Publicado: Dom Dic 10, 2006 4:46 pm
por Capitan Miller
OPERACIÓN COBRA. La Ruptura del Frente de Normandía.

Y mientras los chicos de Bradley se estrujaban la sesera ideando como poner en serios apuros al "Listo Kluge", así pintaban las cosas en el Ejército Alemán que no tenía ni idea ni de por donde iban a venir los tiros, nunca mejor dicho...

4.- Los Ejércitos Enfrentados.
4.1 El Ejército Alemán.
La Campaña de Normandía remarcó la contínua desmodernización del Ejército Alemán durante los últimos años de la guerra. Ello fue aún más evidente en el terreno del apoyo aéreo. La Luftwaffe nunca fue un factor determinante en Normandía, en completo contraste con su contraparte aliada. Ambos, el Ejército USA y el Británico, aprendieron las lecciones de una inadecuada utilización en Túnez en 1943, y en Normandía jugaron un papel determinante logrando paralizar la logística alemana y dominando el campo de batalla en lo referente al apoyo aéreo cercano. No se trataba tan solo de un problema táctico, también era un asunto de visión estratégica. Hitler y los altos mandos alemanes no llegaron a comprender la importancia del poder aéreo en un campo de batalla moderno. Líderes con experiencia, como Kluge y Model, quedaban impactados al llegar a Normandía y comprobar lo decisivo de la fuerza aérea aliada en comparación con el relativamente modesto papel de la aviación en el Frente Ruso.
El factor aéreo era sólo el más dramático ejemplo de cuanto se había alejado Alemania del modelo de 1940. En otros muchos factores, como la motorización y el "mando y control" se encontraba significativamente atrasada respecto de los aliados occidentales. Ello se puso de manifiesto tan pronto como las batallas del Frente de Normandía ganaron en fluidez. El Cuartel General Alemán perdió un tiempo precioso antes de reaccionar ante la ruptura del frente por parte del Ejército USA, y la ausencia de una red de comunicaciones de radio eficiente impidió a los comandantes de alto rango contactar con sus subordinados con la rapidez necesaria en cuanto las líneas de comunicación telefónica y terrestres fueron aplastadas por los bombardeos. El movimiento de tropas necesario para taponar las brechas se relentizó ante la ausencia del número adecuado de unidades motorizadas, lo cual también afecto a las líneas de abastecimiento germanas.

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Una prueba de la efectividad aérea aliada. Restos chamuscados de unos Panther de la Panzer Lehr en las cercanías de Le Desert, durante un ataque aliado a mediados de Julio.

El 7ú Ejército Alemán consistía en unidades de tres armas distintas (Wehrmacht, Waffen SS y Luftwaffe), lo cual le hacía difícil de coordinar ante el favoritismo imperante en cada arma. Había estado en combate desde Junio y muchas de sus unidades se habían debilitado fruto de dicho esfuerzo, además de sufrir escasez de suministro fruto de la campaña de interdicción desarrollada por la Fuerza Aérea USA. Las fuerzas armadas alemanas en Francia habían empleado los años de ocupación en mantener posiciones relativamente estáticas, no estando equipadas con los vehículos suficientes como para poder autoabastecerse, al contrario, dependían en gran medida de la red de ferrocarriles franceses, frecuentemente bajo la amenaza de la Resistencia y ahora impracticables con los continuos ataques aéreos aliados.
Mientras el sector opuesto al frente británico conseguía una cierta fluidez logística, el 7ú Ejército sufría constantes problemas de suministro. El tráfico ferroviario sobre el rio Loira se encontraba paralizado; el importantísimo nudo de comunicaciones de Saint Cyr en dirección a Tours había sido neutralizado en un ataque aéreo el 15 de Julio, y los depósitos de combustible cercanos a Chateaubriant fueron bombardeados el 16. En el momento de la ofensiva de Cobra el 7ú Ejército tenía reservas de combustible para dos días y un preocupante nivel de reservas de munición.
Las formaciones de infantería alemana en Francia eran básicamente de dos tipos, divisiones de infantería estáticas y divisiones regulares, comúnmente llamadas "divisiones de ataque". Las divisiones estáticas eran usadas en tareas de ocupación o defensa costera, y su nivel era muy bajo, tanto humano como material. Del total de divisiones en Francia constituían los dos tercios de la fuerza total alemana. En Noviembre de 1943 Hitler ordenó que se mejorara el nivel de las fuerzas armadas en Francia ante la perspectiva de un eventual ataque aliado. Fruto de ello fue la llegada de unidades veteranas del Frente Oriental, pero aún así la calidad de las fuerzas armadas germanas en Francia continuó adoleciendo de oficiales y suboficiales con experiencia. El adoctrinamiento político fue ampliamente reforzado a finales de 1943 con el fin de aumentar la moral de las tropas así como su cohesión y tenacidad. En el verano de 1944 se encontraban en Francia 12 de las mejores divisiones de infantería de la Wehrmacht, incluyendo algunas excelentes unidades paracaidistas. Algunas de ellas sufrieron lo peor de los combates en el bocage durante los meses de Julio y Agosto hallándose debilitadas y sufriendo una lamentable ausencia de unidades de apoyo logístico y servicios, lo cual mermaba su capacidad prolongada de combate.

