Publicado: Mié Dic 10, 2008 4:00 pm
por ParadiseLost
La verdad es que el libro Conversaciones con Albert Speer, mencionado anteriormente, tiene pasajes muy interesantes. Sobretodo a los que me he estado refiriendo en este hilo, cuando Joachim Fest le pregunta a Speer sobre hasta que punto estaba al tanto de las atrocidades del régimen nacionalsocialista.
Extraigo algunos pasajes muy interesantes de las evasivas de Speer:

Para concretar, Siedler le preguntó cuál habría sido su actitud (1), por ejemplo, si en 1941 hubiesen llegado a su poder pruebas irrefutables de los crímenes cometidos en el este. ¿Habría abandonado sus planes arquitectónicos? ¿Habría intervenido ante Bormann? ¿Habría informado a los generales o a los colaboradores en quienes confiaba? ¿O al menos al doctor Brandt, su amigo y el médico personal de Hitler? Pareció confuso por un momento y dijo: "Creo que no". Y añadió: "Pese a todas las pruebas, no me habría creído los informes de esas atrocidades". [...]
Resumiendo una conversación que duró varias horas, la justificación de Speer era la siguiente: desde el principio de la guerra, o poco después, intuía que el régimen tenía un "lado oscuro". Oyó ciertas alusiones que, por poco que hubiera indagado, por fuerza le habrían obligado a sacar unas conclusiones horribles. El problema fue, justamente, que no quiso indagar. Volvió a contar el episodio con Karl Hanke, el Gauleiter de Breslau, quien le habló sobre las cosas espantosas que sucedían en un campo de concentración de la Alta Silesia, refiriéndose evidentemente a Auschwitz. [...]
pero añadió que no llegó a cuestionar el régimen en su totalidad ni, como es lógico, el papel que él desempeñaba dentro de éste. con todo, debe decir que las imágenes de los presos que trabajaban en aquellas catacumbas(2) lo persiguieron durante mucho tiempo, aunque es consciente de que esto constituye una débil o nula justificación. Al final de la conversación, que se ha desarrollado en medio de una tensión desacostumbrada, desarmó todas nuestras críticas al decir, con aire de sinceridad inimitable: "¿Por qué fui leal a un régimen que no sólo permitía esas atrocidades, sino que las ordenaba? Llevo años intentando hallar la respuesta".

1. Se refiere a Speer.
2. Se refiere a la fábrica subterránea de Mittelwerk-Dora.



Después de según que pasajes me hago más a la idea de que Speer sabía. Sabía pero no se pudo demostrar cuando fue juzgado, ya que todo se basó en indicios. Y todos esos indicios apuntan a que a Speer le llegó de sobras la información de las atrocidades que se cometían en el Este, defendiéndose él, al afirmar que no quiso indagar que se escondía tras esas informaciones. Poco probable y más sospechoso el hecho aun, que cuando Fest y compañía lo acorralaban con sus preguntas (sin duda, la parte más interesante del libro), Speer se escondía tras los bastidores de la ingenuidad, tal como los llamaba Fest. O eso, o decía no recordar según que pasajes escabrosos de la historia, como el Progrom de 1938.

Saludos