorio alemán.

En todos los distritos (Gau) el Gauleiter -jefe del distrito, una especie de gobernador que estaba bajo las órdenes de Reichsleiter Martin Borman, el más alto oficial del partido, designado por Hitler, y responsable de la movilización laboral y la defensa civil- tenía a su cargo el reclutamiento de los Volkssturm quienes una vez inscritos se les identificaba visiblemente y se les daba categoría de soldados.

Para reclutar a los miembros del Volkssturm se establecieron tres categorías:

a) Hombres aptos para el combate nacidos entre 1884 y 1924, es decir que contaban entre los veinte y los sesenta años, la mayoría de los cuales habían servido e las fuerzas armadas durante la Primera Guerra Mundial.

b) Hombres nacidos entre 1884 y 1924 que por efectuar trabajos especializados no estuvieran prestando servicio militar ya.

c) Hombres nacidos entre 1925 y 1928, desde los dieciséis años hasta los diecinueve y que no estuvieran prestando servicio ya.

Los hombres que trabajaban en la industria de armamentos y que cumplían horarios de setenta y dos horas semanales, sólo asistirían a la instrucción los domingos. Si fuera posible la instrucción se llevaría a cabo en el mismo centro de trabajo. Según los datos estadísticos, con estos reclutas se podía contar con una fuerza militar adicional de 5 millones de hombres. Martin Bormann era el responsable de todos ellos.

No solamente se enroló a los hombres, sino incluso a las mujeres, siendo ésta otra promesa traicionada por Hitler, de acuerdo a sus discursos de los años treinta en el sentido de que las mujeres no eran soldados y de que no serían empleadas por las fuerzas armadas. Estas mujeres, fueron destinadas como personal de la artillería antiaérea, entre otras tareas.