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El bocage normando, un sitio ideal para perderse... y encontrarse con un pelotón alemán con ganas de fiesta.

Como contrapartida a todas las carencias los comandantes alemanes hicieron el mejor uso posible de sus divisiones de infantería mediante tácticas brillantes y férrea determinación. Dichas tácticas reflejaban las lecciones de 1917-18 refinadas con la experiencia del Frente Oriental. A fin de cuentas el combate en el bocage tenía ciertas semejanzas con la lucha en las trincheras de 1918, y una aparentemente débil primera línea era capaz de bloquear las fuerzas atacantes de modo efectivo. De esta manera, una vez estaba clara la línea de ataque principal del enemigo era posible desplazar unidades adicionales de apoyo a los puntos calientes. Por tanto las tácticas de la infantería alemana eran generalmente más efectivas que las americanas en el bocage. También con una base en la experiencia de la 1ª G.M. una de las piedras angulares de las tácticas alemanas a nivel de escuadra residía en el uso de un arma excelente, la ametralladora MG42. Este arma proporcionaba una base de fuego a la escuadra y las acciones del grupo giraban en torno al equipo de ametralladora. En contraste, la infantería USA basaba su predomino en potencia de fuego en el también excelente M1 Garand, pero no siempre era una idea adecuada. Por otra parte tampoco los BAR (Browning Automatic Rifle) alcanzaban la cadencia de fuego de las ametralladoras alemanas y no llegaron a tener un papel tan predominante como los equipos de MG42. Una compañía de infantería alemana disponía de 13 de esas armas, lo cual, incluso sin estar al 100% ni al 50% de su nivel teórico, la situaba muy por encima de las 2 ametralladoras por compañía en el Ejército USA. La combinación de excelentes defensas naturales y mejor capacidad táctica proporcionaban al ejército alemán una considerable ventaja defensiva. Sin embargo carecían de la capacidad ofensiva necesaria para llevar a cabo operaciones mayores de contraataques a nivel de pequeñas unidades.

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Un equipo de MG42 de la Leibstandarte repartiendo estopa a mansalva.

