Publicado: Vie Abr 23, 2010 8:13 pm
por Capitan Miller
Por desgracia, Paradise, no tengo ninguna confianza en que quienes tienen en tal alta consideración a un personaje tan despreciable como este vayan a cambiar de opinión por ver entrevistas tan esclarecedoras como la que nos has traido. Al contrario, seguirán considerándole como un modelo a seguir, que defiende hasta las últimas consecuencias su ideología y esgrime sin ningún pudor las vergonzosas alegaciones que ya todos conocemos.

El único consuelo es que todos estos seguidores del nacionalsocialismo, apóstoles de la pureza racial y negadores de lo innegable, se muestran como realmente son cuando las cosas vienen mal dadas, igual que lo hicieron hace ya 61 años: corriendo a esconderse como las ratas que son, y adoptando falsas identidades o buscando refugio allí donde saben que serán bien recibidos. Todavía no conozco a uno que haya tenido la decencia de entregarse a la justicia y reconocer sin ambages todos y cada uno de los crímenes en los que participó y defendió ideológicamente. Eso, en mi pueblo, es ser un cobarde rastrero, y punto.

Mil veces más valientes, y a años luz en estatura moral, son los que se comportan como Hans Landauer, que tiene el coraje de enfrentar a un criminal como Hafner sin dejarse llevar por los insultos que tiene que escuchar.

Saludos.