Publicado: Mar Mar 11, 2014 12:15 pm
Día D+17 y D+18, 8 y 9 de Marzo de 1945
El principal objetivo del día 8 de Marzo consitiría en empujar a los japoneses hacia la costa este y, cumpliendo con las órdenes del Cuerpo de Marines, toda la división saltó de sus posiciones a las 6:20h.
La Compañía A/1/24 se encuadró en el 3/24, mientras que el 1/24 tuvo que extender su frente con dos compañías. El 23º de Marines continuó con la misma táctica de ataque que los días anteriores, formación en columna, con un único cambio; la compañía K, adjunta en el 2/23, fue relevada por la Compañía E.
En este día, los marines se volvieron a encontrar con una fuerte resistencia en la zona izquierda y centro, con una particular oposición en el área límite entre el 23º Regimiento y el 24º. La Compañía A eliminó la resistencia en la zona entre regimientos durante la mañana.
Sin embargo, hubo un notable incremento en la actividad japonesa en la línea del frente durante la tarde-noche, con numerosos ataques de mortero y artillería. A las 23:00, el 2/23 y el 3/24, situados en el área más al noreste de la división, informaron de intentos de infiltración a gran escala, y a las 23:30 un contraataque japonés golpeó a la Compañía E/2/23, desplegada entre ambos regimientos.
Aunque algunos de los japoneses gritaron durante el ataque, no se trató de una carga banzai. Los soldados nipones avanzaron poco a poco, usando para ello el abrupto terreno de la isla, y se abrieron paso hasta casi la propia línea americana. Algunos incluso llegaron a alcanzar el puesto de mando del 2/23, destruyéndolo poco después con granadas. Otros intentaron pasar como camilleros, cargando supuestos heridos.
La peor parte del ataque se la llevó la Compañía E, pero hubo fuertes combates en la línea del frente de ambos regimientos.
Poco después de la medianoche, la Compañía E informó de la falta de munición y un jeep con remolque fue enviado al frente cargado con suministros. Se encontró la ruta de avance repleta de japoneses y sus ocupantes tuvieron que disparar contra sus agresores mientras avanzaron hasta la línea de la Compañía E. Esta compañía, en solitario, disparó más de 200 proyectiles de mortero, tanto explosivos como de iluminación, 20 cajas de granadas y una cantidad incontable de munición del calibre 30.
Con las primeras luces del día la lucha en el frente casi había acabado, pero limpiar la zona de enemigos duró hasta el medio día siguiente. En la zona del ataque principal se encontraron más de 600 cadáveres japoneses, y sumándolos a los de otras áreas hicieron un total de más de 800.
A las 7:00 del día 9 de Marzo, el 2/23 avanzó una considerable distancia sin encontrarse prácticamente oposición. Al sur del 23º Regimiento, el 3/24 se topó con una férrea oposición en su frente, pero tras dos asaltos logró avanzar sobre las líneas japonesas casi 300m. El resto de la división apenas hizo avances.
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El principal objetivo del día 8 de Marzo consitiría en empujar a los japoneses hacia la costa este y, cumpliendo con las órdenes del Cuerpo de Marines, toda la división saltó de sus posiciones a las 6:20h.
La Compañía A/1/24 se encuadró en el 3/24, mientras que el 1/24 tuvo que extender su frente con dos compañías. El 23º de Marines continuó con la misma táctica de ataque que los días anteriores, formación en columna, con un único cambio; la compañía K, adjunta en el 2/23, fue relevada por la Compañía E.
En este día, los marines se volvieron a encontrar con una fuerte resistencia en la zona izquierda y centro, con una particular oposición en el área límite entre el 23º Regimiento y el 24º. La Compañía A eliminó la resistencia en la zona entre regimientos durante la mañana.
Sin embargo, hubo un notable incremento en la actividad japonesa en la línea del frente durante la tarde-noche, con numerosos ataques de mortero y artillería. A las 23:00, el 2/23 y el 3/24, situados en el área más al noreste de la división, informaron de intentos de infiltración a gran escala, y a las 23:30 un contraataque japonés golpeó a la Compañía E/2/23, desplegada entre ambos regimientos.
Aunque algunos de los japoneses gritaron durante el ataque, no se trató de una carga banzai. Los soldados nipones avanzaron poco a poco, usando para ello el abrupto terreno de la isla, y se abrieron paso hasta casi la propia línea americana. Algunos incluso llegaron a alcanzar el puesto de mando del 2/23, destruyéndolo poco después con granadas. Otros intentaron pasar como camilleros, cargando supuestos heridos.
La peor parte del ataque se la llevó la Compañía E, pero hubo fuertes combates en la línea del frente de ambos regimientos.
Poco después de la medianoche, la Compañía E informó de la falta de munición y un jeep con remolque fue enviado al frente cargado con suministros. Se encontró la ruta de avance repleta de japoneses y sus ocupantes tuvieron que disparar contra sus agresores mientras avanzaron hasta la línea de la Compañía E. Esta compañía, en solitario, disparó más de 200 proyectiles de mortero, tanto explosivos como de iluminación, 20 cajas de granadas y una cantidad incontable de munición del calibre 30.
Con las primeras luces del día la lucha en el frente casi había acabado, pero limpiar la zona de enemigos duró hasta el medio día siguiente. En la zona del ataque principal se encontraron más de 600 cadáveres japoneses, y sumándolos a los de otras áreas hicieron un total de más de 800.
A las 7:00 del día 9 de Marzo, el 2/23 avanzó una considerable distancia sin encontrarse prácticamente oposición. Al sur del 23º Regimiento, el 3/24 se topó con una férrea oposición en su frente, pero tras dos asaltos logró avanzar sobre las líneas japonesas casi 300m. El resto de la división apenas hizo avances.
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