La debilidad de las formaciones de infantería llevo a la Wehrmacht a incrementar la importancia de las unidades acorazadas y granaderos acorazados (panzer grenadier) para la ejecución de contraataques por encima del nivel regimental. Prueba de ello fue que ante el desgaste de las unidades de infantería en Junio y Julio, especialmente en el área del 7ú Ejército enfrentada al Ejército USA, los comandantes alemanes desplegaran unidades panzer en primera línea, medida contraria a la doctrina oficial que favorecía el uso de tales unidades como reserva móvil de contraataque en los puntos de ruptura del frente. Aunque la producción alemana de carros de combate alcanzó nuevos records durante el verano de 1944, pocas eran las unidades entregadas al Frente Occidental debido, principalmente, a la insistencia de Hitler en la creación de nuevas Brigadas Panzer para reforzar el maltrecho Frente Ruso. Ello fue aún más agravado por la limitada capacidad de reparación de las divisiones acorazadas alemanas y el alto número de averías de sus carros. Por ejemplo, el 1 de Julio el 58% de los Panther y el 42% de los PIV estaban fuera de servicio debido a tareas de mantenimiento. A finales de Julio la carencia de repuestos determinó seriamente la capacidad de combate de las divisiones panzer en Normandía.
Debido a la creencia de Kluge de que el ataque principal aliado vendría del sector británico, el 7ú Ejército de Hausser sufrió la transferencia de un gran número de tropas. El 2ú Cuerpo Paracaidista ocupaba la zona inmediatamente al sur de Saint Lo y se trataba de una unidad relativamente pequeña que incluía a la 3ª División Paracaidista (estacionada al este) y la baqueteada, pero incondicional, 352ª División inmediatamente al sur de Saint Lo. Esta disposición fue adoptada debido a la creencia de que el Ejército USA intentaría romper el frente en las afueras de la ciudad para después girar al sureste sobre la carretera de Torigni-sur-Vire, flanqueando el sector ocupado por los paracaidistas. La 352ª División era, realmente, un conglomerado de no menos de cinco divisiones duramente castigadas durante los primeros combates de Junio y Julio. Sin embargo la 3ª Div. Paracaidista se encontraba en perfectas condiciones y su entrenamiento y moral la hacían perfecta para la lucha en el bocage.
El 84ú Cuerpo era significativamente mayor y cubría el resto del frente desde Sain Lo hasta la costa atlántica. La formación en su centro, opuesta al VII Cuerpo USA, estaba dispuesta en torno a la División Panzer Lehr. Aunque había sido desplegada en Normandía a principios del verano totalmente equipada, la Panzer Lehr había sufrido grandes pérdidas en hombres y material durante los combates de Julio. Para el 23 de Julio había sido reducida a 80 carros, de los cuales sólo 16 Panther y 15 PIV se encontraban operativos. Bajo el mando de la división se encontraba un nuevo batallón de la 5ª Div. Paracaidista, así como el Kampfgruppe Heintz (la reserva de la 275ú División) y el más reducido Kampfgruppe Brosow procedente de la 2ª Div. Panzer SS. El valor de combate total de la Panzer Lehr había sido calificado de Kampfwert III, es decir, limitado a operaciones defensivas. La Panzer Lehr rotaba sus carros operativos dentro y fuera de la línea del frente, como apoyos a las compañías de granaderos allí establecidas. En el momento del inicio de Cobra era el Regimiento Panther la unidad que mayor número de carros había desplegado en primera línea, quedando los semioruga Sdkfz de la división, poco efectivos para la lucha en el bocage, relegados a la retaguardia.

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Y si una MG42 era preocupante tampoco era confeti lo que soltaba una batería de Newlberfher. Seis cohetes, cada uno con una carga de 45 kilos de alto explosivo y un radio de acción de 6 kilómetros.

