Publicado: Mié Dic 16, 2009 11:09 am
por Domper
No tengo experiencia en Medicina Legal, al menos no la suficiente como para poder juzgar si una muerte por asfixia se debe a un ahorcamiento incompleto o a un estrangulamiento homicida. Por eso mis afirmaciones no pasan de ser las de alguien sin un conocimiento profundo del tema.

La primera objeción es obvia: nos estamos basando en pruebas fotográficas de calidad deficiente. Con la resolución de esas fotografías (al menos, las que yo he podido ver) resulta casi imposible decir si había o no excoriaciones (por ejemplo). Es posible que yo no haya visto imágenes de mejor calidad que sí estén disponibles, y desde luego no tengo experiencia profesional que en todo esto es un grado.

La segunda: como tú mismo indicas (perdona por el tuteo, sabrás que es costumbre en España con los compañeros) las probabilidades de que sea un homicidio, con esas lesiones, son de un 80 – 90%. Luego deja una “ventana” bastante importante a la posibilidad de un suicidio. Con esa probabilidad y sin otros datos sería difícil conseguir una condena. Y no podemos olvidar que Hess era una persona muy inteligente (otra cosa puede ser su enfermedad mental) y que pudo “preparar” la escena para simular un homicidio. Porque ¿seguro que en todos esos años no leyó nada relacionado con este aspecto? Es difícil simular una “escena” para un profesional con experiencia que analice el caso en primera persona. Pero no tanto si nos basamos sólo en fotografías.

La tercera: en el ahorcamiento incompleto no es imposible (ni mucho menos) que el surco no sea oblicuo. Por ejemplo, no es excepcional que el suicida se estrangule sin suspensión, simplemente atando la cuerda al cuello y a los pies (prefiero no describir la técnica completa para no dar “ideas”, nunca sabemos quien puede estar leyendo sorbe suicidios) con lo que el surco, de ser oblicuo, lo será hacia abajo. En el ahorcamiento incompleto, dependiendo de la posición que busque el suicida, y donde esté el nudo, puede estar el surco en un lugar u otro.

La cuarta: los cables. Spandau era una prisión muy vieja, que se iba a demoler, por lo que dudo que se hiciesen reformas. Los aislantes de la época de la SGM, anteriores a los plásticos, eran con Gutapercha, y bastante gruesos: los de la casa de mis abuelos (hasta que los sustituyeron) y que llegué a ver, casi 10 mm. Otra posibilidad es que Hess dudase de la resistencia de los cables, hubiese conseguido bastante longitud, y los trenzase por su cuenta para fabricar una especie de cuerda.

La quinta: de haber sido un asesinato, es habitual que la víctima presente lesiones debidas a la lucha. Salvo que haya sido previamente sedada, pero en ese caso pueden detectarse los tóxicos (y por lo que sé es sistemático que se busquen en las víctimas de posibles suicidios).

La sexta, relativa: sabemos que Hess sufría una enfermedad mental que con bastante frecuencia se asocia a suicidio. Claro que eso no es de fiar del todo, porque ¿qué mejor forma de quedar impune que asesinar a un posible suicida? Incluso se le podría “ayudar”, ofreciéndole medios para la autolisis, es decir, dejando cables (o lo que sea) “olvidados”.

La séptima, aún más relativa: se requeriría una conspiración que implicase a los guardianes, a los asesinos, a los que investigasen el “suicidio” y a los médicos forenses. No es imposible, pero en ese caso parece un sistema muy alambicado para asesinarlo, y resultaría relativamente sencillo descubrir el “pastel”. Si realmente existiese esa conspiración, bastaría con usar cualquier veneno y que el informe hablase de insuficiencia coronaria (infarto), muy difícil de descartar en la necropsia.

Lo importante sería conocer los informes de la autopsia origina, mejor aún si se documentó el hallazgo del cadáver (para ver la situación del lazo, el nudo si lo había y demás). Todo eso puede falsificarse, pero ya es más difícil. Y si se aprecian discrepancias entre el informe y los documentos, pues nos entendemos.

Saludos