Publicado: Sab Mar 17, 2012 11:58 am
por Wyrm
Hlaine entra de nuevo al refugio, y con una expresión extraña, mira hacia Adler.
- Póngase en contacto con el cuertel del Oberst, Gefreiter.
- ¿Señor? -Responde Adler
- Ya me ha oído...hágalo. -Responde Hlaine, cada vez con menos paciencia hacia Adler, mientras el resto de la tropa prepara sus cosas para partir en cuanto el Oberleutnant diga.
- H1, aqui R1, contesten. H1, aqui R1, contesten...H1, aqui R1, respondan......
- ...
- Señor, nadie contesta. -Dice Adler tras un rato intentando comunicarse
- Maldita sea -Responde Hlaine- Muy bien. Esto es lo que haremos. No tenemos razones para creer lo que el tal Sturmbannführer Rössner nos ha dicho...
- ¡¿Qué?! -Responde Adler mientras se vuelve hacia Hlaine con una mirada fulminante
- Cállese, gefreiter, y deje acabar a su Oberleutnant -Dice Krueger, visiblemente molesto por la reacción de Adler- Continúe señor y perdone la intromisión.
- Como iba diciendo, no tenemos razones para creer lo que el Sturmbannführer nos ha dicho, pero tampoco es razón para desconfiar...del todo. Haremos dos grupos, y mientras uno se quedará aqui, el otro irá al dichoso búnker, pondrá su pellejo en peligro, y le llevará al oficial de las SS sus "valiosas" cajas...unas malditas cajas...
- Iré yo -Responde Krueger
- No, no, seré yo quien vaya. -Le responde Hlaine- Tu te quedarás aquí, al mando, junto con Heinz. Bittrich, Bielki y Böhme vendrán conmigo. Fritz, prepara vendas y tus utensilios. También quiero a Hans y Günter, por si necesitamos fuego de apoyo. Partimos en media hora, estad preparados....
- Señor, ¿Podemos comer antes? -Contesta Fritz, que seguía con las patatas
- Por supuesto. Partiremos después de comer entonces.

Seguido, Hlaine comienza a prepararse un pequeño macuto con lo necesario, mientras Fritz termina de hacer la comida, y los muchachos, deseosos de meter algo caliente al cuerpo, comienzan a sacar sus cuencos metálicos.