Hacia el oeste, la recien constituida 5ª Div. Paracaidista había sido desplegada en el sector el 21 de Julio y aunque en buen orden no gozaba de suficiente experiencia en combate. En el sector enfrentado al VII Cuerpo USA, la 17ª SS Panzergrenadier había sido diezmada en el curso de los combates en el sector británico y su capacidad de combate se calificaba de "limitadas operaciones defensivas" (Kampfwert IV). La única unidad realmente preparada del sector era la 2ú SS Panzer Das Reich, ubicada al oeste de Periers. La unidad era famosa por una serie de crímenes de guerra durante su marcha desde el sur de Francia, el más horriblemente notorio en la localidad de Oradour-sur-Glane, que quedó completamente arrasada. Su capacidad ofensiva de combate se encontraba prácticamente intacta, contando con 37 PIV, 41 Panther y 25 StuG operativos a finales de Julio, más carros adicionales en reparación. La misión de la división era impedir al Ejército USA alcanzar la carretera de Avranches, la más importante vía en la Península de Cotentin.
El ala izquierda del VII Ejército incluía la 91ª Div. Paracaidista, de capacidad ofensiva limitada (Kampfwert II), y los restos de la 243ª División, prácticamente inútil para le combate (Kampfwert V). Había dos divisiones en reserva, la 353ª Div. de Infantería, limitada en su efectividad ofensiva, y la 275ª también de Infantería. En total, el VII Ejército contaba con aprox. 30.000 hombres, casi el doble de los 17.000 estimados por el Ejército USA, y 357 carros y cañones de asalto.
La mayor debilidad de la formación alemana se encontraba en lo arriesgado de su despliegue. Hausser había situado sus tres formaciones mecanizadas en la línea del frente, y había dejado dos debilitadas divisiones de infantería en reserva. Esta disposición preocupaba en gran manera a Kluge, que había rectificado un despliegue similar en el vecino sector del Panzer Group West. Tranfiriendo cuatro divisiones de infantería desde Calais y el Sur de Francia, había sido capaz de desplazar las divisiones acorazadas a segunda línea a mediados de Julio. Hausser, por el contrario, había elegido esa formación debido a su desconfianza de que las debilitadas divisiones de infantería fueran capaces de mantener la línea del frente. Kluge aconsejó a Hausser que desplazara la Das Reich y la Panzer Lehr a segunda línea y sustituyera las divisiones de infantería de reserva. Sin embargo Hausser se empeñó en su idea debido al caos que una ruptura del frente supondría en su alargada línea. Mientras esperaba la llegada de la 363ª Div. de Infantería limitó los reajustes a enviar dos compañías de la Das Reich a la reserva. Kluge prefirió no presionar a Hausser más sobre la cuestión, sobre todo teniendo en cuenta su certeza de que el ataque aliado se produciría en el sector británico. Esta suposición se vio reforzada cuando Montgomery lanzó una gran ofensiva blindada el 18 de Julio, la Operación Goodwood.
En cuanto a la fuerza aérea, como ya se apuntó antes, las fuerzas alemanas se encontraban en inferioridad de condiciones. La Luftwaffe se había desgastado durante las campañas de 1944 por la defensa del Reich contra los bombardeos americanos. La escasez de pilotos de caza era tan severa que la Luftwaffe se había visto forzada a acortar sus programas de entrenamiento. Como resultado los nuevos pilotos entraban en combate en clara inferioridad, sufriendo graves pérdidas. El énfasis en la caza llevó a una gradual reducción de la fuerza de caza-bombarderos. Ello unido a la poca experiencia de los mandos alemanes en el soporte aéreo cercano supuso una amarga sorpresa ante la intensa actividad de la fuerza aérea aliada en Normandía. Como uno de los ayudantes de Rommel apuntó, el apoyo aéreo cercano representaba una revolución en el concepto de la guerra ya que "proporcionaba una envolvente no de flanco, sino desde arriba".

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En efecto, "envolvente desde arriba", como muestra este A20 bombardeando el nudo ferroviario de Busigny, en las afueras de París.

El 7ú Ejército de Hausser, en buena lógica, recibió un muy escaso apoyo aéreo durante las operaciones. La Luftflotte III disponía de tres Grupos de Caza en el área de Rennes-Laval a finales de Julio, lo que limitaba su capacidad a 350 aviones operativos por día, con un número de misiones de 450 salidas diurnas y 250 nocturnas. Sin embargo, y a pesar del esfuerzo, sólo pudieron llevarse a cabo entre 30 y 40 salidas por día debido a la superioridad aérea aliada. Por ejempo, el día de mayor actividad de la Luftwaffe, el 28 de Julio, sólo 47 aviones alcanzaron las líneas norteamericanas, y de ellos 14 fueron derribados. Aunque en Julio se dotó a algunos cazas con los nuevos cohetes de 210mm, para mejorar su capacidad contra los blindados aliados, muy pocos de los ataques realizados se mostraron efectivos.
Esta limitada capacidad de la Luftwaffe tuvo sus consecuencias en otros aspectos. El reconocimiento aéreo era difícil y a veces imposible. Las misiones de reconocimiento fotográfico de gran altitud, efectuadas por Me410 y Ju188, debían ser realizadas en salidas nocturnas ayudándose con bengalas, y las misiones de baja altitud con MeBf109 proporcionaban una información fragmentaria y de poco valor. La situación de la Inteligencia Alemana era tan pobre que a finales de Julio de 1944 la Luftwaffe envío dos de sus nuevos Ar234 a reacción a Francia. Los aviones consiguieron recolectar uan información relevante de la cabeza de puente de Normanía el 2 de Agosto ¡casi dos meses después de la invasión! Mientras que las tareas convencionales de inteligencia conseguían proporcionar al 7ú Ejército una información detallada del número de divisiones enemigas en el área del frente, la falta de reconocimiento aéreo hacía imposible conocer la cantidad y composición de las reservas norteamericanas, especialmente sobre la nueva división acorazada desplegada en el frente para la ofensiva que se avecinaba.

¿Y de qué disponían los amigos americanos para enfrentarse al 7ú Ejército de Hausser? Continuara…
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